Desde sus inicios en Sui Géneris a finales de la década del 60 hasta su último trabajo discográfico –Random del año 2018- el mítico Charly García ha tenido una prolífica carrera que incluye 29 álbumes de estudio, 17 álbumes en vivo, 2 películas musicales, 4 bandas sonoras, 1 EP y 1 libro.

Sin embargo, hay hitos fundamentales en la trayectoria del bigote bicolor que marcaron un antes y un después, no solo en su carrera, sino en la historia del rock y la música popular argentina.

Tomando en cuenta la magnífica obra de las bandas que formó -Sui Géneris, Porsuigieco, La Máquina de Hacer Pájaros y Serú Girán-, además de los álbumes en colaboración con otros artistas como “Tango” con Pedro Aznar y el fallido proyecto con Luis Alberto Spinetta, García ha dejado una obra espectacular de principio a fin.

Con más o menos brillo, en todos sus discos se puede encontrar la esencia tan particular del artista que podría considerarse un romanticismo pop con alma rockera.

He aquí un listado con 5 LP que han marcado una impronta a lo largo de la historia musical de García.

Confesiones de Invierno (1973)

Es el segundo álbum de estudio de Sui Géneris, la banda que Charly formó junto a Nito Mestre cuando estaban terminado el colegio secundario. Luego del éxito de Vida (1972) el dúo se enfrentaba al inevitable reto de no ser solo un éxito pasajero. Sin embargo, con el lanzamiento de Confesiones, García reafirmó su impresionante talento como compositor e intérprete.

El álbum inicia con una verdad joya: Cuando ya me empiece a quedar solo. Una magnífica pieza que describe una vejez melancólica destinada al olvido y la soledad, donde la única luz es la añoranza hacia el pasado virtuoso. Escrita por Charly con tan solo 22 años (o quizás antes), la canción pareciera ser escrita por un hombre que ha vivido mil vidas en una. Sin dudas, la versión de Mercedes Sosa es una de las más destacables.

Sin salir del clima de melancolía, otro track infaltable sin dudas es Confesiones de Invierno -tema que le da nombre al álbum-. La canción, refleja el costado más intimista de Charly que se desnuda ante su público cantando en solitario con su guitarra acústica.

Por último, hay que mencionar la emblemática Rasguña las piedras, una de las canciones más conocidas del dúo que refleja el 100% de su esencia primigenia -antes de virar hacia el rock progresivo definitivamente-. Pese a los rumores que relacionan la letra con una presunta novia cataléptica de García -teoría que hacía reír a carcajadas al propio Charly- la pieza arroja una de las prosas más comprometidas políticamente de ese periodo.

Lista de temas de Confesiones de Invierno (1973): «Cuando ya me empiece a quedar solo», «Bienvenidos al tren», «Un hada, un cisne», «Confesiones de Invierno», «Rasguña las piedras», «Lunes otra vez», «Aprendizaje», «Mr. Jones, o Pequeña semblanza de una familia tipo americana», «Tribulaciones, lamento y ocaso de un tonto rey imaginario, o no».

Películas (1977)

Después del Adiós Sui Géneris, Charly emprendió su viaje de lleno al rock progresivo que ya había iniciado con Pequeñas Anédcotas de las Instituciones (1973) y con el álbum perdido Ha Sido que nunca fue publicado.

Sin embargo, con el inicio de la dictadura militar en Argentina (1976) también comenzaba la era más prodigiosa de Charly con la legendaria banda La Máquina de Hacer Pájaros.

El supergrupo, formado por Oscar Moro (ex Los Gatos y Color Humano), Carlos Cutaia (ex Pescado Rabioso), Gustavo Bazterrica (futuro integrante de Los Abuelos de la Nada), y José Luis Fernández (ex Crucis) traía las influencias de bandas como Genesis, Yes, Camel, Pink Floyd, y Steely Dan pero con un estilo criollo inconfundible que la convirtió en una joya única en el rock prog del mundo.

Su primer disco homónimo, sin dudas tiene las canciones más emblemáticas de la agrupación como Bubulina (heredada del disco inédito de Sui), Como mata el viento norte, y una de las mejores composiciones de la música argentina contemporánea: Ah, te vi entre las luces.

Sin embargo, la banda alcanzó su máximo nivel con el siguiente álbum de estudio –Películas (1977)- donde los seis integrantes se mostraron más consolidados, incluso compartiendo el rol de compositor que hasta el momento dependía exclusivamente de Charly.

El trabajo discográfico presenta una superioridad técnica a la hora de la grabación -en comparación con el disco anterior- y demuestra una etapa más madura de la banda que, paradójicamente, se separó al poco tiempo.

En el año 2007, la revista Rolling Stone de Argentina ubicó el álbum en el puesto 71º de su lista de «Los 100 mejores álbumes del rock argentino»

Lista de temas de Películas (1977): «Obertura 7.7.7.», «Marilyn, La Cenicienta Y Las Mujeres», «No Te Dejes Desanimar», «¿Qué Se Puede Hacer Salvo Ver Películas?», «Hipercandombe», «El Vendedor De Las Chicas De Plástico», «Ruta Perdedora», «En Las Calles De Costa Rica».

La Grasa de las Capitales (1979)

La separación de La Máquina abrió camino a la conformación de -en palabras de Luis Alberto Spinetta- la mejor banda de rock en la historia nacional: Serú Girán.

El legendario grupo integrado por García, Oscar Moro, David Lebón y Pedro Aznar tuvo un inicio un poco difícil luego de su conformación y grabación del primer álbum homónimo en Brasil.

El primer disco de esta banda, continuó con la impronta sinfónica y progresiva de los últimos trabajos de Charly. Sin embargo, pese a tener eximias composiciones como el clásico Seminare y Eiti Leda (otro tema heredado de Ha Sido), el público esperaba otra cosa.

Es que los tiempos eran otros, eran los años de Videla en Argentina y la brutal represión social comenzaba a generar un inmenso malestar social. Charly supo ponerle melodía y verso al sentir popular durante toda su carrera, por ello, el pueblo le reclamó a Serú que cantara lo que ellos no podían expresar.

Y así lo hicieron. La Grasa de las Capitales representó un relanzamiento de la banda tras meses de una difícil relación con el público que reclamaba mayor compromiso social en sus letras. El tema homónimo que abre el álbum, recuerda a las notables composiciones de La Máquina, pero con un mensaje contundente: “¡NO SE BANCA MÁS!“.

El clima oscuro y lúgubre que mantiene el álbum durante sus 9 tracks, reflejan a la perfección la atmósfera de paranoia, miedo y angustia que gran parte de los argentinos y argentinas vivían a diario bajo el régimen militar.

Viernes 3 AM -una pieza fundamental en el cancionero de García- estaba en la lista de “canciones prohibidas” y fue censurada en la radio durante los años del gobierno de facto.

Sin embargo, ni el terrorismo de estado, la represión o la violencia institucional de aquellos años pudieron parar a la superbanda que se consagraría como uno de los puntos más altos de la música nacional con dos exitosos álbumes más (Bicicleta en 1980 y Peperina en 1981).

Lista de temas de La Grasa de las Capitales (1979): «La grasa de las capitales», «San Francisco y el lobo», «Perro andaluz», «Frecuencia modulada», «Paranoia y soledad», «Noche de perros», «Viernes 3 AM», «Los sobrevivientes», «Canción de Hollywood».

Clics Modernos (1983)

Tras la separación de Serú y el lanzamiento como solista de Charly con Yendo de la Cama al Living (1982) el artista llegó a un punto de inflexión en los incipientes años 80. Considerada por muchos como la mejor década de la carrera de García, lo cierto es que el disco consagratorio de esa era -como si no estuviera lo suficientemente consagrado ya- fue resistido en sus inicios.

Se trata de Clics Modernos (1983) -o Modern Clix para los entendidos-.

Fito Páez alguna vez cantó: “Charly puso todo patas arriba, cuando tuvo el melotrón“. No obstante, sin dejar de ser cierta esa afirmación, es indudable que el país no volvería a ser el mismo cuando Charly tuvo su máquina de ritmos.

Por aquellos años, la Argentina dejaba atrás los años oscuros del régimen militar y abrazaba la tan ansiada democracia. En ese escenario, Charly emprendió un viaje a Nueva York que repercutiría para siempre en su concepción artística y su esencia musical.

Junto con Pedro Aznar -que se encontraba viviendo en Estado Unidos para estudiar en Berklee– se instaló en el Village neoyorquino con un arsenal de novedosos instrumentos musicales. Entre modernos sintetizadores, samplers, máquinas de ritmo y muchísimo talento, García comenzó a dar forma a algunas de las canciones más importantes de su carrera.

Con un sonido diferente a todo lo que había en el país, Charly se encontró con el productor Joe Blaney y grabó en el mítico Electric Lady -estudio de grabación de Jimi Hendrix– una obra sublime con influencias de The Police, Joni Mitchell y The Clash, pero también con aires de tango y melodías que solo el propio García pudo imaginar.

El primer track del álbum refleja su espíritu a la perfección: Nos siguen pegando abajo. Hoy un himno, pero fuertemente resistido por los rockeros ortodoxos del momento por su ritmo bailable al mejor estilo new wave.

Más bien recibido fue Los Dinosaurios, la legendaria canción referida a los desaparecidos durante la última dictadura, que ya era entonada por Charly en los recitales de presentación de Yendo de la Cama Al Living. Sí, todavía bajo el gobierno militar.

García volvió a la Argentina con un nuevo look para presentar su nuevo disco en diciembre de 1983 en varias funciones en el Estadio Luna Park donde el maestro se dio el lujo de repasar temas de Sui Géneris ante la ovación de su público.

La coda del álbum, es la magnífica Ojos de video tape, una composición trascendental con dibujos armónicos que recuerdan a lo mejor de Serú y arreglos que se volvieron un sello entre los recursos musicales de García y sus adeptos.

Lista de temas de Clics Modernos (1983): «Nos siguen pegando abajo (Pecado mortal)», «No soy un extraño», «Dos cero uno (Transas)», «Nuevos trapos», «Bancate ese defecto», «No me dejan salir», «Los dinosaurios», «Plateado sobre plateado (Huellas en el mar)», «Ojos de videotape».

Say No More (1996)

La adrenalina de los 80 le pasó factura a Charly durante la década siguiente. Su impresionante registro de tenor fue derivando a un gastado barítono que, pese a perder sus agudos, le aportó a su canto una esencia característica que cautivó a una nueva generación.

Con el Filosofía Barata y Zapatos de Goma (1990), el bigote bicolor puso fin a una etapa y su nuevo destino era incierto. Algunos indicios del nuevo rumbo aparecieron en el reencuentro de Serú Girán en 1992, con composiciones como No Puedo Dejar y previamente, con la desgarradora pieza Mala Señal del disco Tango 4 con Aznar.

Sin embargo, todo tomaría más forma en el siguiente trabajo discográfico de Charly en 1994: La Hija de la Lágrima. Esta extensa obra conceptual, con largos pasajes instrumentales y abrazando el concepto de Spector Sound (Wall of Sound, muro de sonido) que cambiaría para siempre la forma de hacer música del ídolo.

Sin embargo, García llevó esta idea a su máxima expresión dos años más adelante con Say No More (1996). Allí, las composiciones tendieron hacia una atmósfera más caótica y oscura, sin una guion claro y para nada similar a lo que sonaba en las radios y se veía en la televisión.

Ya su primer track, Estaba en llamas cuando me acosté, dejaría desconcertado a cualquier desprevenido que no estuviese al tanto del nuevo código que García incorporaba a su música.

El álbum, fue grabado en Madrid en épocas de constantes escándalos y polémicas en torno a la vida privada de Charly. Continúa con la esencia de su disco anterior, pero profundiza mucho más el carácter de aparente desprolijidad y sinuosas estructuras melódicas y armónicas.

Quizá el tema más “radio friendly” del LP es Alguien en el Mundo Piensa en Mí, que sonó muchísimo por aquellos años en los programas de televisión y en las emisoras. Sin embargo, la pieza traía aparejada la atmósfera extraña del disco, con relatos inconexos de voces femeninas, fragmentos musicales puestos en reversa y complejos entramados instrumentales.

La canción homónima del disco es quizá una de las composiciones más bellas de ese periodo de la carrera de García. Un retorno al ensamble sinfónico que había acompañado a Charly en el primer Serú, la pieza fusiona a la perfección las cuerdas con los sintetizadores y relata una desgarradora historia de desamor.

Es de destacar la maravillosa obra instrumental Constant Concept que expresa a la perfección el caracter experimental del disco y refleja la increíble sensibilidad artística que García tenía en aquellos años.

Sin embargo, el clímax del disco llega en el track siguiente con la sublime Cuchillos, una canción escrita desde lo más profundo del corazón por Charly para su amiga Mercedes Sosa, una compañera y una fuente de inspiración fundamental a lo largo de toda la carrera de García.

Con altos y bajos, el disco refleja a la perfección la caótica vida del maestro por aquellos años y marcaría el inicio de una nueva era en la carrera del legendario músico dejando una impronta que lo acompañaría en sus siguientes discos.

Lista de temas de Say No More (1996): «Estaba en llamas cuando me acosté», «Vemos…», «Canciones de jirafas», «Necesito un gol», «Alguien en el mundo piensa en mí», «Constant Concept», «Say No More», «Cuchillos», «A1», «Plan 9», «Casa vacía», «Podrías entender», «Intuición», «La vanguardia es así».

 

 

 

Leé más notas de Andrés Piris