Danzas árabes: la dedicación en cada movimiento

 

Desde 2011, el grupo de Danzas Árabes realiza dos muestras anuales.

En el año 2010 existía un espacio que se llamaba Arte Boxing y que tenía como propósito contar con otro tipo de propuestas para los socios del Albiverde. Silvia Luna recuerda que en aquel momento fue convocada y, una semana después de mantener una reunión con Emilio Guatti y Etelvina Perales, abrió el grupo de Danzas Árabes.

Pasó de cero alumnas a medio centenar que se presentó en la primera muestra realizada en 2011, así cada seis meses se desarrollaron presentaciones de forma ininterrumpida hasta este año que la cuarentena lo impidió.

 

 

Estos 11 años en el Boxing Luna los vive con emotividad. En aquel momento, recuerda, “era muy triste el panorama, el club estaba muy venido abajo. Esta última comisión directiva trabajó un montón y levantó el club desde la identidad, a cada disciplina, realizó la restauración de la sede de avenida San Martín”.

 

 

“Si me hubiera ido en ese momento me hubiera quedado con otra sensación del club, haber estado todos estos años viendo los cambios, la gente que pasó y que siempre perseveró para que el club esté mejor me pone muy contenta”, reconoce la profesora.

Los cambios fueron paulatinos y positivos. “Se comenzó a ver el trabajo y el esfuerzo de mucha gente que está en la comisión, tanto profes como directores de deporte. Que gente así esté a cargo de la comisión expresa lo que está pasando”, dice.

 

Noches de gala

En más de una década de trabajo, además de lo vivido en el club están las experiencias con cada grupo de alumnas. “Cada gala es especial, vos ves el esfuerzo de las madres de las niñas, de las bailarinas, son muchas horas de ensayo, la gente ni se imagina el tiempo que las chicas dedican para poder subirse al escenario”, señala.

“En los últimos años lo que más he valorado no es tanto lo vinculado a los resultados técnicos, sino a ver a la gente feliz” destacó, y mencionó el esfuerzo de muchos para poder asistir a clases. “Esa es su noche de gala, es su momento para expresar todo lo que sienten, y es lo que más me reconforta”.

 

Acrobacias aéreas: atreverse a los nuevos desafíos

 

 

Analía Rottenberg es albiverde desde que tiene memoria. Entre los 8 y los 16 años practicó gimnasia artística, en 2005 dejó Río Gallegos para continuar sus estudios universitarios y fue durante ese período en Buenos Aires que conoció las acrobacias áereas. En 2012, ya de regreso en la capital santacruceña, presentó un proyecto para desarrollar la actividad en el albiverde.

 

Analía Rottenberg practicando gimnasia artística.

 

 

Rottenberg reconoce que “al principio es bastante complicado, era una actividad nueva, no era muy conocida. Además requería muchas condiciones, como la altura”. En lo personal, “no pensaba que me iba a fascinar tanto. Cuando inicié tenía conocimientos básicos, comenzamos con eso y después seguimos perfeccionándonos”. El club los ayudó para eso, “fue un crecimiento en paralelo. Nunca pensamos que iba a ser algo tan duradero”.

 

Entrenando en el Atlético Boxing Club.

 

Hoy son siete quienes integran el staff de la Escuela de Acrobacias Aéreas: Pamela Galarza, Antonella Cepeda, Nancy Seguer, Paola Pavanello, Claudia Perancho y Maite Acuña. Hasta el año pasado también formó parte del staff Lucas Iñigues.

Detrás de los profesores, el número de alumnos y alumnas es reducido por una exigencia propia: brindar una enseñanza personalizada y atenta a todas las condiciones de seguridad que exige trabajar en las alturas.

 

El equipo de profesores de Acrobacias Aéreas del Atlético Boxing Club.

 

En crecimiento

La escuela albiverde ha sido convocada para realizar muestras en eventos municipales y provinciales. Si bien la disciplina no está muy desarrollada en la ciudad, ser sede de Provinciales y Regionales le permitió a muchas chicas, no sólo viajar, sino acceder a un torneo competitivo. “Hemos tenido experiencias increíbles y alumnas que han logrado clasificar y viajar representando al club”, destaca.

Representar al ABC también implica capacitarse. “En Buenos Aires empecé a hacer talleres y cursos. Recientemente finalicé instructorado de tela y de lira y me sigo capacitando día a día”, afirma la albiverde que con dedicación y perseverancia sigue al frente de una escuela que hace 8 años era sólo un proyecto y hoy es una realidad.

 

Danzas: una escuela que superó las expectativas

 

La Escuela de Danzas en la muestra de step one, en el gimnasio Juan Bautista Rocha.

 

Fernanda Castro y Dariana Gallardo son las responsables de la Escuela de Danzas del ABC. En la histórica sede de avenida San Martín imparten clases de Iniciación para niños y niñas de 4 a 10 años y de Danzas Clásicas, Contemporáneas y Ritmos Urbanos, a partir de los 13 años.

Gallardo es profesora de Tango y está realizando un perfeccionamiento en Ritmos Urbanos, mientras que Castro es profesora de folclore, ambas asistieron a la academia de Reina Reech.

 

 

Recuerda Gallardo que “al principio estábamos un poco asustadas, era lanzarse a algo totalmente nuevo, nos cuestionamos si nos iba a ir bien, pero con el transcurso del tiempo nos hicimos muy conocidas en el ámbito de la danza, ya que también trabajamos en otras escuelas, y se llenó de chicos, eso nos puso muy contentas. Empezamos con 30-40 alumnos”.

Cerraron el 2019 con un grupo de entre 50 y 60 bailarines. Este año, la cuarentena por la pandemia del coronavirus les impidió un inicio normal de las clases y sólo tuvieron 15 días de clases presenciales cuando hubo reapertura de actividades. Luego del retroceso de fase, las clases continuaron de manera online.

Versatilidad

A pesar de los contratiempos, la Escuela sigue en movimiento tanto con el dictado de las clases virtuales como con los perfeccionamientos que realizan sus profesoras. Dariana reconoce que “es importante ser versátil, nunca te podés quedar con una sola cosa. La danza va avanzando”.

Entre los estilos, el que se impone en convocatoria es el de Ritmos Urbanos, “es lo que está muy de moda”, dice la profesora.

 

 

Durante 2019, la Escuela presentó dos muestras, una en julio y otra en diciembre, donde presentaron todo lo realizado durante el año.

Pero además realizó presentaciones en diferentes ocasiones que van desde eventos políticos hasta fiestas de 15 años y casamientos. “Estuvimos bailando por todos lados. Participamos en todo lo que sea para que los chicos muestren lo que están trabajando”, sostiene.

A un año del inicio de la actividad de la Escuela de Danzas, Gallardo expresa: “Estamos súper contentas”. Mientras se extiende el aislamiento, continúan las clases y esperan pronto poder volver a reunirse con sus alumnas y alumnos para bailar y mostrar todo lo que saben y disfrutan hacer en los escenarios.

 

Gimnasia rítmica: superación y crecimiento constante

 

 

Primera participación de la Escuela de Gimnasia Rítmica en un certamen en Chile.

 

La incorporación en 2014 de la Gimnasia Rítmica en los Juegos Nacionales Evita impulsó el desarrollo de la disciplina en todo el país. En Río Gallegos, la idea le interesó a la profesora Belén Márquez, quien se venía desempeñando en el grupo de trabajo de la Escuela de Gimnasia Artística del Atlético Boxing Club.

Pero pasaron dos años hasta que finalmente se dio inicio al proyecto de la Escuela, convocando en el rango que va de los 3 a los 17 años en la sede de avenida San Martín.

“Desde el primer año observamos la importancia de la participación en eventos para poder crecer como gimnastas”, comenta Márquez.

 

La Escuela participando en un certamen en Chile.

 

“Empezamos con participaciones y luego con competencia, todos los años desde que iniciamos fuimos a Punta Arenas, que es el lugar que nos queda más cerca. Los papás nos acompañaron en esos eventos”. Así fue como el deporte tomó envión teniendo además la motivación de poder representar al club en las diferentes instancias de los Juegos Nacionales Evita.

Cabe señalar que, en la capital santacruceña, la del ABC es la única escuela. En la Zona Norte de la provincia, específicamente en Caleta Olivia, hay desarrollo de la actividad como así también en El Calafate, pero su mayor intercambio, por la proximidad, es con Punta Arenas, Chile.

 

El grupo de 3, 4 y 5 años en la Gala 2019.

Logros en casa

El 2019 cerró con una gala protagonizada por 56 deportistas y, este año, a pesar de lo que uno pudiera pensar por la pandemia, no se paralizó la actividad.

Desde el confinamiento, las gimnastas se han presentado en distintos torneos internacionales y continúan trabajando, entrenando y representando de la mejor manera al Atlético Boxing Club.

A modo de ejemplo, a principio de agosto, las albiverdes participaron de manera virtual en el 3er Torneo Países Unidos que contó con la asistencia de 400 competidoras de 13 países: Argentina, México, Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia, Chile, Ecuador, Panamá, Costa Rica y España, entre otros.

“Las participaciones que tenemos en este contexto de la cuarentena han sido muy interesantes porque las gimnastas fueron evaluadas por juezas internacionales que están metidas de lleno en la rítmica”, cuenta Belén, y destaca que “eso es una experiencia muy valorable para las nenas y para mí”.

Reiteró la importancia de estas presentaciones ya que “te guían con relación a cómo estamos llevando a cabo el trabajo”. Y en ese contexto, admitió: “Quedé sorprendida, porque participaron chicas de muchísimos países”. Y las albiverdes no desentonaron. “Nuestras gimnastas dieron lo mejor de ellas, tuvieron buenos resultados y aprendimos muchísimo”.

Por esa razón, Belén Márquez está satisfecha con lo logrado hasta acá: “El resultado te dice que vamos por buen camino con la preparación de las nenas”.

 

Wellness y Funcional: el entrenamiento a medida

 

La sala de wellness recibe a alrededor de 400 socios.En el primer piso del polideportivo de Provincias Unidas se encuentra la sala de Wellness del Atlético Boxing Club. Equipada con cintas, bicicletas fijas, elípticos y máquinas de fuerza, recibe alrededor de 400 personas que son asesoradas por Pablo González, Rafael Díaz y Marcos Neira.

La comunicación con los responsables del área de wellness es esencial para poder atender al mantenimiento del equipamiento y de las diferentes necesidades de los socios.

 

 

Mariela Mendoza, directora de Deportes del ABC, explica: “Todos los días surge algo nuevo en wellness. Asiste mucha gente y todos tienen distintos intereses. Tenes gente que va a mejorar su condición física, después están los jugadores del club que quieren hacer otro trabajo y necesitan un peso extra y a veces no disponen de eso porque lo está usando otro socio”.

 

 

La sala de wellness nunca dejó de funcionar, con la cuarentena llegó la primera interrupción de este servicio para el socio que tuvo un breve regreso cuando se reabrieron la actividades.

Explica Mendoza que el equipamiento exige un mantenimiento sencillo, pero costoso. Es por eso que, de un tiempo a esta parte, además del mantenimiento diario por parte del personal del club, sumaron un servicio técnico externo una vez al mes.

Recuperar la vieja sede

Desde fines de 2017 en la sede de avenida San Martín, Marcela Ferreiros se puso al frente del entrenamiento funcional. Tiempo antes, para que ese espacio estuviera disponible, Romina Lucero con Rubén Gargaglione pusieron manos a la obra en la recuperación del edificio, a lo que se sumó la familia Lucero, “Pipe” Oyarzo y otros socios adultos.

“Hoy es un placer ir a la sede de San Martín”, afirma Mendoza sobre el espacio que alberga actividades y deportes, como básquet y gimnasia rítmica, descomprimiendo el polideportivo y recuperando un edificio que es parte de la historia albiverde.

La actividad tuvo buena repercusión, posteriormente quedó a cargo de Romina Corsini y se trasladó al polideportivo. En 2019 volvió Marcela Ferreirros para ponerse al frente de los grupos y el año con medio centenar de asistentes a las clases.

 

Squash: con la firme decisión de impulsar el deporte

 

El squash del Atlético Boxing Club es el único representante provincial.

 

En 1980, Shell donó la primera cancha de squash al Club Británico. Años después, dado que el número de practicantes mermó, la comisión directiva decidió desarmarla. Pasarían más de 30 años para que el deporte volviera a emerger en Río Gallegos. Fue en 2011 cuando una comisión, que encabezaban Juan Crespo y Colin Jamieson, entre otros, decidió reactivar y promocionar la disciplina.

Se inició un proceso “que llevó a que hubiera una práctica masiva del deporte” con casi 100 jugadores en total, apuntó Jorge Cassin, entrenador G1. Pronto llegó la idea de sumar a los Menores y a las Damas, formándose las escuelas y de ahí los torneos.

 

(De Izq. a Der.) Los jugadores Federico Martin, Marcelo Gómez, Julio Ballardini y Colin Jameson.

 

Hace algunos años en El Calafate había dos canchas de squash, hoy cerraron y en Santa Cruz este deporte únicamente tiene lugar en el Atlético Boxing Club. “Necesitábamos más espacio”, señala Cassin, por lo que se encaró una cancha nueva, “pero no la pudimos terminar por cuestiones económicas”. Igual advierte que el deporte “forma parte del ADN de Boxing”.

El impulso

Por esa ausencia de rivales, el deporte hoy cuenta con una veintena de jugadores y jugadoras que persisten. Pero esperan recuperar, con el acompañamiento de la institución y de políticas gubernamentales, el impulso que la disciplina se merece.

“No es un costo de infraestructura grande, mientras más canchas existan, habrá mayor cantidad de gente que lo practique, se puede masificar la capacitación de entrenadores y arrancar con la escuela de menores, que es fundamental para la continuidad del deporte”, reflexiona Cassin.

A nivel nacional, la Federación del Deporte Universitario Argentino (FEDUA) recientemente incorporó al squash al proyecto Doble Carrera, que busca vincular a estudiantes con instituciones de nivel superior y que así desarrollen el deporte y su educación de manera simultánea. De esta manera, el ABC podrá albergar a estudiantes deportistas y a su vez hacer crecer la actividad.

“Como practicante, profe y persona que se dedicó al deporte en los últimos años, pienso que es algo que debe fomentarse. Es lindo y se puede jugar todo el año. Los que amamos el squash queremos poder tener nuestros representantes a nivel local, provincial y, por qué no, nacional”.

 

Vóley: un semillero en constante evolución

El profesor Martín Nogueira con las jugadoras albiverdes.

El saque inicial para incorporar al vóley femenino en el albiverde se dio en una charla entre el jugador de Primera Horacio Retamar y el profesor Martín Nogueira. Hubo conversaciones en la comisión directiva y con el entonces director de Deportes, Adrián Barcia.

 

“Arrancamos de cero. No había nada, teníamos 4 o 5 chicas. El primer año costó mucho. Recuerdo haber ido a distintas escuelas, a diferentes lugares a ofrecer la actividad, para que las chicas sepan que el vóley estaba en el club, porque hacía muchos años que no había”, cuenta Nogueira.

 

“Todo ese 2015 costó hasta poder armar un grupo sólido para recién en el 2016 empezar a competir”, apunta. Comenzaron a participar de la categoría Promocional en la Liga Riogalleguense de la Asociación Sur de Santa Cruz de Voleibol (ASSAVO). “De a poco fue creciendo hasta poder armar cuatro categorías, incluyendo a las más chiquititas: el Mini Vóley, hasta la estructura que tenemos hoy”, marca.

“En 2018  hubo torneo en Inferiores, y salimos campeones” recuerda con orgullo el DT. En los Evita “participamos durante 3 o 4 años. En 2017 logramos ganar la etapa local y por primera vez jugamos un Provincial. En 2018 jugamos en los Provinciales de la FESAVOL, teníamos un plantel bastante amplio para animarnos tanto en Sub 15 como en Sub 17. Es una experiencia muy linda, viajas mucho, te cruzas con chicas que juegan hace mucho tiempo, equipos muy sólidos. Fue fantástico, hizo crecer mucho a las chicas. Después de esas competencias logramos ganar la Liga local”, repasa el profesor.

 

Sexteto que obtuvo el primer puesto en la Instancia Local de los Juegos Evita 2018.

 

Camadas

Nogueira sostiene que cada camada se ha destacado. “En la primera parte, el Evita que le ganamos en Instanca Local al 17 de Octubre fue muy fuerte porque habíamos jugado un millón de veces contra ellos y
habíamos perdido siempre, haber ganado por primera vez una final lo festejamos mucho. Cada viaje que hemos hecho, hemos recorrido casi toda la provincia, siempre deja mucha enseñanza”.

 

Viaje a Ushuaia en 2019.

 

El año pasado, cuenta “teníamos un muy buen plantel y logramos viajar a Ushuaia contra equipos de la isla que tienen muy buenas Inferiores. Después de este torneo, el equipo hizo un clic muy grande para lograr jugar una segunda mitad de año en un muy buen nivel”. Luego de un primer año complicado y atravesando este sexto en una pandemia, Nogueira es positivo y apunta: “Hay años buenos, años malos, pero lo importante es que la actividad pueda mantenerse”.

 

Handball: sentir la camiseta en cada jugada

Siete años después, el Handball Femenino sigue vigente en el Albiverde.

 

Agustina Fernández es una de las jugadoras del equipo de Primera de Handball Femenino del Atlético Boxing Club, pero su vínculo con el Albiverde se inició hacemás de 20 años. Comenzó a jugar al handball cuando tenía 9, después siguió por fuera del club, pero siempre estuvo vinculada al ABC, colaborando desde diferentes áreas. Cuando, en 2012, Celeste Meccia se sumó al Albiverde e impulsó la creación de la Primera, Agustina volvió a jugar en el club después de 7 años.

Para Fernández, haber regresado “es muy especial”. Reconoció que “es complicado mantener una disciplina que no es como el fútbol o el básquet. Hay que difundirla para que se sume gente”, remarcó.

Los viajes

Desde que se reactivó la categoría, “todos los años vamos al torneo de Caleta Olivia que se hace en noviembre. Y hemos jugado Liga Municipal. Nuestro objetivo era volver a participar de un regional. Y el año pasado lo pudimos cumplir. Queríamos que el Boxing volviera y se logró. Más que feliz”.

Con altas y bajas, ya son siete años de handball femenino. Respecto a por qué cree que se mantiene la actividad, Fernández explica que “más de una hace tiempo viene amando y sintiendo los colores del club, queriendo defender a la institución. Cuando en un momento quedamos cinco, seis, ahí es cuando una dice ‘mi compañera siente la camiseta igual que yo’”.

Este año, las albiverdes tenían previsto participar en un torneo que abría el calendario de competencias en marzo en Gobernador Gregores. La pandemia suspendió las competencias y los entrenamientos presenciales, pero no las ganas de seguir en actividad.

Actualmente, se reúnen de manera virtual y entrenan tres veces a la semana, encuentros a los también abren la invitación para otras interesadas.

Del grupo de 17 jugadoras, que dirige Luciano Calbucoy, Agustina destaca lo unido que es. “Entrenamos y una vez al mes nos juntamos a comer, a tomar algo, a tomar unos mates, creo que todo eso hace que hoy en día sigamos juntas. Con los altos y bajos que hay, siempre se sigue”.

 

Básquet: la pasión de las Mamis desplegada en la cancha

Las Mami Básquet junto al entrenador Esteban Cheuqueman.

 

En 2013, el básquet masculino regresó al ABC. Tras años de inactividad, fue el resurgimiento del deporte el que abrió la puerta para que detrás llegara el equipo de la rama femenina.

César Almonacid, coordinador de la disciplina, recordó que “el básquet se había perdido, volvió a remontar un poco hace unos seis años y, a raíz de esto, comenzó la convocatoria de los más chiquititos. Una vez que tenés una disciplina activa en un club, se empiezan a sumar, de esa forma se llegó a formar el equipo femenino”.

Con la creación de la Liga Riogalleguense (LiBaR) y la incorporación de las categorías femeninas, el flamante equipo de Mamis tenía la posibilidad de medirse en cancha, fin de semana por medio, y seguir creciendo.

La competencia local, que este año cumple su séptima temporada, les propuso a los equipos mantenerse en actividad y para las mujeres fue un aliciente para su desarrollo deportivo.

En competencias

Pero participan no sólo a nivel local. “Siempre nos están invitando, donde se puede viajar, viajamos. El año pasado el equipo femenino tuvo varios viajes a Piedra Buena, a San Julián”, comenta Almonacid.

Actualmente son alrededor de 20 jugadoras, de entre 30 y 42 años, las que integran el plantel. Y la pasión por el básquet es contagiosa. Varias de ellas comparten el interés con sus hijos, que juegan en el semillero albiverde.

Sobre los logros, el coordinador destacó que “con el equipo femenino se ha jugado muy bien, las Mamis lo han representado muy bien” y siempre fueron candidatas “a llegar a la final o ser campeonas”.

Remarcó que “todo lleva un período que por ahí cuesta”, pero destacó: “El equipo de Mamis ha dejado muy bien representado al básquet. ¡Siempre ha puesto todo!”. Más allá del crecimiento en la cancha y los resultados, Almonacid apunta que es esencial que sigan sumándose jugadoras y así, una vez que el básquet vuelva a las canchas, sean muchas más. “Espero que una vez que pase todo esto, el equipo pueda seguir representando al club de la mejor manera”, anhela.

 

Maxi Handball: los años pasan, la pasión se renueva

El equipo se reencontró 25 años después, jamás imaginaron que recorrerían el país con el Maxi Handball.

En las décadas de los ochenta y noventa un grupo de jóvenes jugadores vestía la camiseta del Atlético Boxing Club en los torneos Apertura, Clausura y en la Liga Oficial de Handball.

“Éramos pocos los equipos, unos seis, siete. En aquel entonces existía el Austral, un torneo patagónico, al que venían todas las selecciones o equipos campeones”, recuerda Dante Águila. Los Australes del ‘88, ‘89 y ‘91 “fueron los mayores logros del Boxing, por ahí eramos un equipo pachorriento, pero aparecieron los Australes y los que se jugaron, se ganaron”.

 

Un recorte de la década de los ochenta.

Pasó el tiempo y el grupo se disolvió, pero hace unos cuatro años, el entrenador Flavio Sosa los convocó al gimnasio municipal “Lucho” Fernández. Los handboleros, ya con más años encima, volvieron a la cancha. Pero un día “Tito” Velásquez los vio y les preguntó porqué no volvían al club. En el “Lucho” les habían abierto las puertas y disfrutaban el espacio, pero la diferencia de edad con otros jugadores se hacía cuesta arriba, y entre charla y charla finalmente decidieron volver al ABC.

Primero entrenaron con la Primera Masculina y cuando ésta se disolvió pasaron a entrenar con el equipo de mujeres. Admite: “Primero era medio raro, nunca habíamos entrenado con un equipo femenino, pero después nos dimos cuenta que por la velocidad a la que jugaban, que es más rápida que la del Maxi a nivel Sudamericano, nos servía un montón”.

El jugador analiza: “Creo que los logros del Maxi se deben a que hemos tenido el apoyo del equipo femenino del club. A lo mejor podrían haber dicho “a nosotros no nos sirve entrenar con viejos”, pero rompieron ese prejuicio. Cuando llegábamos a jugar a Córdoba, Paraguay, Gualeguaychú, Mendoza, notábamos que la velocidad con la que jugaban las chicas de acá, nos servía”.

Desde aquel reencuentro, Águila destaca varias participaciones de los Maxi: “Mendoza porque fue el primero que fuimos, eramos los pollitos mojados y no sabíamos con qué nos íbamos a encontrar, cuando jugábamos en Primera los mismos jugadores nos hacían 20 de diferencia”.

Boxing campeón de la décima edición del Torneo Austral, el certamen más importante de aquellos años.

La lista sigue: “En Córdoba fue la primera vez que se le ganó a un equipo de Buenos Aires y Paraguay porque fue la primera vez que salíamos del país. En Gualeguaychú se ganó jugando con un equipo sin refuerzos”, precisa.

“San Martín de los Andes fue el último que se jugó y creo que ese fue el techo de los Maxi, no vamos a volver a jugar así en nuestra vida. Fue un fin de semana soñado. Se le ganó a Los Cóndores (Selección Chilena) por cinco goles, ese equipo tiene muy buen nivel, son chicos de 40-45 años.

El equipo de Maxi Handball en San Martín de los Andes, dicho por propios y extraños el mejor de la categoría.

 

Fue un partido creo que en todas las líneas, perfecto”, destaca orgulloso. En los viajes, además de resultados, cosecharon aprecio y refuerzos. “El Maxi del Boxing nunca tiene suspendidos, nunca tuvo problemas, y si los hubo nunca lo reflejamos en la cancha, entonces se organiza un torneo y preguntan ‘¿viene el Boxing?’ y se suman refuerzos, nos invitan a todos lados”.

 

Lo mejor del Maxi Handball de la Argentina en el Encuentro “Mamá Tita” realizado en 2018.

 

El conjunto jurásico tenía planeado que el 2020 sea su último año de actividad, querían despedirse con el Torneo Centenario del ABC, pero la pandemia lo obligó a posponer. “Nuestra actividad volvió a ser recreativa, pero cuando entramos a la cancha todos queremos ganar. También nos motiva seguir entrenando porque nos dimos cuenta que con dos o tres veces por semana, a nuestro ritmo, vamos a los torneos y no volvemos rotos”, comenta entre risas.

“Lo que nos mantiene en actividad son los dos, tres viajes que hacemos en el año, es todavía sentirse útil”, sostiene Águila. De los Maxi dice que lo primordial es que “nos conocemos desde hace tantos años que por ahí alguna diferencia se charla y ya está, y vamos a pasarla bien”.

 

Newcom en el Boxing Club: compromiso, contención y mucha diversión

Los newcomeros albiverdes en la tercera edición del torneo beach “Juanito Soto”.

Hace algunos años, el newcom comenzó a desarrollarse en toda la provincia. Al Atlético Boxing llegó en 2016.

Fue Leo Mata, actual secretario del club, quien le comentó a “Pato” Kaiser que había un grupo de adultos que buscaba entrenador. Con una extensa trayectoria en el vóley y recién jubilado, Kaiser pensó y repensó la propuesta, que finalmente aceptó.

El newcom es un deporte de bajo impacto y muy similar al vóley, exige que los equipos sean mixtos y convoca a los mayores de 50, 60 y 70 años. Pero la característica que no está en el reglamento y es vital: es divertirse.

La voz se corrió, la disciplina comenzó a crecer y el calendario de competencias, a abultarse. En ese marco, los albiverdes propusieron el torneo de Beach, pero para poder llevarlo a cabo primero necesitaban dónde jugarlo, fue así que se ocuparon de limpiar un predio lindero al polideportivo, lo acondicionaron y desde hace tres años tienen dos canchas de Beach.

“Es un logro importante”, destaca Kaiser, y agrega: “Como club, la comisión directiva tiene que estar orgullosa, en un predio donde no había nada, sólo mugre, los newcomeros tratamos de ponerlo en condiciones para armar las canchas. Lo realizamos con sacrificio de toda la gente del club y de los nuestros que trabajaron día a día para que podamos tener nuestra canchita al aire libre”.

La mejora que tuvieron este año fue la iluminación. “Servicios Públicos nos puso las luminarias para poder jugar de noche, es un logro importante no sólo para el newcom, sino para la institución, porque nosotros pasamos y la institución queda”, señala.

El abrazo de “Pato” Kaiser y Juanito Soto en el torneo realizado en febrero-marzo 2020.

 

“Buscamos dejar para los futuros newcomeros un espacio al aire libre con iluminación. También está la idea de que pueda haber un espacio de buffet”. A fines de febrero se realizó la tercera edición del Newcom Beach al que denominaron “Juanito Soto”, en homenaje a un newcomero muy querido, con una importante trayectoria en el club y además actual vicepresidente del ABC.

Entre los logros de estos cuatro años, Kaiser también menciona “el torneo que realizamos el año pasado con 36 equipos, creo que dejamos una marca en la historia como institución, por ser el primero en tener 36 equipos en esta competencia”.

Premiación en el Torneo “Juanito Soto”. FOTO: ARCHIVO LOA

 

No hay saldo negativo en el newcom, las únicas notas tristes son las ausencias de quienes ya físicamente no están, pero que en su paso por la comunidad del newcom dejaron, cada uno con su personalidad, una marca en los corazones de sus compañeros y compañeras.

Para Kaiser, el grupo de más de 30 newcomeros y newcomeras se mantiene porque “más allá de ser una actividad deportiva, lo importante es la contención del grupo, dar herramientas para que puedan tener una mejor calidad de salud y compartir con sus pares sus vivencias y experiencias de vida, sobre todo en los viajes, eso nos fortaleció bastante”.

El entrenador y también jugador, se sincera al decir: “Agradezco a Leo Mata por insistirme. Estoy en el lugar donde muchísimos profes quisieran estar!” afirmó. Valoró el equipo: “Se mantienen muchos de los que estaban el primer día que llegué al club, uno se tiene que sentir satisfecho”.

“Siempre le digo a los newcomeros, hoy me toca estar en una actividad deportiva que me gustó, me encariñé y como al vóley, la estoy aprendiendo a amar, pero también sé que los profes pasamos. No somos eternos, la idea es ir sembrando y cosechando poco a poco para que el día de mañana a quienes les toque estar en mi lugar lo hagan con compromiso y pasión.

Hay que primero amar esa actividad y crecer en los adultos mayores que son los que nos encaminan día a día! Y con su sabiduría de vida siempre nos dan un consejo para seguir adelante”.

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