Rafael Grossi, de su pasión por Estudiantes a ser el mediador inesperado en un mundo en guerra

Por Hugo Ferrer

“¡Goooooooooool!”

Sábado 13 de diciembre. 11.629 kilómetros separan la ciudad de Santiago del Estero de Viena. Se jugó la final entre Racing Club y Estudiantes de La Plata. En la definición por penales, cerca de la medianoche de Argentina, a las cuatro de la mañana en Austria, se gritó como un gol (casi como el del empate agónico de Guido Carrillo) cuando el arquero uruguayo Fernando Muslera se tiró a su derecha ante el remate del defensor Franco Pardo y la pelota pegó en el palo. Locura. “¡Ganamos!”, “¡Somos campeones!”. Desde muy lejos un argentino y fanático de Estudiantes, festejaba a su manera.

Sábado 20 de diciembre. En el estadio de San Nicolás, en la provincia de Buenos Aires, Estudiantes definió al Trofeo de Campeones contra Platense. A los 46 del segundo tiempo Alario hizo el 2 a 1. “¡Campeones!”

Rafael Grossi (64) es director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), ex embajador argentino en Austria, y un firme candidato al cargo de secretario general de la Organización de las Naciones Unidas.

Alicia Sagardía, su mamá, era escultora. Su papá, Héctor Grossi, fue periodista. Tiene ocho hijos (siete mujeres y un varón; Emilia y Benjamín los más fanáticos de Estudiantes), y un nieto, que es de Huracán.

Su pasión “pincharrata” lo desvela, literal. Conoce con precisión “bilardiana” desde las formaciones de los equipos, partidos célebres, anécdotas. Sabe de tablones, corridas en las canchas y lo que es gritar un gol en la popular.

Entre el lenguaje diplomático y “futbolero”, habló en exclusivo con Grupo Crónica.

– Yo soy porteño, pero soy medio platense de adopción porque mamá era de La Plata. En mi infancia pasaba muchos fines de semana allá,  tenía primos, y además por mi generación, yo viví todo aquel Estudiantes campeón. Iba a la cancha desde chiquito. Con mi hermano Marco íbamos a los 10, 11 años (en una Argentina mucho más segura) a cualquier lado: Rosario, Banfield, Lanús, en ómnibus. Muchas veces nos tocaba viajar con la hinchada contraria.

– ¿Qué época de Estudiantes recuerda? ¿Qué equipo lo marcó?

– Todo, te puedo decir el equipo de memoria del campeón Metropolitano del año 67: Poletti, Aguirre Suárez, Madero, Manera, Pachamé, Malbernat, Ribaudo, Bilardo, Conigliaro, Flores, Echecopar y Verón. Vengo de una familia mixta: boquense y de Estudiantes. Papá era de Boca, aunque no le llamaba tanto la atención al fútbol; mamá, sí. ¡Era pincharrata! Mi hermano Marco y yo nos hicimos muy hinchas. Mi hermana Valeria siguió a papá y es de Boca. ¡Todos contentos!

Rafael Grossi mantiene viva la definición contra Racing.

-Ví la final con mi hijo Benjamín. Estábamos ahí en el silencio de la noche vienesa, gritando como locos por Estudiantes. El momento del penal fue tremendo. Fue una emoción muy grande, y además cuando íbamos perdiendo, cuando parecía que todo terminaba, en el minuto 47, el cabezazo de Carrillo, fue una alegría muy grande. Con mucho respeto por Racing, que es un gran equipo, y además un gran rival de aquellos años. En los ’60 éramos nosotros, eran ellos, y tengo un gran recuerdo de aquellos equipazos. Yo seguí mucho el Estudiantes del 82, 83, 84. Claro, ese fue el otro gran momento, ya de grande lo viví, lo pude volver a ver campeón. Russo, Trobbiani, con Sabella, que tocaba muy lindo; y después el gran regreso de La Brujita Verón, en el 2006, en la final con Boca, que se le escapó el título increíblemente. Aquel 13 de diciembre del 2006 se ha convertido en una especie de fecha simbólica para Estudiantes, porque ahí volvimos a ganar…

Han pasado sólo minutos y la final contra Platense también sigue latente en su piel.

– Volví a la Argentina el viernes 19 a la medianoche. No pude ir a la cancha. La vi con mi hermano Marco. Nos dijimos: “¡Hace 45 años que lo vemos campeón!”. Así son las emociones que nos da el fútbol, independientemente de la camiseta que sigas.

Luis Alvarez Gelvez, un destacado dirigente del “pincharrata”, relató a Grupo Crónica cómo conoció a Rafael Grossi: “Tengo muchos contactos de hinchas de Estudiantes diplomáticos. Tenía referencia de que el embajador argentino en Austria era ‘pincharrata’. Lo googleé, lo contacté y a partir de ahí hicimos una lindísima amistad. En 2019, ni bien asumió en la OIEA  vino a recorrer el estadio UNO de La Plata. En reconocimiento a su trayectoria y fidelidad, le entregamos el libro sobre los 110 años de nuestra historia. ¡Es un capo!”

Alvarez Gelvez sumó otra anécdota: ““Grossi estaba en Turquía en una convención mundial sobre el calentamiento global donde participaba una eminencia turca en el tema, el director de la Agencia de Energía de la OCDE, Fatih Birol. Me llamó y me dijo: ‘Luis, si me prometés que me reponés la camiseta que me regalaste, yo se la regalo’. Y no solamente se la regaló, sino que le hizo estampar su nombre. Es un gran militante de Estudiantes en todo el mundo.”

“Honor y privilegio” 

El 26 de noviembre Pablo Quirno, ministro de relaciones exteriores de Argentina hizo un posteo clave: “Es un honor y un privilegio presentar hoy la candidatura de Rafael Grossi (@rafaelmgrossi) al cargo de Secretario General de las Naciones Unidas.” (https://x.com/pabloquirno/status/1993781657015603619). Los elogios y argumentos de por qué el gobierno de Javier Milei lo apoya, tuvieron un sello final.  Su hermano Marco (@GrossiMarcoO) publicó en X: “¡Orgullo, hermano! ¡Te lo mereces!”. Pincharrata como él, le infló el pecho como jamás le había pasado.

El agasajo e impulso del CARI

Este lunes 22 de diciembre a las 19, en La Rural, el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI) le realizará una recepción muy especial. Su regresó al país para las Fiestas coincide con este encuentro.

Diplomáticos, académicos, integrantes del gobierno nacional y de las provincias le mostrarán su apoyo. Además, habrá un invitado especial: Luis Alvarez Gelvez, el ex dirigente de Estudiantes. “Me invitó y me pidió que lo acompañe. Ahí estaré”, le confesó a Grupo Crónica.

Para Grossi, Camino a las Naciones Unidas, es muy relevante.

-Lo del lunes en el CARI va a ser algo muy lindo. Si bien  mi candidatura para las Naciones Unidas ya fue anunciada, lógicamente volver a casa y estar rodeado por mi gente, por mis colegas de la Cancillería, por el periodismo argentino, por el público en general, es una sensación muy bonita. Siempre juego de visitante, para ponerlo en términos futbolísticos, ¿no? Entonces, estar un rato en casa y poder explicarle a mi sociedad y a mi país lo que significa las Naciones Unidas y lo que significa la posibilidad de que uno de nosotros, que un argentino, llegue a esa posición. Así que estoy muy agradecido. Primero, al canciller canciller Quirno, que también he escuchado que es muy futbolero. El canciller ha sido muy generoso. Por supuesto, le agradezco al presidente de la Nación que me haya elegido. Y luego, obviamente, el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI), que es una institución muy prestigiosa, que haya decidido apoyarme también tan generosamente. Es algo importante para la Argentina. Somos un país con mucho más para dar, también para la región porque Latinoamérica y el Caribe es una región que solamente tuvo un gran secretario general, el peruano Javier Pérez de Cuellar, y después nunca más. Y ahora, puede ser que nos corresponda a nosotros. Tengo que hacer las cosas muy bien y tengo que tratar de convencer a los que cuentan, que son los que van a decidir, en particular los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad: China, Francia, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos, pero también a otros países  muy relevantes.

El apoyo y la votación

Los 193 Estados de las Naciones Unidas comenzarán a elegir al nuevo Secretario General a partir de junio de 2026 cuando arranque el proceso electivo. Se estima que podría extenderse hasta octubre. De esta manera, se inicia con los “hearings” y sigue luego con los “straw polls”. El 1 de enero de 2027 será la fecha de asunción del 10° secretario general.

El presidente paraguayo Santiago Peña, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, ya han manifestado su apoyo.

La expresidenta de Chile, Michelle Bachelet y la exvicepresidenta de Costa Rica, Rebeca Grynspan, serían algunos de los contrincantes.

• ¿Por qué lo tienen que elegir a usted?

– Considero que más que una visión o una promesa que yo le pueda decir a la gente, creo que en todo hay que tener una carrera y una vida que pruebe lo que vos podés hacer ¿No? Como en el fútbol, que hemos hablado tanto vos y yo. ‘¿Dónde jugaste vos?’, como decimos en el fútbol, ‘¿A quién le ganaste?’ Entonces, a través de mi propia experiencia sé lo que puedo aportar como secretario general. En la guerra entre Rusia y Ucrania, he logrado tender puentes y mantener un diálogo permanente tanto con Putin como con Zelensky, lo que estamos haciendo en el Medio Oriente, en Irán, con el programa nuclear de Irán, y en otros lugares del mundo. Pudimos acercar posiciones y lograr soluciones concretas. Quiero unas naciones unidas; pero, como a mí me gusta decir: unas Naciones Unidas que funcionen. ⁠Si le pregunta a un amigo, un familiar y hasta a un desconocido, ¿qué piensan las Naciones Unidas? Muy probablemente van a decir es que mucho no sirve. O que es una linda idea, romántica, pero que no se ve que es lo que logra. Y eso, creo yo, que hay que admitir que tiene un grado de realidad. Porque cuando ves las guerras que hay en el mundo, no ves a las Naciones Unidas mínimamente involucradas allí.

En mi gestión en la OIEA he probado que se pueden acercar posiciones cuando uno tiene una visión imparcial. Volvamos al fútbol que es una buena metáfora de la realidad. La imparcialidad es como ser el referí en la cancha. Es duro, es duro. Y por ahí te van a insultar de las dos tribunas. Pero si sos un buen árbitro la gente al final va a decir ‘Este tipo pita bien’. O si no lo sos van a decir que ‘Es un bombero’. Entonces hay que tener esa ecuanimidad, esa imparcialidad para acercarse a los problemas y dar soluciones que la gente acepte porque son realistas y porque son útiles. Ser imparcial no es ser indiferente. Creo que pasa por ahí un poco el tema. Porque vos tenés corazón, un corazón que late y una emoción. Y vos sabés por ahí que alguien está haciendo algo mal. Pero si yo a esa persona voy y le digo ‘Usted es un criminal’, no va a querer hablar conmigo. Se terminó la conversación y yo tengo que tener la capacidad de sentarme con esa persona Y que la conversación continúe. De entender lo que dice y de proponerle cosas. Y para eso se crearon las Naciones Unidas. Si no, ¿para qué fueron creadas?

Miremos la historia: ¿cuándo se crearon las Naciones Unidas? Después del horror de la Segunda Guerra Mundial. Cuando la gente dijo, de vuelta futbolísticamente, ‘Paremos la pelota’; porque acá necesitamos algo que nos permita que no lleguemos al borde del abismo.

• ¿Cómo se convive entre lo que dice Trump de las Naciones Unidas y el alineamiento de Argentina con Estados Unidos?

-Estados Unidos tiene una visión crítica de las Naciones Unidas. Por muchas de las razones que acabo de enumerar. Porque consideran que es un organismo burocratizado, que cuesta mucha plata y que no trae muchas soluciones concretas.

Y la verdad, más allá de las críticas, hay bastantes puntos donde es razonable lo que están diciendo. En mis conversaciones en Washington, con gente muy allegada al presidente Trump, con el secretario Rubio, nunca me han dicho ‘Queremos destruir a las Naciones Unidas’, ‘Queremos terminar con las Naciones Unidas’. Lo que me han dicho es que queremos otras Naciones Unidas. Naciones Unidas más enfocadas.

Entonces, yo en ese sentido no tengo problema con esa visión. Y lo que yo estoy diciendo es, bueno, enfoquémonos en lo que para ustedes son las prioridades. Si para los Estados Unidos las Naciones Unidas no están funcionando bien puede funcionar bien, igual para otros países, entonces, escuchémoslos.

Si yo le levanto el ‘dedito’ a la Nación más poderosa del mundo, no voy a ser un secretario general muy exitoso. Voy a quedar bien, por ahí, a las que les guste criticar a las grandes potencias, pero no voy a cumplir mi rol. ¿Para qué estoy yo ahí?

• …lo mismo pasa con el tema de Israel, el Líbano.

-Exacto. En el tema de Israel vos tenés que tener la capacidad de hablar con Israel de la misma manera que tenés que tener la capacidad de hablar con los palestinos y los árabes. Y yo tengo muy buena relación con todos ellos.

• ¿Y con Rusia y Ucrania?

-Rusia y Ucrania son el ejemplo más claro: desde que empezó la guerra en Ucrania he estado trece veces en Ucrania. Y he cruzado la línea del frente de la guerra seis veces.

Estuve bajo las balas de no sé quién, pero estuvimos ahí. Entonces, eso es algo que se reconoce. O sea, es alguien que se pone las botas, se saca el traje y va a donde está el despelote.

No desde una oficina, mirando el Danubio, hago un tuit, viste, que es muy fácil. ‘¡Qué horror lo que está pasando!’ ¡Andá y transpira la camiseta!

• ¿Qué recuerda y qué resultado obtuvieron de aquel viaje a la Antártida con el presidente Milei, donde también pasaron por Río Gallegos?

-Fue muy linda experiencia. Al presidente Milei, casi ni bien había asumido, le conté lo que estaba haciendo el OIEA en la Antártida y él espontáneamente me dijo: ‘Me interesa eso, lo apoyo y vamos.’ Fue muy lindo ir a la Patagonia, que es por supuesto algo que late en el corazón de todos los argentinos, y poder justamente marcar esa presencia de un argentino al frente de un organismo internacional en algo que tiene que ver con la protección de algo muy precioso que tenemos los argentinos, que es todo el medio ambiente, que por supuesto el sector antártico, que es un sector internacionalizado, donde la Argentina tiene su posesión, pero tiene la presencia allí de tantos científicos militares, estar ahí con ellos y llevar una misión técnica que nunca se había realizado con el apoyo del Instituto Antártico Argentino, con la dirección del Antártico, de la Cancillería Argentina y por supuesto de las Fuerzas Armadas, estuvo el ex ministro Luis Petri, estuvimos con los Hércules yendo hasta allí, movilizando una presencia por la paz y por la protección del medio ambiente. Fue una experiencia realmente inolvidable. En Río Gallegos, conversar con la gente en la calle, me acuerdo que ahí llegamos y conversé con algunos que se habían acercado por curiosidad, más que nada por el presidente que por mí. Tengo primos muy queridos que viven en Ushuaia, o sea que realmente es algo que para mí al sur lo tengo muy en mi corazón.

• ¿Cómo se continuó el trabajo con los datos que recogieron en la Antártida?

-Fue muy importante: gracias a ese trabajo se pudo determinar la presencia de microplásticos en el medio antártico. Eso se pensaba que estaba más cercano a otras regiones, al sudeste asiático y a otras partes donde hay una gran cantidad de contaminación plástica en los mares; sin embargo nuestros científicos que estuvieron ahí se quedaron dos meses trabajando. Nosotros nos fuimos pero ellos se quedaron allá. Pudimos acercar datos técnicos irrefutables que muestran la presencia justamente de microplásticos, que se puede llegar a determinar el origen de los plásticos, aunque no sean visibles a los humanos, de dónde vienen, qué antigüedad tienen; entonces eso es lo que permite tomar buenas decisiones científicamente fundadas. Así que fue un trabajo muy importante. A raíz de eso otros países, tanto en nuestra región, como Chile, Perú, se interesaron y también dijeron: ‘Nosotros también querríamos tener ese tipo de actividad’. Lo mismo ocurrió con países del Ártico, o sea no solamente del mundo antártico, sino del Ártico, se interesaron y pidieron al OIEA también una colaboración en ese tema. Fue una labor pionera y que ha logrado resultados muy concretos. No fuimos a sacarnos una foto.

• ¿Tiene previsto entrevistarse con el presidente Milei?

-Sí, tengo previsto saludarlo, cuando tenga él algún momento en su agenda, espero poder saludarlo y agradecerle que haya presentado mi candidatura a las Naciones Unidas.

• Este sábado fue la Cumbre del Mercosur en Foz de Iguazú. ¿Cómo analizó el encuentro?

-Sigo toda la política, no es mi área, pero por supuesto sigo toda la política de nuestra región y espero que la región pueda avanzar, encontrar los consensos necesarios aún dentro de la diversidad de enfoques políticos que existen.

• ¿Cómo ve el posible acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur?

-Creo que, salvo donde hay complejidades, el sector agropecuario para Argentina, Brasil, el Mercosur es fundamental y también es un sector que en la Unión Europea genera muchísimo interés y donde hay sectores muy movilizados. Las manifestaciones en Bruselas, con los tractores en la ciudad… He vivido en Bélgica y puedo decir que el sector agrícola, francés, por ejemplo, el italiano, hace poco tiempo también, se ha movilizado mucho.

Las negociaciones entre ambos lados han ido avanzando hacia posiciones mutuamente razonables. Espero que se logre algún acuerdo pronto, aparentemente la firma sería en Asunción entre las próximas semanas.

• ¿Cómo se ve la Argentina desde el exterior? ¿Qué se percibe?

-Se mira mucho a la Argentina porque es un país relevante, pero no se puede dejar de obviar que el presidente Milei es una figura global y que genera mucho interés. Desde una plataforma diferente, en el sentido que la gente no solamente observa a la Argentina por lo que la Argentina es, sino que la figura del presidente Milei se ha transformado en una figura que muchos países extrapolan a su propia realidad. No sé si se entiende. En el sentido de decir…

• ¿Globalizó la motosierra?

-No sé si globalizó la motosierra, pero globalizó la idea de un enfoque muy realista y directo de los problemas graves de las economías.

Entonces mucha gente, aunque esté más o menos cerca de Milei, o de lo que él signifique, observa con mucho interés la capacidad de afrontar problemas muy complejos y muy enraizados en una economía de manera muy frontal y directa, honestamente directa. Entonces, creo que eso es algo de lo que hablo con políticos argentinos de todos los sectores, porque conozco a todos, y a todos les cuento esto: en el sentido que impresiona esa capacidad de ir a la raíz de un problema. Y creo que en eso la figura del presidente tiene un impacto innegable. La gente observa la Argentina, pero a mí lo que me llama la atención es eso, que voy a un país asiático y me dicen: ‘Acá Milei sería importante’. Entonces, eso es algo que es un hecho objetivo, no como una adhesión o no al presidente. Es un hecho que es una realidad y que, en fin, genera un enorme interés en todo el mundo. Mucha gente me pregunta, estoy en un país lejano, y me preguntan, ‘¿Cómo es el presidente Milei?’

• ¿Y qué responde? ¿Se sorprenden?

-Como dije, Milei es una persona que tiene una capacidad de enfrentar los problemas que son ineludibles. Después, la sociedad argentina, y yo en eso tengo que ser muy respetuoso, la sociedad argentina es la que decide. Creo que hay una idea globalmente, hay una avidez por solucionar problemas. Hay muchos problemas en las economías globales que vienen de arrastre, y eso genera indudable interés por figuras que por ahí son lo que se llama outsiders, personas que están fuera de la política tradicionalmente considerada, y que tienen esa capacidad de enfrentarlos.

• En esta mirada del exterior, ¿se analiza la reforma laboral que plantea el gobierno en el Congreso? ¿Qué dicen los inversores?

-Miran todo, miran todo. Cada país, cada economía tiene sus peculiaridades, sus particularidades. No se puede generalizar tan fácilmente, pero sí la visión de que en economía 2 más 2 es 4, no es 5, no es 6. Acá y en cualquier lugar del mundo. Creo que eso es algo que se aprecia. Y esto, por ejemplo, por las relaciones que tenemos y la gente que conocemos habitualmente, hay ese interés por Milei y también por invertir en Argentina.

Desde mi sector, que es el sector nuclear, hay un gran interés, por ejemplo, en la materia de la minería del uranio, por la Argentina. Y por supuesto, yo soy una figura, soy un funcionario internacional, pero obviamente por ser argentino me preguntan mucho, y el OIEA está ayudando a la Argentina en todo lo que tiene que ver con los aspectos de la minería, porque a través de técnicas nucleares se pueden determinar el tipo de aproximación minera, de hacerlo de una manera medioambientalmente favorable y demás; así, damos asesoramiento a la Argentina. Pero también a países en África. Entonces hay mucho interés.

• ¿Cuál es el potencial nuclear que tiene Argentina?

-La Argentina nuclear es un ejemplo: tiene tecnología, la Argentina exporta tecnología nuclear; la Argentina es un país que, más allá de sus vaivenes políticos en su historia, ha logrado una cierta continuidad en el sector nuclear argentino. Y por eso hay, concita mucho interés. Y al ser yo argentino, por supuesto, cuando voy a cualquier país del mundo, eso pasa. El otro día estaba en Filipinas con el presidente Ferdinand Marcos Jr  y  me preguntaba mucho de Argentina, de cómo es el sector nuclear argentino y cómo se podría llegar a ayudar. Soy funcionario internacional, pero siempre guardo mi corazón argentino.

• Volviendo al tema del uranio, en la Argentina ahora está el desarrollo de lo que pasa en Chubut, Santa Cruz y Río Negro también. ¿Han consultado puntualmente?

-Sí, nos han consultado y el OIEA ha enviado misiones técnicas de apoyo para lo que se llama la evaluación del ciclo de la minería del uranio.

• ¿Pregunten tanto de Milei como de Messi?

-Me preguntan por Messi, Maradona, el Papa Francisco, Borges. Argentina tiene tantas figuras extraordinarias individualmente consideradas… Por supuesto que siempre la pregunta existe.

• ¿Y va a tener que responder preguntas por Estudiantes de La Plata?

-Yo creo que sí, haré lo que se pueda…