Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Ayrton Viollaz, y Luciano, Ciro y Lucas Pertossi están imputados por “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”, un delito cuyo castigo es la prisión perpetua. Es por haber asesinado a golpes a Fernando Báez Sosa el 18 de enero de 2020, a la salida del boliche Le Brique, de la ciudad balnearia de Villa Gesell.

A comienzos de enero inició el juicio, que ahora comenzará con los alegatos de la querella y este miércoles será el turno de la defensa. Durante la etapa de pruebas solicitaron declarar Lucas, Luciano y Ciro Pertossi, Máximo Thomsen y Blas Cinalli; mientras que Matías Benicelli, Ayrton Viollaz y Enzo Comelli aptaron por no hacerlo.

“Quiero empezar diciendo que lamento mucho todo lo que pasó, fue una tragedia terrible, falleció un chico de mi misma edad. No hubo ningún plan. No hubo planificación. No hubo ningún rol”, había dicho Cinalli frente al Tribunal de Dolores.

Ahora trascendió que el Servicio Penitenciario secuestró los celulares de Comelli y Cinalli. Según consignó el periodista Mauro Szeta a través de su cuenta de Twitter, desde sus dispositivos, los acusados manejaban una cuenta de Instagram que apoyaba a los rugbiers.

La cuenta de Instagram que fue cerrada minutos antes del comienzo de los alegatos

La cuenta (@rugbiers.zarate), que fue cerrada este miércoles minutos antes del inicio de los alegatos, tenía más de 5.500 seguidores, no contaba con publicaciones en su feed, pero sí contaba con decenas de posteos en las historias. Todas en defensa de los imputados.  “Basta de condena social. Basta de mentiras. Basta de violencia. Basta de odio”, se leía.

Algunos de los posteos en las historias de Instagram

En el mismo tono, también manejaban una cuenta en la red social Twitter (@RugbiersZarate). “A todos, como sociedad, nos duele lo ocurrido: Fernando podría ser un nieto, hijo o amigo de cualquiera de nosotors…Pero, por otra parte, los ocho acusados también”, consideraban en un tweet de ese usuario, que también fue eliminado.

“Si la seguridad del boliche no sacaba tan violentamente a Máximo (Thomsen), esto no hubiese pasado. Lo violentaron”, acusaron.

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