Luego de comenzar a movilizarse en septiembre de 2020 y de concretar siete marchas en el último tramo del año que pasó, este miércoles nuevamente familias de víctimas de abuso volvieron a las calles de Río Gallegos para hacerse escuchar y que la Justicia actúe con mayor rapidez y celeridad en las distintas causas por las que reclaman.
La convocatoria fue frente al Tribunal Superior de Justicia (TSJ), ubicado en pleno centro de la capital, sobre avenida Pte. Néstor Carlos Kirchner. De allí, marcharon hasta la Cámara Oral.
Como es habitual, desplegaron grandes pancartas y carteles: “Justicia”, “Las familias rompen el silencio ¡yo sí te creo”, “Con los niños no”, entre otros. Además, de exponer a los denuncias con imágenes de sus rostros y nombres.
Mientras que los protestantes cortaron la circulación vehicular en avenida Kirchner, el móvil de LU12 AM680 entrevistó a dos de las referentes del grupo: Samantha y Viviana.
El caso Maldonado impulsó las marchas.
La primera que habló fue Samantha. Ella se refirió a su caso: el acoso sexual por parte del policía (hoy echado de la fuerza) Walter Cáceres hacía su hija. Criticó que la causa “está estancada” desde hace siete meses, pero que “no vamos a bajar los brazos hasta que cada una de las causas vayan saliendo, pedimos celeridad y rapidez a los jueces”.
En ese sentido, adelantó que el próximo sábado 27 de febrero a las 22:30 realizarán una marcha de antorchas.
“Nos parece una vergüenza que los niños no puedan salir a la calle”, apuntó la entrevistada, al referirse al caso difundido recientemente de manera exclusiva por La Opinión Austral, en el que una víctima vio a su abusador (C.A., municipal condenado) tomar sol en la Casa Pregreso. “No me parece, ¿cuándo empieza a sanar si lo ve ahí tranquilo como sí nada”, cuestionó.
Además, aprovechó la ocasión para cuestionar cómo se desenvolvieron los juzgados durante 2020, un año signado por la pandemia y ferias extraordinarias, prorrogadas una y otra vez por el TSJ.
“Muchos, o casi todos, seguimos trabajando, y que la Justicia se la haya pasado de feria es una vergüenza. Si no están a la altura de las circunstancias tienen que dar un paso al costado, porque las causas siguen y los violadores y pedófilos siguen y ellos están en sus casas cobrando fortunas. Que se vayan y venga gente que realmente tenga empatía y crea en los niños”, sostuvo.
Foto: José Silva/La Opinión Austral
Por último, marcó que el grupo está muy unido y con psicólogos que ayudan a las víctimas a seguir con fuerza. “Los chicos se dieron cuenta que si la Justicia no resuelve, los papás y las mamás vamos a resolver. Han sacado energía de donde no las tienen y están con nosotros”, dijo.
“Esperamos que haya prontas resoluciones en las causas. No vamos a bajar los brazos y todos los meses nos van a tener acá (por el TSJ), y en los juzgados, reclamando”, cerró.
Por su parte, Vanina agregó que si bien “está muy frenado todo”, y los únicos casos en los que se ha avanzado son los de ellas dos y también el de Emilio Maldonado (expresidente del Concejo Deliberante, hoy preso por la denuncia de abuso a dos niñas), “no vamos a parar y trataremos de conseguir cosas positivas en todos”.
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