Este sábado el presidente Alberto Fernández  visitó la provincia de Mendoza para acompañar al Gobernador en la presentación del Plan Estratégico de Vitivinicultura.

En su alocución, consideró que el sector vitivinícola se enfrenta a “nuevos desafíos” tras las bajas en el registro de consumo de la bebida nacional, y deslizó la posibilidad de producir vinos sin alcohol, como una de las posibles soluciones.

 

Vino sin alcohol: plan que el Estado estudia para salvar al sector.

 

“A pesar de ser la bebida nacional, como dijo Rody (por el gobernador provincial Rodolfo Suárez), los argentinos tomamos cada día menos vino y no es esencialmente culpa de los productores. Se trata de variaciones en la cultura y que afectan el consumo”.

Para ejemplificar: “Es difícil competir en estos tiempos con un producto que tiene alcohol, porque hay una enorme campaña para que el alcohol no se consuma”, dijo  durante su discurso en el desayuno organizado por la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR).

En este sentido, Fernández instó a producir vinos sin alcohol como respuesta al escenario en descenso. “Por ahí hay que pensar en producir vinos con baja graduación de alcohol, o sin alcohol, como han hecho muchas cervezas, que avanzaron en el mundo del consumo por sobre los que eran consumidores de vino”, amplió.

“Fueron muy interesantes los discursos que precedieron estas palabras mías. Hace 18 años, cuando Néstor era presidente y Cobos gobernador, llevamos adelante el primer plan estratégico para la vitivinicultura. Lo hicimos convencidos de que Argentina tiene un potencial enorme para desarrollar porque el vino argentino es un muy buen vino, signado por la calidad”, repasó el Presidente e insistió en el carácter “central” del desarrollo para el país.

 

El presidente Alberto Fernández junto con el gobernador Rodolfo Suárez participan de la presentación del Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2030

 

“El vino que se exporta permite que ingresen dólares, que tanto necesitamos en este tiempo”, concluyó.

 

Consumo de vino en Argentina

El último relevamiento anual del Laboratorio estadístico del Instituto Nacional de Vitivinicultura indicó que durante 2020 el consumo de vino tuvo la mayor suba en cinco años.

 

Si bien los resultados mostraron una mejora del 6,5% respecto del 2019, el sector experimentó una fuerte caída que se había acentuado a partir de 2016 y encontró su punto más grave en 2018 donde se tocó la menor cifra histórica de 18,7 L per cápita.

 

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