Faltan pocos días para la llegada de los Reyes Magos y aunque todos los niños esperan con ganas poder abrir todos los regalos que han pedido en su carta cuando llegue la mañana del 6 de enero, existe también la tradición de dejar carbón a aquellos niños que no se han portado demasiado bien.
La razón por la que los Reyes Magos traen carbón a los niños que se portan mal tiene un origen muy curioso. Una tradición que con los años derivó en que también los zapatos o los calcetines de los niños, se llenen con carbón la noche de Reyes, pero cuyo origen pocos conocen.
Por lo visto son dos los motivos o las razones por las que el carbón es el regalo de los niños “malos” y aunque una resulta algo evidente, la otra es bastante curiosa.
Por un lado, tenemos que echar la vista atrás y al origen de los Reyes Magos para entender el porqué el carbón está presente en esta fiesta. Como ya sabréis, los tres reyes de Oriente: Melchor, Gaspar y Baltasar, llevaron oro, incienso y mirra al niño Jesús cuando nació, y según cuenta la leyenda, esos tres elementos se quemaron dando como resultado el carbón que reciben los niños.
Por otro lado, existe también una historia que es bastante curiosa. La protagoniza un personaje navideño del pasado que recibía el nombre de Carbonilla y que era el que se encargaba de decirle a los Reyes los regalos que iba a recibir cada niño a partir de cómo se habían comportado durante el año. Carbonilla tenía la misión de observarlos durante los meses previos a la Navidad y anotaba aquellos que se portaban mal porque serían los que acabarían recibiendo carbón.
Así en la noche de Reyes, estos reparten los juguetes a los niños, mientras que es Carbonilla quien reparte el carbón.
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