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Los buñuelos son pequeñas bolitas dulces realizadas a base de harina que suelen evocar recuerdos de la infancia. Aunque su origen se remonta a la tradición española, este delicioso manjar supo ganarse un lugar en la cultura culinaria de Argentina, adaptándose a los sabores locales y convirtiéndose en un clásico de la merienda.

Se cree que llegaron a la Argentina durante la época de la colonización española, y desde entonces se han transmitido de generación en generación, pasando de abuelas a madres y de madres a hijos. En cada hogar argentino, el buñuelo es una receta secreta que se guarda y se comparte solo con los más allegados.

Con ingredientes básicos como harina, huevos, azúcar y levadura, se puede crear un bocado de placer que conquista los paladares más exigentes. La masa, suave y esponjosa, se fríe en aceite hasta dorarse, y luego se cubre de azúcar glas o se baña en almíbar, según la preferencia de cada uno.

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Receta de buñuelos

Ingredientes

  • 1 huevo
  • Ralladura de naranja, limón o esencia de vainilla
  • 125 grs de harina leudante
  • 50 grs de azúcar
  • 60 cc. de leche
  • Aceite para freír
  • 50 grs. de azúcar impalpable

¿Cómo preparar buñuelos caseros?

  1. Colocar en un bol el huevo, la esencia de vainilla o ralladura de limón o de naranja. Agregar azúcar y comenzar a batir.
  2. Añadir la harina leudante poco a poco y la leche. Remover bien para que quede una mezcla homogénea y sin grumos. Tiene que quedar una consistencia espesa.
  3. Con las manos húmedas armar las bolitas.
  4. Una vez listos, calentar aceite en una sartén profunda y cocinar los buñuelos, vigilando constantemente para que no se quemen.
  5. Cubrir con azúcar impalpable.
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