Su padre, Ernesto “Tucho” Sosa, la anotó como Haydeé Mercedes en el registro civil. Su madre, Ema del Carmen Girón, decía que él lo hizo a propósito para no ponerle Marta Mercedes, tal como ella había elegido. De todos modos, en su familia fue conocida como La Marta. Ella lo explicó mejor: “Al final, puertas adentro las cosas son como las madres quieren y puertas afuera son como la gente manda. En mi casa definitivamente soy La Marta y para la gente, definitivamente soy “La Negra””.

Su infancia

Mercedes tenía 12 años y memorizaba las canciones que oía en la radio de algún vecino, de
algún amigo y las cantaba. La radio era un lujo para su familia. Lolita Torres, Lola Flores, Miguel de Molina eran de sus preferidos.

“Busco en mi pasado y siempre me veo cantando. Cantando en mi casa, cantando en la escuela, cantando en los velorios (…) Cantaba porque sí, sin darme cuenta, porque me salía”, expresó Mercedes.

Su primera aparición frente al público fue interpretando el himno nacional argentino en la escuela. Su profesora Josefina Pesce de Medici vio en Mercedes atributos para la ópera. Más allá de esta apreciación, el destino de Mercedes sería otro: “Por suerte me convertí en una cantante popular”, expresó.

La niñez de “La Negra”, transitada en Tucumán, fue de extrema pobreza. Su madre lavaba y planchaba en casa de gente adinerada y su padre trabajaba en los hornos de los ingenios azucareros y aserraderos.

“No teníamos nada, pero teníamos el amor de nuestros padres. La pobreza y el casi hambre cuando hay amor, duelen, pero no dejan las heridas del resentimiento”, dijo Mercedes.

Su carrera

Cuando tenía 14 años, sus padres, fervientes peronistas, viajaron a Buenos Aires a celebrar un
17 de octubre. Mercedes se quedó al cuidado de sus hermanos mayores. Con una libertad que
nunca antes tuvo, se fue con sus compañeras de escuela a la radio LV12 donde se desarrollaba un concurso para cantantes desconocidos y ganó. Se presentó como Gladys Osorio para que su padre no la reconociera. Gladys se llamaba una de sus mejores amigas y Osorio era apellido de la chica abanderada de su escuela. Siguió cantando en la radio hasta que su padre la descubrió.

 

“¿Le parece bonito andar metiéndose en la radio? ¿eso es lo que hace una señorita criada para ser decente? Hubiera preferido que me diera una paliza. Ni siquiera me gritó. Me miró con esa mirada durísima. Hubiera querido jurarle que no lo iba a hacer más. Pero las palabras no me salieron”, recordó “La Negra”.

Al mes, tras reiteradas insistencias del director de la radio, Don Sosa accedió a que Mercedes firmara su primer contrato.

Mercedes, con 16 años, cantaba incentivaba por sus padres, en las peñas del Partido Peronista. Años más tarde, se afilió al Partido Comunista.

“Desde siempre tomó sus clases de canto de la mano de grandes profesores, aún estando en gira por países del mundo. Incluso, en junio de 2009, semanas antes de su partida, tomó sus habituales clases junto a su querida profesora Carmela Giuliano”, recuerda Fabián Matus, su hijo.

 

 

Desde la Fundación Mercedes Sosa, que Matus preside, recuerdan lo fundamental que era para Mercedes la selección del repertorio, porque “lo que se graba es para toda la vida”, tal cómo rezaba.

 

 

Detención y exilio

El 20 de octubre de 1978, en “El Almacén San José”, de la ciudad de La Plata, Mercedes Sosa brindó su último recital antes de emprender su exilio. La detuvieron en pleno recital junto a su hijo y su guitarrista Colacho Brizuela, debido a que interpretaron canciones “de protesta”, en ese entonces censuradas por el aparato represivo.

Las canciones eran:

  • Cuando tenga la tierra
  • Plegaria a un labrador
  • Canción con todos
  • Duerme negrito
  • Cantor de oficio
  • Piedro y Camino
  • La Alabanza
  • Como la cigarra
  • La Arenosa
  • Oración para la patria de uno
  • Canción de las simples cosas
  • Cantata sudamericana
  • Dale tu mano al indio
  • Canción para mi amiga

Luego de que los efectivos policiales la humillaran durante 18 horas con improperios referidos a su color de piel y su afiliación partidaria, Mercedes se exilió en Europa. Regresó en 1982, para cantar en el teatro “Ópera”.

Documentos Oficiales de la detención

 

Mercedes continuó una prolífera carrera, en la que compartió grabaciones y escenarios con los artistas más destacados del mundo.

Entre las distinciones recibidas a lo largo de su vida se encuentra el reconocimiento al disco “Al despertar”, trabajo elegido como el disco del año en los Premio Gardel, ceremonia en la que también fue distinguida como la Mejor Artista de folklore de la temporada.

Fue declarada Ciudadana ilustre de Tucumán, recibió la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania, la Medalla al Mérito Cultural del Ecuador, la Placa de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Perú en reconocimiento a sus 30 años de difusión del canto latinoamericano, el Premio ACE 1993 por su disco “Sino”, y el Martín Fierro 1994 al mejor show musical en televisión.

 

También se hizo acreedora del Gran Premio CAMU-UNESCO 1995, otorgado por el Consejo Argentino de la Música y por la Secretaria Regional para América Latina y el Caribe del Consejo Internacional de la Música de la UNESCO; del Premio de la UNIFEM, organismo de las Naciones Unidas, que la distinguió poco antes de una actuación en el Lincoln Center de Nueva York por su labor en defensa de los derechos de la mujer; del Konex de Platino 1995 a la Mejor Cantante Femenina de Folklore y del Konex de Brillante a la Mejor Artista Popular de la Década.

También fue incluida por la Conferencia de la Mujer, de la Secretaria General de la Naciones Unidas en la colección discográfica “Global Divas”.

Siempre atenta y dispuesta a trabajar en conjunto con los nuevos talentos, en dos de sus últimos trabajos de estudio “Cantora” 1 y 2, grabó junto con Shakira, Luis Alberto Spinetta, René Perez, Caetano Veloso y Joan Manuel Serrat, entre otros.

El 2 de octubre de 2009 ingresó al Sanatorio de La Trinidad del barrio de Palermo, Buenos Aires, por un decaimiento producido por la enfermedad de Chagas-Mazza que sufría desde hacía 30 años, afección que entorpecía el funcionamiento del corazón. Falleció el 4 de octubre de 2009 a los 74 años. Sus restos fueron velados en el Congreso Nacional.

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