Luego de 22 años en las divisiones de ascenso del fútbol argentino, Platense logró regresar a la Primera División, tras vencer por 4 a 2 por penales a Estudiantes de Río Cuarto. A raíz de esta victoria histórica, salieron a la luz varias historias vinculadas al “Calamar“, y una en especial estremeció a los internautas.

 

La historia de Federico Tineo es muy particular. Él fue el niño que en el año 1998 vivió una insólita situación en Videomatch, cuando apenas tenía 5 años. En aquel programa, Marcelo Tinelli le regalaba helados a los nenes que dijeran ser de San Lorenzo, pero este pequeño se hizo famoso por no ceder y quedarse sin su premio.

 

El video de ese programa se viralizó en las redes sociales, y fue entonces cuando Federico contó lo que realmente pasó ese día.

 

 

La realidad es que ese niño lejos estaba de ser de Platense, ni siquiera se trataba de una tradición familiar. Es más, luego de todos estos años, el asegura que es de River, y que lo que tuvo que hacer fue nada más que una obligación de su padre.

 

“Ese nene soy yo, y cada vez que veo el video me angustia mucho. No quería ser de Platense, yo quería ser de River. Pero sabía que eso podía traerme un gravísimo problema con mi viejo. Entonces no me quedó otra que resignar el helado y los muñecos que me ofrecía Tinelli”, comenzó relatando Federico en un hilo de Twitter.

 

“Tendría 5 años y, probablemente como cualquier nene, prefería comer el helado. Y todo fue risas para la cámara. Me acuerdo a la perfección como si hubiese sido ayer ese momento. De terminar de rechazar el helado y mirar a mi viejo como preguntándole ‘estuve bien?’“, siguió contando. “El terror con el que me acerqué a mi viejo. Porque yo tenía que ser sí o sí de Platense. No podía elegir otro club, porque sino se me venía la noche. No se si alguien leerá esto, pero me estoy saco un tremendo peso de encima al contarlo“, detalló.

 

“Está claro que ese terror no era casual. Sé que por decir que era hincha de otro club se podía venir una golpiza infernal, como las que estaba acostumbrado. Así que obviamente rechazar el helado era algo menor ante esa circunstancia”, relató.

 

 

“En definitiva, la vida siguió. Hoy trabajo en los tribunales, tratando de hacer lo mejor desde mi lugar. Y lo mas hermoso, puedo alentar a mi querido River Plate, orgulloso”, contó el joven y luego develó un dato estremecedor.

 

“Después de varios años, los tribunales y la oficina de violencia doméstica finalmente hicieron su parte (tarde pero seguro), y me salvaron la vida. Se dispuso una restricción perimetral. Lamentablemente para que eso pasara me tuvo que romper el páncreas de una patada, pero bueno“, concluyó describiendo los duros momentos que le tocó vivir desde que era chico y que hoy salen a la luz, casualmente, por el ascenso de Platense.

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