A pesar de la pandemia, los fines de semana de calor en Río Gallegos reúnen cientos de personas en la costanera que salen a disfrutar del aire libre y el sol. Sin embargo, las tardes distendidas en la “ría” dejan su lado B.
En su mayoría, las reuniones bajo el sol derivan muchas veces en el consumo de bebidas alcohólicas, pero el problema está en el “después”. A la hora de retirarse del lugar, muchas personas deciden dejar la basura esparcida en vez de llevarla hasta un cesto de residuos.
Foto: José Silva / La Opinión Austral
Haciendo un recorrido por la costa, La Opinión Austral pudo registrar varios puntos con acumulación de latas, botellas y cartones de vino contaminando el ambiente y que usualmente terminan flotando en el agua. La responsabilidad ciudadana faltó una vez más tras una jornada de calor y disfrute.
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