Catalina Artusi fue una de las primeras huérfanas de la tira Chiquititas de Cris Morena. Estuvo en los inicios de la tira infantil junto a Romina Yan, y luego desplegó su carrera desde pequeña participando en ficciones como Verano del 98 y Floricienta.

 

Sin embargo, a sus 18 años dejó a un lado la actuación para formar una familia junto a su entonces pareja Juan Manuel Torres, exfutbolista de Racing y San Lorenzo, con quien tuvo a Bacco, su primer hijo.

 

Torres debutó en “La Academia” en 2002, con apenas 17 años y luego prosiguió su carrera en “El Ciclón” y en el exterior. Su último club fue Chaco For Ever, donde se retiró. Tenía 24 años cuando, junto a Catalina, se volvió padre.

 

Catalina Artusi y Juan Manuel Torres en sus años como pareja.

Años después la pareja se separó y hoy, con el niño de por medio, mantiene una férrea disputa judicial. En las últimas semanas, se conoció que la actriz radicó una denuncia en contra de su ex, cuando le impidió el contacto con su pequeño. Torres vive actualmente en Corrientes, ciudad donde Bacco pasa sus vacaciones.

 

“El padre de mi hijo se lo había llevado y, cuando se acercaba la fecha en la que me lo tenía que traer, pasaron cosas. […] Cuando se lo lleva a Corrientes, porque está viviendo allá, se lo lleva por un mes. Y siempre se estira unos días. El anteaño pasó algo similar a lo de ahora, pero después se había portado bien. Hizo las cosas bien, pero este año hizo todo mal”, relató Catalina a Infobae.

 

En este contexto, aseguró que Juan Manuel Torres no le quiso dar la dirección de donde estaba Bacco y que ella lo averiguó gracias a los datos que él le aportaba. “Mi hijo, en secreto, me iba guiando. Yo no tenía la dirección, no tenía nada. Solo que estaba en Corrientes, nada más. De película, como en Búsqueda implacable. […] Mi hijo me iba diciendo: ‘Vivo en una torre que se llama Murano’; ‘Salgo y veo plantas’. ‘Salgo para la derecha y voy a la plaza’”, contó.

 

Luego, para reencontrarse con él, contó: “Fui sin informarle al padre. Cuando llegué, lo llamé, le pido hablar con mi hijo, me pasa. Y le digo: ‘Bacco, estoy abajo, bajá’. En realidad yo había llegado la noche anterior, pero como no estaban, esperé hasta el otro día. Llegaron los policías y me mintieron; por acomodo, por plata, no sé por qué, pero me mintieron. Me dijeron que ellos constataban que el padre había presentado unos papeles que decían que yo no me podía acercar a mi hijo. […] Yo estaba en el hall y mi hijo en el primer piso: no me dejaban subir, ni lo dejaban bajar a mi hijo. La Policía fue cómplice”, denunció.

 

Catalina fue de una de las “Chiquititas” en los inicios de la tira infantil en el año 1998.

Tardé una semana en recuperar a mi hijo. Me alquilé un departamento”, relató en la entrevista y agregó: “Fue una semana haciendo denuncias, para después llegar al juzgado de familia y que me rechacen la carpeta, porque en la Comisaria de la Mujer me hicieron mal las denuncias. Me dijeron que todo esto era penal, y claro, me prohibieron ver a mi hijo”.

 

Finalmente, luego de una ardua travesía, pudo volver a abrazar a su hijo: “Hasta que me lo dieron hubo momentos en los que la realidad superó a la ficción. Porque ya no confiaba ni en la Policía, ni en nadie. Te volvés frenética de que todo el tiempo te mientan”, contó Catalina.

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