El Tribunal Oral Federal 3 resolvió este jueves absolver a los accionistas del Grupo Indalo, Fabián de Sousa y Cristóbal López, en la causa de Oil Combustibles, tras más de un año de iniciado el juicio oral.

Por otro lado, el extitular de AFIP, Ricardo Echegaray, fue condenado a 4 años y 8 meses de prisión en la investigación por supuesta defraudación al Estado en el otorgamiento de planes para el pago del Impuesto a la Transferencia de Combustibles a la petrolera Oil Combustibles.

“El tribunal resuelve condenar a Ricardo Echegaray a las penas de 4 años y 8 meses de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer la función publica por consolidarlo autor de administración fraudulenta”, resolvió el TOF 3.

En tanto, absolvió “por mayoría a Carlos Fabián De Sousa por el hecho formalmente acusado” y “por mayoría a Cristóbal López en el hecho por el que fue formalmente acusado”. En las justificaciones, señalaron “no hacer lugar al pedido de reparación formal del daño”.

Esta mañana la última audiencia del juicio comenzó con las “últimas palabras” de los tres acusados. “Nada de esto hubiese pasado si yo hubiese acordado con Macri entregarle los medios para que él los use a gusto”, dijo por su parte Cristóbal López en su alocución.

“Ha quedado claro lo que ha pasado en estos seis años así que solo me resta agradecer a mis abogados. Entendemos que el final va a ser un final de justicia que es lo que requerimos desde el primer día. Y pedirle perdón a mis socios, a mis amigos, a los empleados, colaboradores, y obreros de Grupo Indalo que la pasaron muy mal con la incertidumbre de ver cuándo se quedaban sin trabajo, gente que por años no le pudimos actualizar sueldos por la crisis financiera del grupo”, añadió esta mañana.

“Decía que toda esta gente que luchó en cuatro años, la pasó muy mal y me siento responsable de eso porque nada de esto hubiera pasado si yo hubiera acordado con el ex presidente Macri entregar los medios de comunicación para que él y su equipo manejaran a gusto y paciere”, disparó. “Me negué y estas fueron las consecuencias”, remató.

Por su parte, Fabian De Sousa lanzó: “Siempre tuve clara mi inocencia” y completó: “La finalidad no era cobrar impuestos, era quebrar a las empresas del Grupo Indalo. Querían quebrar a los medios que daban una visión de país distinto al que ellos querían mostrar”, dijo el accionista.

En tanto, Ricardo Echegaray definió que “los hechos que se me imputaron no constituyen delito”. “Pidieron mi condena de prisión sin ninguna prueba”, completó.

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