Your browser doesn’t support HTML5 audio
El sector pesquero argentino mostró un fuerte repunte en octubre de 2025, según el último Índice de Producción Industrial Pesquero (IPI Pesquero) publicado por el INDEC. El indicador registró un aumento interanual de 67,9%, impulsado principalmente por la pesca marítima y por un salto excepcional en los desembarques de crustáceos. Sin embargo, la tendencia acumulada del año sigue siendo negativa: entre enero y octubre, la actividad cayó 10,1% respecto del mismo período de 2024.
Para la Patagonia —y en particular para la provincia de Santa Cruz, donde la economía marítima y portuaria tiene un peso significativo— los datos revelan tanto oportunidades como desafíos, especialmente por la fuerte volatilidad en los volúmenes de desembarque y las diferencias de comportamiento entre tipos de buque y grupos de especies.
El motor del repunte, aunque con acumulado anual negativo
La “pesca marítima”, columna vertebral de la actividad pesquera santacruceña, exhibió en octubre, a nivel nacional, un salto del 89,7% interanual, convirtiéndose en el principal impulsor del crecimiento del indicador general. Su incidencia sobre el IPI fue del 58,8%, es decir, más de la mitad de la mejora del índice se explica por esta actividad.
Sin embargo, el panorama cambia cuando se observa el acumulado del año: entre enero y octubre, la pesca marítima registra una caída de -16,3%, reflejando una actividad marcada por picos abruptos y períodos de fuerte retracción.
En provincias como Santa Cruz —con puertos clave como Puerto Deseado y Caleta Olivia— esta dinámica se traduce en oscilaciones en los niveles de empleo, actividad portuaria y logística, factores centrales para la economía regional.
Por su parte, la actividad “Acuicultura” mostró un aumento de 26,4% respecto a igual mes del año anterior. El acumulado enero-octubre de 2025 registró una variación positiva de 35,3%, respecto a igual acumulado del año anterior.
Crustáceos: un salto extraordinario que explica casi toda la mejora
Uno de los datos más llamativos del informe es el crecimiento +6.712,5% interanual en el grupo de crustáceos, fundamentalmente vinculado al langostino, especie de enorme importancia para la flota que opera en aguas patagónicas. Este incremento tuvo una incidencia del +68,4% en la variación interanual del índice general: sin este salto, el repunte de octubre habría sido marginal.
No obstante, el acumulado del año muestra otra realidad: los crustáceos acumulan una baja del 34,1% entre enero y octubre, señalando una temporada irregular para una de las especies estrella de la pesca santacruceña.

Moluscos en retroceso y peces con crecimiento moderado
El grupo de moluscos, que incluye especies como calamar y vieira —ambas relevantes en la región— cayó –21,1% interanual en octubre, aunque mantiene un acumulado positivo del +26,1% gracias a un muy buen desempeño en los primeros meses del año.
Los peces, por su parte, tuvieron un crecimiento interanual leve de 1,5%, pero suman un aumento del 12,8% en el acumulado enero-octubre.
Estos datos sugieren que, mientras crustáceos impulsan los picos, la estabilidad del sector —incluida la del litoral santacruceño— sigue dependiendo de especies con comportamientos menos volátiles.

Buques congeladores: los protagonistas del rebote
Una de las claves del comportamiento de octubre fue el desempeño de los buques congeladores, que registraron un incremento del 185,9% interanual, con una incidencia del 91,9% en la suba de la pesca marítima.
En contraposición, los buques fresqueros —muy vinculados a la actividad de los puertos provinciales— tuvieron una variación interanual negativa del –4,3%.
Esto marca una diferencia importante:
- Los congeladores, que procesan a bordo y están más asociados a grandes empresas, fueron responsables casi exclusivos del repunte del sector.
- Los fresqueros, que sostienen buena parte del empleo local y tienen fuerte presencia en Santa Cruz, atraviesan un contexto menos favorable.
¿Qué implica para Santa Cruz?
Aunque el informe del INDEC no presenta desagregación provincial, la estructura productiva santacruceña permite inferir varias conclusiones clave:
Impacto directo del aumento de crustáceos y de las operaciones de congeladores. El repunte de octubre está estrechamente ligado a especies y tipos de flota que operan intensamente en aguas próximas a la provincia.
Actividad portuaria con señales mixtas. La caída de los fresqueros puede traducirse en menor movimiento en muelles provinciales, dado que estos buques requieren más servicios en tierra.
Volatilidad como rasgo dominante. El informe destaca que el IPI pesquero presenta “mucha irregularidad” y un “patrón estacional cambiante”. Esto se refleja mes a mes en los desembarques santacruceños.
Un rebote que no alcanza para compensar el año
Pese al buen octubre, el sector sigue por debajo de 2024 en términos acumulados, lo que impacta en empleo, recaudación y actividad logística. Pero se presentan desafíos para la flota fresquera y los puertos provinciales.
El último tramo del año será clave para determinar si el repunte se consolida o si la volatilidad vuelve a imponerse como factor dominante en una de las principales actividades económicas de la región.
Leé más notas de Irene Stur
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario