Que florezcan mil flores”, repetía el expresidente Néstor Kirchner, un claro mensaje cuyo objetivo era que se multiplicara la militancia, particularmente entre los y las jóvenes de Argentina. Era en un momento en el que apenas veníamos saliendo del infierno, con argentinos y argentinas descreídos de la política y los políticos, en un contexto de fuerte crisis social y de representación.

En términos históricos, el paso del hombre nacido en nuestra Río Gallegos es apenas un puñado de años. Pero da la impresión que la impronta que le dio a su gestión y la forma de hacer política fueron tan grandes que su legado en la escena nacional perdurará por siempre. Como aquel microrrelato de Eduardo Galeano en el “Libro de los Abrazos”, cuando dice que hay “fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores” y fuegos que “arden la vida con tanta pasión que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende”.

Palabras como soberanía, popular, justicia social, eran sólo letras en los libros de las universidades

Quizás el primer legado que se le puede atribuir a Néstor Kirchner sin miedo a equivocarse es que recuperó la política como única herramienta para transformar la realidad. Hasta entonces, los y las jóvenes (los que no lo eran también), habían perdido toda esperanza en la política. Parecía que todo era igual, daba lo mismo quién nos gobernara, el pueblo pagaba con su espalda los errores y desaciertos (cuando no autoinfligidos) de una clase de políticos que parecía haber perdido el mandato supremo de que el gobierno era el pueblo. Palabras como soberanía, popular, independencia, justicia social, eran sólo letras en los libros de las universidades (las públicas) frente al mandato de los mercados y el sector financiero.

Los jóvenes abrazaron con fuerza la idea de que con convicciones se podía transformar la realidad

Podrá gustar más o menos el gobierno de Néstor Kirchner, pero nadie podrá negar jamás que fue disruptivo, que se paró a contramano de lo que otros llevados por la corriente no pudieron o no quisieron cambiar. Seguramente habrá quienes piensen que todo fue parte del azar, que estuvo en el momento y en el lugar adecuados, que se alinearon los planetas, que hubo una especie de conjunción de factores que se armaron como un rompecabezas por condición divina. Todo lo contrario, el exintendente y exgobernador santacruceño llevaba años formándose y debatiendo qué tipo de país se venía para la Argentina.

Hay fuegos con tanta pasión, que quien se acerca se enciende

¿Y los y las jóvenes? Fue una consecuencia de todo lo demás. Abrazaron con fuerza la idea de que con convicciones se podía transformar la realidad. Cientos de miles de ellos y ellas salieron a las calles a militar, a debatir, a llenar los espacios públicos que habían sido vaciados bajo el lema de que no servían.

Desde entonces, con avances y retrocesos, la política argentina vio nacer a dirigentes que hablan de Néstor Kirchner incluso casi sin haberlo visto gobernar. Es que las ideas perduran y el legado está más vivo que nunca.

 

 “¿UN LEGADO? INVOLUCRARTE”

Bárbara Díaz Robles tiene 25 años y milita en Kolina Santa Cruz. La primera vez que escuchó hablar de Néstor era muy chica, iba al jardín. “Mi papá trabajaba con él, en sus operativos de seguridad y viajaba mucho. Y, cuando volvía, me decía: Porque Néstor me dijo, Néstor me pidió. Entonces un día le pregunté quién era y mi mamá me explicó que era el jefe de mi papá. Entonces lo que yo hacía era buscar en la tele, en los actos del gobernador, a mi papá”.
Sin embargo, sostuvo que esa situación, lejos de alejarla de la figura de Kirchner, le generaba cierta fascinación. “Después no le pude esquivar de ninguna manera, siempre fui muy metida de chica y cuando empezaban las campañas, salía con los compañeros y compañeras a militar”, dijo.

FOTO: NICOLÁS PÉREZ/LA OPINIÓN AUSTRAL

Para mí era inevitable terminar militando porque eran mis raíces. Mi abuela es militante, mi papá es militante, mi tía lo fue, y si querés transformar algo, tenés que involucrarte 100%”, por lo que “empecé cuando tenía 13 años y la primera noche que salí a poner pasacalles fue con la agrupación de Servicios Públicos que funcionaba en la calle Avellaneda. Se organizó un grupo de 35 a 40 personas comandadas por mi papá y salimos a militar la campaña de Cristina”, indicó.

Para Bárbara, Néstor traspasó todas las generaciones. “Es difícil para el militante hablar en pasado, porque es como que está todo el tiempo presente en uno y también porque en esencia el hombre fue una persona revolucionaria, rompió las estructuras, rompía las formas que son innatas de un joven, de alguien inquieto”. Y añadió: “La esencia de Néstor es la esencia de ser rebelde y es parte de la juventud. No hay forma que los jóvenes que quieren involucrarse en política hablen mal de Néstor, porque te puede gustar o no su figura, pero la persona que involucró a los jóvenes en la política después de la última dictadura militar fue claramente Néstor Carlos Kirchner”. “¿Un legado? El movimiento, involucrarte, salir a la calle y no perder nunca el contacto con la gente”.

“PENSÓ Y APOSTÓ SIEMPRE A LA JUVENTUD”

Jesús Matulich tiene 27 años y pertenece a la agrupación Propongamos un Sueño. Como muchos en Río Gallegos, siente al expresidente como uno más de nosotros, un amigo, un vecino, alguien cercano. “La primera vez que escuché de él era muy niño, pero siempre estuvo presente hasta hoy. Al ser hijo de una militante de toda la vida, tanto Néstor como la militancia fueron de la mano en todo este recorrido en mi vida”, comenzó.

FOTO: NICOLÁS PÉREZ/LA OPINIÓN AUSTRAL

La primera vez que participó en política fue a los 11 años, en la agrupación “Por una Ciudad Solidaria” de Francisco “Batata” Mansilla. Era 2003 y Néstor era candidato a presidente. Antes, “en casa era un momento muy difícil. En 2001 mi mamá tuvo la desgracia de estar sin trabajo y Néstor y Alicia (Kirchner) fueron muy importantes para que nosotros pudiéramos ir a la escuela, tener nuestra comida, nuestra ropa, ayudaron mucho en lo social”, explicó.

Para Jesús, el expresidente “siempre motivó la fuerza del joven, pensó y apostó a que la juventud era el futuro y creo que esa fue una de las partes más fuertes en las que se hizo presente en la vida de los chicos”, dijo. “Ese hacer hincapié en los jóvenes fue lo que hizo que muchos de ellos se acercaran al proyecto y, a pesar de los años pasados, se van a cumplir 12 años de su fallecimiento, seguís recomendando que se hable de Néstor o sobre su legado”, afirmó.

Va a ser muy difícil que Néstor Kirchner desaparezca; fue un hombre que llegó a marcar un hito en la historia Argentina, que dejó un legado para después y hasta no sabiendo que iba a tener que dejarnos, ya tenía planeado el futuro y dejó las herramientas y a las personas adecuadas para que sigan manteniendo ese futuro que él veía y ese sueño que nos propuso en su momento y cumplió hasta sus últimos días”, enfatizó.
Para Jesús, el mayor orgullo que tendría Néstor es que “sigamos militando, ayudando al compañero y al que no lo es; que sigamos trabajando para que Argentina sea justa, libre y soberana”.

 

NÉSTOR “FUE VOLVER A CREER EN LA POLÍTICA”

Andrea Paillán tiene 22 años y milita en La Cámpora y en el frente universitario Rodolfo Walsh. Para esta joven, el principal legado de Néstor fue “volver a creer en la política”. Comentó que cuando vio a sus papás militar, veía en ellos que con Néstor y Cristina habían recuperado la política. “Fue lo más importante que nos dejó, no solamente a los grandes, sino también a la juventud”, sostuvo.

FOTO: LEANDRO FRANCO/LA OPINIÓN AUSTRAL

De muy niña lo veía por televisión, “en la época que los medios no eran tan opositores”, y recordó que asistió a su último acto en el Boxing Club. “Lo único que recuerdo es su voz y toda la multitud. Yo no podía verlo; me acuerdo ese día las espaldas de la gente, las banderas; tenía 10 años cuando falleció”, dijo con amargura.
Ese momento “fue un choque muy grande en mi familia porque mi casa era Néstor y Cristina y toda esa nueva mirada política que teníamos acá en Argentina y fue un día muy triste, un censo muy triste. Con ese hecho empecé a militar por mi cuenta, como individuo”, dijo.

Andrea sostuvo que lo que más le llamó la atención siempre fue “la fuerza y la convicción” con la que hacía las cosas. “Era chica y no lo entendía, ahora de grande lo hago más. Estando en un contexto político totalmente diferente, a veces se me ocurre pensar cómo hubiese sido Néstor con las nuevas tecnologías que tenemos hoy, hubiera sido un fenómeno totalmente diferente; en ese momento fue lo que el pueblo necesitaba y se aferró a eso”, afirmó.

“Hoy hace falta volver a retomar esa mirada que tenía, dar la discusión, y esos son los aspectos que más me llaman y las razones por las que sigo hoy acá. Mucha gente me cuestiona por qué sigo en este espacio, por qué utilizo estas camisetas, estas banderas, y es porque el proyecto y la convicción son una sola”, sostuvo.
Y cuando recuerda Néstor y su legado, piensa que “trató de cumplir su deber como presidente” y “creo que él querría que lo recordaran como alguien que hizo”, manifestó.

“COMO NÉSTOR DECÍA: MILITAR DE SOL A SOL”

Nelson Silvero tiene 32 años y milita para los Muchachos Peronistas. Según indicó, el principal legado que ha dejado Néstor Kirchner “ha sido el de la militancia” y añadió: “Como él decía: militar de sol a sol”, recordó.

La primera vez que empezó a escuchar de Néstor fue en su casa, por su papá. “Empecé a ir a militar con un amigo; iba a mirar, a estar”, dijo y sostuvo: “Lo que más destaco de él es cómo ha transformado a la Argentina; el país estaba quebrado y logró poner a Argentina de pie”.
Nelson recordó aquel acto en el Luna Park cuando el expresidente dijo que florezcan mil flores más. “Creo que ha hecho un clic en los jóvenes para que arranquen a militar”, manifestó, al tiempo que recordó haberlo visto en un en un acto cuando era gobernador de Santa Cruz. “Bajaba del escenario y empezaba a saludar a la gente que se le acercaba con cartas, era un ciudadano más”, dijo.

Sin embargo, aclaró: “Hoy en día la vara está muy baja para lo que fue el expresidente; falta incluso más militancia, falta mucho salir a la calle, hablar con el vecino, con el compañero. Cuando decimos: Volvamos a Néstor, es eso, estar con el vecino para dar solución, que hoy en día está muy complicado”.

Silvero también hizo referencia al libro “Mi amigo, el presidente” de Rudy Ulloa. Al respecto, sostuvo que habla de los sueños y hasta mencionó que sería bueno que todos los jóvenes lo puedan leer, ya que es una “guía para la militancia”. Cuenta “cómo se fue transformando y recreando el Frente para la Victoria”, pero también “toda la experiencia de esos compañeros que hoy no están, algunos que están en su casa; bueno, ir a buscarlos para que también nos guíen, ya que tienen mayor experiencia, y volver al territorio”.

Finalmente, recordó que el 17 de noviembre “Los Muchachos Peronistas” cumple 40 años. “Estamos más que orgullosos de estar en esta unidad básica que él ha creado y siempre levantar su bandera”, expresó.

“EL QUE MEJOR SUPO REPRESENTAR AL PERONISMO”

Nicolás Mansilla tiene 23 años y milita para el sector político de Pablo Grasso. El primer acercamiento a Néstor fue cuando era chico, tenía unos cinco años. “Lo veía mucho en las noticias y lo que más me quedó marcado fue el ¿Qué te pasa Clarín? Y ahí fue cuando yo empecé a preguntar a mis papás en la casa, en la familia, qué era Clarín”, comentó.

Ya más grande, a los 17, “Nico” empezó a interesarse y a investigar sobre ese dirigente que lo intrigaba. “Todo lo que pude saber en YouTube y las redes sociales. Ahí Néstor me cautivó mucho con el acercamiento que él tenía a los jóvenes y en especial a la figura del estudiante. Me acuerdo de un discurso que decía que a los chicos no los controla nadie y les pedía a los actores políticos que no se enojaran si los estudiantes protestaban: le daba un respaldo a la figura del estudiante que tan menospreciado había sido con el tiempo”, enfatizó.

Lo que cautiva de Néstor a los jóvenes es todo el acercamiento popular que tenía y toda la defensa de derechos; todas las medidas populares que tomó, porque hay una característica del peronismo clave que es el populismo y creo que Néstor, luego de (Juan Domingo) Perón, es el presidente que mejor supo representar al peronismo. Los jóvenes hemos quedado un poco huérfanos después de su muerte”, expresó.

Me hubiese gustado tener un acercamiento a Néstor, aunque sea en mi infancia, porque ya se nota leyendo artículos periodísticos, viendo videos en YouTube o los registros en la tele, que era de un carácter y una personalidad muy fuertes; me hubiese gustado ver cómo era en persona, dirigiéndose a una multitud, a las masas; era una persona fácil de acceder, como creo que debería ser un político”, sostuvo.
Pero también dijo que su figura ha sido muy golpeada por medios hegemónicos. “Sin ir más lejos, Clarín. Hubo toda una operación desde el sector de la derecha hacia Néstor; históricamente hacia el peronismo también, no es nada nuevo”, aseguró.

 

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