La empresa de transporte no lleva una semana recorriendo la ciudad y las quejas por demoras y el recorrido de las unidades no tardaron en llegar. En principio, los más afectados son quienes viven en la periferia de la ciudad, donde reclamaron que llegaron a esperar el colectivo por más de una hora. Además, sostienen que no respetan el recorrido que la misma empresa firmó.
La empresa de transporte público lleva en Río Gallegos menos de una semana, pero comenzó con problemas para los vecinos, sobre todo para aquellos que residen fuera del casco urbano. Según indicaron a La Opinión Austral, las unidades no respetan ni horarios ni el recorrido que la empresa firmó en el contrato con el municipio.
En principio, los vecinos reclaman que la situación con la empresa de transporte, desde que comenzó a operar en Río Gallegos, no ha variado. “No pudieron respetar el recorrido dentro del contrato, ni siquiera su propio recorrido, lo que ellos mismos pactaron”, sostuvo Daniela Ledesma, una vecina del San Benito e integrante de la comisión del transporte, a LOA.
“Son 17 km. que no pueden respetar porque no han previsto nada, ni arreglado las calles. Ni el recorrido legal que figura en el contrato”, afirmó.
Sobre ello, el proyecto que los vecinos presentaron para modificar el recorrido de la línea E se aprobó por unanimidad en el Concejo Deliberante, pero la ordenanza ahora es remitida al Ejecutivo local; donde el intendente Giubetich tiene la facultad de vetarla. En ese caso, el Concejo Deliberante necesitaría 5 votos para insistir con el nuevo recorrido, lo que podría ocurrir porque pese a la resistencia inicial de los concejales de la UCR, finalmente el proyecto fue aprobado por mayoría absoluta.
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Para los vecinos, el recorrido que hoy está realizando la empresa “es el que puede hacer el chofer”, dado que las calles no están en condiciones. “Hay que entender a quienes manejan las unidades porque son trabajadores igual que todos. Los mandan a trabajar en calles que no están en condiciones y no pueden respetar ese trazado”, explicó Ledesma.
Asimismo, entienden que los choferes “vienen por la ruta a oscuras porque en esta época anochece temprano, con un colectivo cargado de gente, donde van todos apretados”.
En este punto, Ledesma apuntó directamente a los funcionarios locales: “Los que están hoy a cargo no tienen visión de la realidad, ni del futuro, no pueden programar absolutamente nada, son personas no aptas para cumplir la función que les corresponde”. A ello, agregó que -ayer domingo- “no llovió y las calles se podrían ir arreglando lentamente, pero no tienen poder de gestión, no sólo no les da la cabeza para gestionar, sino que no les importa”.
“Más de una hora esperando y nunca pasó”
Otro de los problemas es la frecuencia de horarios que manejan los colectivos, dado que se multiplican las quejas por la espera del transporte.
Los vecinos sostienen que deben esperar más de una hora el colectivo, con las temperaturas cada vez más bajas, en zonas de mucha oscuridad. “Se supone, por ejemplo, que hoy que es domingo debería haber un retraso de media hora como mucho y terminás esperando más de una hora”, reclamaron.
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