Para este año, se esperaba una agenda cargadísima para la Cámara Oral. Se guardaban juicios sobre causas resonantes que habían conmocionado a la provincia de Santa Cruz tiempo atrás, tales como la que tiene como procesado a Marcelo “Machi” Mercado, o el homicidio de Vicente Maillo, el comerciante que fue ultimado a puñaladas y por el que parte de su familia se encuentra tras las rejas. También como el ex cura Nicolás Parma, ex integrante de la Iglesia acusado de cometer aberrantes delitos sexuales que tenían como víctimas a jóvenes monaguillos.

Lamentablemente, el hecho de la cuarentena y de la pandemia hizo que todo se retrase y entrara en un parate de dos meses. Por lo que, por estos días, hay personas que se encuentran privadas de su libertad desde hace más de dos años sin haber sido juzgadas.

Hace unos días, cuando la Cámara resolvió que no habría beneficios de prisiones domiciliarias por el COVID-19 ya que, según el SPP, no hay hacinamiento y se cumplen las medidas de bioseguridad, los jueces Joaquín Cabral y Jorge Yance habían solicitado al Tribunal Superior de Justicia retomar los debates orales, debido al tiempo que ha pasado desde el comienzo de la cuarentena.

En esa oportunidad, la Cámara solicitó al TSJ un “habilitación excepcional para realizar los juicios orales con personas privadas de la libertad siguiendo el orden de antigüedad en agenda sin concurrencia de público y respetando la distancia entre los asistentes, audiencias de juicios abreviados con la misma modalidad o mediante videoconferencia”.

El TSJ se expidió y permitió los juicios. El martes 23 será la prueba piloto para los debates. De acuerdo a fuentes judiciales consultadas por La Opinión Austral, se pudo saber que se tratará de una causa “sencilla”, algo que no conste de un delito grave y que no tenga muchos testigos. Así también se resolvió que no será con público presente.

Aunque no trascendió la causa, se supo que por estas horas los trabajadores del Poder Judicial se encuentran trabajando en la logística y la Presidencia de la Cámara determinará si será presencial o mediante videoconferencia”.

El nuevo defensor

En diciembre del año pasado, un histórico del fuero penal se jubiló. Se trataba de Santiago Lozada, que eligió la provincia de Córdoba para pasar su retiro. Hasta el viernes pasado, su lugar había quedado vacante hasta que el doctor Erim Charif Sat tomó la posta.

Charif Sat es un mendocino que eligió a Río Gallegos como su nuevo desafío. En 2005 comenzó en la Defensoría y en el 2014 pasó al Juzgado de Instrucción N° 3 junto a la Rosana Suárez, dependencia en la que estuvo hasta el viernes. En comunicación con La Opinión Austral, dijo: “Trabajaremos para que se respeten las garantías constitucionales”.

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