El embajador de Argentina en Brasil, Daniel Scioli, se refirió a un avance importante en materia energética, vinculado al retorno de las operaciones para la exportación de gas nacional hacia el vecino país.

 

En declaraciones exclusivas a La Opinión Austral, Argentina volvió a exportar gas a Brasil luego de seis años.

 

Daniel Scioli.

Desde el domingo, Argentina reanudó sus exportaciones de gas a Brasil con la puesta en funcionamiento de la Central Térmica Uruguayana (CTU), ubicada en el estado de Río Grande do Sul.

 

La válvula que conecta el gasoducto de 437 kilómetros que une Aldea Brasilera (Argentina) con Uruguayana (Brasil) permaneció cerrada desde 2015, por lo que hasta el domingo el mercado brasileño no tuvo suministro de gas argentino.

 

La puesta en marcha de CTU, que pertenece a la empresa argentina Saesa, permite al país exportar hasta 2,4 millones de metros cúbicos de gas natural por día, cuando no lo necesita la demanda local.

 

Scioli aseguró que “la integración energética es un tema central en la agenda presente y futura de Brasil”, y que con esto el país gobernado por Alberto Fernández “ha dado un gran paso y un gran objetivo de poder exportar cada vez más energía”.

 

El embajador manifestó a La Opinión Austral que “aspiramos a otros proyectos muy importantes. Entre ellos hablamos sin dudas de los avances en la articulación del gasoducto Vaca Muerta- Uruguayana – Porto Alegre”.

 

Un gran objetivo de poder exportar cada vez más energía

 

Se trata de un programa a largo plazo para industrializar el gas natural que proviene de Vaca Muerta y convertirlo en GNL para luego venderlo a los principales mercados internacionales.

 

Acorde a los cálculos formulados en el Gobierno, el gasoducto binacional “permitiría llevar la demanda brasileña actual de gas de nuestro país de 3 millones m3/día a unos 15 millones m3/día”.

 

 

Se dividiría en tres tramos: desde Tratayen (Neuquén) a San Jerónimo (Santa Fe); desde San Jerónimo (Santa Fe) a Uruguayana, en la frontera de Río Grande do Sul y ya en el territorio vecino, desde Uruguayana a Porto Alegre, la capital del mismo Estado.

 

El foco es industrializar el gas de esa región para aprovechar mercados extranjeros que vienen aumentando sus necesidades de GNL en un sector que hoy demanda 300 millones de toneladas métricas por año y en el que compiten 18 países como productores y 39 países importadores.

 

 

 

Por su parte, el secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, destacó que “la puesta en marcha de CTU es un paso adelante, fundamentalmente porque permite generar divisas para la Argentina, pero además abre una oportunidad para fortalecer el comercio internacional, los lazos de integración energética y mejorar la balanza comercial”.

 

Una oportunidad para fortalecer el comercio internacional

 

Según informaron, cada día de operación de CTU implica para Argentina un ingreso de divisas de hasta US$ 500.000 y un potencial ingreso de más de US$ 100 millones al año, si solo se exportara fuera del invierno, periodo en que el gas es necesario para cubrir la demanda local.

 

La exportación de excedentes de gas argentino es provisoria y se estima que este proceso recién podrá consolidarse en los próximos meses, una vez que haya transcurrido el invierno y el Plan Gas comience a dar los resultados esperados, lo que permitirá que el país inicie el camino hacia el autoabastecimiento, con la posibilidad de realizar exportaciones en firme tanto a Chile como a Uruguay y Brasil.

Leé más notas de La Opinión Austral