Una mujer de 80 años se encuentra en la ciudad chubutense de Rawson desde el 21 de mayo luego de ser derivada a una clínica cardiovascular por problemas en el corazón. La estadía debería haber durado 10 días; sin embargo, desde PAMI todavía no le han gestionado correctamente su regreso a Río Gallegos.
La mujer de 80 años necesita someterse a una cirugía de válvula y otros problemas del corazón, y por ello debió ser derivada a una clínica especializada en cardiovascular de la localidad de Rawson, Chubut. El 21 de mayo arribó junto a una acompañante, Cecilia, quien se comunicó esta tarde con el programa “Juntos y Re-Sueltos” por Radio LU12 AM680.
Cecilia contó que en un principio la derivación sería por diez días, pero que en el transcurso la paciente, de nombre Ana Millalonco, presentó un cuadro de anemia y no se pudo proceder a la operación. A esta situación se le sumó que la mujer tampoco permite que se hagan transfusiones sanguíneas, ya que profesa la religión de testigo de Jehová.
Sin embargo, al verse suspendida la operación y tener que volver a la capital santacruceña para tratar la anemia de Ana, tuvieron otra serie de problemas en cuanto a la gestión del traslado por parte de PAMI. “El 28 de mayo la doctora pide el traslado al Hospital Regional de Río Gallegos”, indicó la acompañante, pero luego “nos llega la información de que no podemos ser trasladadas porque no hay ambulancia”.
Después de cinco días, vuelven a realizar el pedido a PAMI para que envíen una ambulancia para su traslado (ya que es la única vía por la que pueden regresar, en este caso). Finalmente, el 8 de junio una ambulancia contratada por la obra social las busca para emprender la vuelta a Río Gallegos. Pero desafortunadamente, a pocos kilómetros de comenzado el viaje, el vehículo ambulatorio se rompe, imposibilitando nuevamente el traslado.
Desde esa fecha hasta hoy, no han recibido novedades para regresar a la ciudad. “Acá el problema es el PAMI”, dijo Cecilia, y agregó contundentemente: “Esto es un abandono de persona“. Además comentó que desde PAMI le habrían respondido que ante “cualquier novedad te vamos a informar”.
En cuanto a la salud de Ana, informó que se encuentra dentro del todo estable, pero que “está totalmente desanimada”. Y acotó que “el día 8 estaba feliz y contenta porque nos íbamos. Desde ese día hasta ahora está deprimida, bajoneada”.
“No hay que llegar al punto de que yo tenga que salir en la radio u otros medios”, comentó por último la acompañante de Ana, añadiendo que “hay muchos casos con el mismo problema, en los que terminan buscando un abogado porque las cosas no se las solucionan enseguida”.
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