En medio del escándalo y luego de que al menos cuatro partidos políticos se acercaran para lanzar como candidato a diputado en las próximas elecciones al vagabundo Givaldo Alves de Souza, se dio a conocer el informe médico sobre el estado de salud de la mujer que fue sorprendida por su esposo luego de tener relaciones sexuales con el indigente en Planaltina, en el Distrito Federal de Brasil.
El caso tuvo lugar el 9 de marzo cuando el entrenador personal Eduardo Alves descubrió a la mujer teniendo sexo con un vagabundo dentro de su coche en Planaltina. El hombre creyó que se trataba de una violación y agredió al vagabundo.
El hecho cobró repercusión internacional y las repercusiones posteriores con las declaraciones de la mujer Sandra Fernandes y las entrevistas que brindó el indigente en los medios de Brasil con mucho carisma, amplificaron el tema.
El informe fue solicitado por el juez el jueves 24 de marzo para probar por qué la mujer no pudo asistir a las audiencias judiciales sobre el caso.
El entrenador personal, que captó a su mujer teniendo sexo con Givaldo Alves de Souza, el vagabundo, había dicho que ella estaba en un “exabrupto” durante la traición y luego confirmó que continuará su relación con la mujer.
Informe médico afirma que Sandra Fernandes tiene trastornos desde 2017
Según el portal NE10, el informe señala que la mujer tiene antecedentes de enfermedad mental y no podría hablar de lo sucedido. Según el documento, la mujer presenta trastornos psicológicos desde 2017, asegurá citando a IstoÉ.
El informe muestra su historial mental hasta la indicación de hospitalización. La mujer tendría “comportamiento inadecuado, falso reconocimiento, donación de pertenencias, resistencia a vestirse”.
Denuncias e investigaciones policiales
En el caso del vagabundo se analiza la posibilidad de violación. La mujer había dicho que la relación era consentida y que no había ingerido bebidas alcohólicas. El vagabundo Givaldo dio entrevistas y dio detalles sobre su relación con su esposa a fines de la semana pasada. Las declaraciones resonaron en las redes sociales y el padre de la mujer decidió demandar al indigente por difamación.
El entrenador personal interpuso también una demanda contra Meta, la empresa propietaria de Facebook, Instagram y Whastapp, pidiendo que se eliminen de las redes sociales los perfiles falsos que difaman la imagen de su esposa. En la decisión, el juez pide al hombre que indique “en las solicitudes, en forma específica y expresa, los localizadores (URL) de las páginas/perfiles electrónicos que contienen la información/imágenes cuya eliminación se pretende”.
Entrevista y polémica
El miércoles 23 de marzo, Givaldo dio una entrevista y reafirmó que el acto sexual fue consentido.
Según Givaldo, Sandra Fernandes habría insistido en que se subiera al auto incluso después de decir que no se había “bañado”. “Iba caminando por la calle y escuché un grito: ‘Chico, chico’. Miré hacia atrás y solo estaba yo. Y me lo confirmó diciendo: ‘¿Quieres salir conmigo?’. ‘Señora, no tengo dinero, no tengo hogar. Ni siquiera tengo dinero para llevarte al hotel’. Entonces ella dijo: ‘Podría estar en mi auto’”, dijo.
Sobre las agresiones sufridas, Givaldo dice que reaccionó. “Intercambiamos golpes”. El hombre sin hogar también explicó que pensó que estaba siendo objeto de represalias después de presenciar a un conductor en un automóvil que arrastraba deliberadamente a una mujer en el área unos días antes.
Dijo que recién supo que la mujer estaba casada cuando estaba recibiendo atención médica en el hospital. Givaldo sufrió una inflamación en el ojo y se quedó con una costilla rota. “No me arrepiento”, dijo cuando se le preguntó sobre toda la situación.
“El matrimonio continúa”, aseguró el personal trainer Eduardo Alves de Sousa
El entrenador personal Eduardo Alves de Sousa, de 31 años, dijo que su matrimonio con Sandra Fernandes continúa luego de agredir al indigente que se acostó con ella en el automóvil.
“No es por un factor que se dio, como un brote, que no voy a conocer a la persona con la que conviví durante 3 años”, dijo el entrenador personal en entrevista con el portal Metrópoles. “Mi matrimonio continúa”, destacó Eduardo en entrevista con el columnista Léo Dias.
“Lo sé Sandra, no es su naturaleza”, dijo el personal, asegurando que la mujer no estaba usando ningún medicamento. “Tenemos una relación de 3 años. Durante esos años, no ha habido ningún caso en el que ella se haya asustado”.
También según Eduardo, Sandra había comenzado recientemente a asistir a la iglesia, solo tres días antes. La Policía Civil investiga el caso en secreto, según el delegado Diogo Cavalcante, de la DP 16 de Planaltina.
El entrenador personal afirma que la esposa está ingresada en un hospital público. “Los amigos y la familia han sido un gran apoyo. Me excluí de la sociedad, evito salir. Solo salgo a ver a Sandra. Cerré Instagram, el mío y el de ella, no puedo trabajar. Las raras veces que voy a algún lado, escucho risitas”, relató Eduardo.
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