Your browser doesn’t support HTML5 audio
Un noble italiano que eligió la cruz: San Cayetano nació en octubre de 1480 en Vicenza, Italia, en el seno de una noble familia. Fue doctor en Derecho Civil y Canónico por la Universidad de Padua. Tras ingresar en el clero, trabajó en la Curia Romana durante el pontificado de Julio II, donde llegó a ocupar el cargo de Protonotario Apostólico.
Su vida espiritual se consolidó cuando se unió al Oratorio del Divino Amor y fue ordenado sacerdote en 1516. Desde entonces, se dedicó intensamente a la oración, al estudio de las Escrituras y a las obras de caridad, con una opción preferencial por los más pobres y los enfermos.
Uno de los gestos más revolucionarios de San Cayetano fue su compromiso con los enfermos denominados “incurables”, aquellos que en su tiempo eran descartados o abandonados. En 1522 fundó en Venecia el Hospital de Incurables, junto a las patricias María Malpier y Marina Grimani, ofreciendo cuidados médicos, consuelo espiritual y acompañamiento hasta el final de la vida.
Años más tarde, replicó esta obra en Vicenza y colaboró con el Hospital de San Giacomo in Augusta, en Roma. Su ejemplo sentó precedentes en lo que hoy conocemos como cuidados paliativos, siempre guiado por un principio evangélico profundo: ver a Cristo en cada enfermo y morir pobre entre los pobres.
Fundación de los Teatinos: un regreso al Evangelio
El 14 de septiembre de 1524, junto a Juan Pedro Carafa (futuro Papa Paulo IV), Bonifacio de’ Colli y Pablo Consiglieri, San Cayetano fundó la Orden de los Clérigos Regulares Teatinos. Inspirados en el estilo de vida apostólico, renunciaron a las rentas fijas y vivieron solo de la Providencia, confiando plenamente en que “quien busca el Reino de Dios, todo lo demás le será dado”.
La Orden fue aprobada por Clemente VII y creció en Europa y Asia. Sus miembros fueron ejemplo de vida austera, oración profunda, dedicación sacramental y caridad activa, reformando el clero desde adentro con su testimonio de vida.
San Andrés della Valle: la basílica teatina de Roma
En el corazón de Roma se levanta la imponente Basílica de San Andrés della Valle, sede general de los Teatinos. Construida desde 1591, con una de las cúpulas más altas de la ciudad, fue diseñada por arquitectos del Barroco como Carlo Maderno y Giacomo della Porta.
Allí reposan los restos de los Papas Pío II y Pío III, y del cardenal teatino San Josemaría Tomasi. Elevada a basílica menor en 1966, este templo refleja el espíritu de la Orden: arte, liturgia solemne, vida fraterna y una espiritualidad centrada en la humildad, la Providencia y el servicio a los más vulnerables.
La obra teatina en Argentina: 75 años bajo la guía del Santo del pan y del trabajo
La Orden de los Clérigos Regulares Teatinos, fundada por San Cayetano de Thiene, llegó a la Argentina en 1946. El primer destino fue Villa Adelina, donde se inició una intensa labor pastoral, educativa y social.
En 1959 se construyó el templo parroquial San Andrés Avelino, y en 1964 se fundó el Colegio San Cayetano, modelo de integración educativa. En 1984 nació la Casa de Formación San Cayetano, cuna de vocaciones locales. En 2007 se creó la Parroquia San Cayetano, consolidando la identidad teatina en la zona norte del conurbano bonaerense.
En La Plata, los teatinos fundaron el Santuario Arquidiocesano San Cayetano en 1999, junto con un colegio y un hogar de día. También estuvieron presentes en las parroquias del Santo Cristo y de Nuestra Señora de la Salud en Los Hornos.
Entre los sacerdotes que marcaron la historia de la Orden en el país destacan Antonio Sagrera (en proceso de canonización), Miguel Mas, Juan Nadal, Pedro Romero y Fructuoso Ochoa. Actualmente, los teatinos mantienen su misión en Villa Adelina, Boulogne Sur Mer, La Plata y Empedrado (Corrientes), siempre bajo el legado de su fundador.
La primera devoción argentina: Mama Antula y San Cayetano
La primera devoción argentina a San Cayetano fue iniciada por Mama Antula, María Antonia de Paz y Figueroa, canonizada en 2024. Al llegar a Buenos Aires en 1793, construyó una capilla donde colocó una imagen del santo, aún desconocido en América, adoptándolo como patrono de su obra evangelizadora.
En la Santa Casa de Ejercicios Espirituales, donde aún se conserva esa imagen, se le atribuyen milagros realizados por intercesión de San Cayetano. Desde entonces, la devoción creció silenciosa hasta eclosionar en el siglo XX.
El trigo: símbolo argentino
Mientras en el resto del mundo San Cayetano sostiene al Niño Jesús, en Argentina lleva también una espiga de trigo, símbolo del pan. Esa imagen surgió en los años ’30, durante la gran crisis económica. El padre Domingo Falgioni, desde la parroquia de Liniers, impulsó su culto como protector de los trabajadores y difundió su imagen con espigas a través del diario El Pueblo.
Así nació el título que lo acompaña hasta hoy: “Patrono del pan y del trabajo”.
La devoción en Liniers y en todo el país
Cada 7 de agosto, desde la madrugada, cientos de miles de personas llegan al barrio porteño de Liniers, al Santuario de San Cayetano, epicentro de la devoción popular más emblemática de la Argentina. La mayoría lo hace a pie, con fotos, cartas, espigas de trigo o simplemente con fe. Algunos caminan durante días desde provincias enteras.
El Santuario, erigido en 1949 sobre la antigua capilla levantada por Mama Antula, fue declarado Parroquia en 1913 y Santuario en 1937. Su imagen central —el Santo con el Niño en brazos y la espiga— es uno de los íconos más queridos del país.
Pero la devoción no se limita a Buenos Aires. En todo el país hay capillas, parroquias, altares callejeros y fiestas patronales en su honor. En el norte argentino, se lo honra con misas criollas, peregrinaciones y rezos por la lluvia o el sustento. En la Patagonia, camioneros, petroleros y trabajadores rurales lo veneran en rutas y parajes. En el Litoral, comunidades guaraníes lo incorporan a sus tradiciones populares.
También se lo encuentra en casas humildes, ferias, comedores, sindicatos y organizaciones barriales. El 7 de cada mes, las misas en su honor convocan multitudes. San Cayetano se volvió el rostro del pueblo creyente que lucha, espera y agradece. El que escucha sin juzgar. El que sostiene en la adversidad.
Y allí, en Liniers, en una pared lateral del templo, una imagen de Mama Antula observa todo en silencio. Como si supiera que esa fe sencilla que ella sembró en 1793 sigue viva en cada paso, en cada espiga, en cada oración.
San Cayetano en la Patagonia
Cada 7 de agosto, miles de fieles de todo el país se movilizan para rendir homenaje a San Cayetano, patrono del pan y del trabajo. Aunque la imagen más emblemática es la del Santuario de Liniers en Buenos Aires, en el sur argentino —especialmente en la provincia de Santa Cruz— también se celebra con profundo fervor. En Río Gallegos, Caleta Olivia, Las Heras y otras ciudades, la devoción al santo se mezcla con la historia de la migración, la cultura del esfuerzo y la lucha diaria por salir adelante.
Río Gallegos se prepara para vivir la festividad de San Cayetano:
En la capital provincial, el Santuario San Cayetano, ubicado en la calle Jofré de Loaiza 292, es el epicentro de la celebración. Bajo el lema “Con San Cayetano todos hermanos, peregrinos de esperanza”, la comunidad lleva adelante un extenso programa desde el 29 de julio hasta el 7 de agosto, con misa diaria a las 19:00 hs y actividades culturales y solidarias.
Intenciones de cada día durante la novena:
- 29/07 – Por la educación
- 30/07 – Por los desocupados
- 31/07 – Por las vocaciones
- 01/08 – Por el personal de sanidad
- 02/08 – Por la paz
- 03/08 – Por los enfermos y afligidos
- 04/08 – Por la patria
- 05/08 – Por los migrantes
- 06/08 – Por las familias
Actividades destacadas:
- Venta solidaria de empanadas (28/07)
- Misa especial por trabajadores y niños (03/08, 19 hs)
- Concierto de la Escuela Re-Si (03/08, 20 hs)
- Bendición de herramientas y choferes (04/08)
Vigilia y procesión:
- Martes 06/08, 23:30 hs: procesión con antorchas desde el Santuario
- 00:00 hs (7/08): primera misa a cargo del Pbro. Luis Hetze
Misas del miércoles 7 de agosto:
- 07:00 hs – Pbro. Luis Hetze
- 10:00 hs – Pbro. Cristian Desbouts
- 12:00 hs – Pbro. Ariel Silguero
- 15:00 hs – Pbro. Sergio Soto
- 16:00 hs – Caravana desde la Catedral
- 18:00 hs – Pbro. Daniel Ledesma
- 19:00 hs – Misa central presidida por el Obispo Ignacio Medina
Caleta Olivia: la fe del barrio San Cayetano colma las calles y el corazón
En Caleta Olivia, la celebración se vive con fuerza en el Barrio San Cayetano, donde la comunidad parroquial organizó un programa completo que combina espiritualidad, acción social y participación popular.
Novena: Del 29 de julio al 6 de agosto, todos los días a las 17:30 hs
Caravana:Viernes 2 de agosto, salida desde la capilla a las 16:00 hs
Vigilia:Martes 6 de agosto, desde las 21:30 hs
Misas del miércoles 7 de agosto:
- 08:00 hs. Padre Raúl Dominguez
- 10:00 hs. Padre Marcos
- 14:00 hs. Diácono Mario
- 18:00 hs. Padre Raúl Dominguez
- 21:00 hs. Padre Héctor
Procesión central: Miércoles 7 de agosto, salida desde la Plaza 20 de Noviembre a las 16:00 hs
Se invita a llevar alimentos no perecederos como ofrenda solidaria. La participación es masiva y el fervor se refleja en altares, cánticos y gestos de agradecimiento. La fe se renueva cada año con espíritu de comunidad.
Las Heras: novena y misa central en la Parroquia San José
En la ciudad petrolera de Las Heras, la devoción se manifiesta con fuerte sentido comunitario. La novena comenzó el martes 29 de julio y se reza todos los días a las 18:30 hs en la Parroquia San José.
La misa central será el miércoles 7 de agosto a las 19:00 hs, y finalizará con la bendición del Pan y el agua.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario