El 15 de marzo de 1988 un grupo de amigos se reunió en Río Gallegos y formó uno de los clubes más emblemáticos en la historia del deporte en la ciudad: Macá Tobiano Rubby Club.
El Verde, que día a día crece en infraestructura y deportivamente, cumplió 33 gloriosos años, que con tropiezos, caídas y levantadas, sigue siendo con el paso de los años una gran familia.
Desde pequeños unidos por esta pasión.
Esta familia fue dándole lugar al rugby y lo impuso como uno de los deportes más practicados en la ciudad capital, en base a esfuerzo, dedicación, y un gran trabajo que realizaron los socios fundadores y los activos.
La historia dice que aquel grupo de amigos comenzó a jugar en la cancha que había donde hoy se ubica el Hospital Regional de Río Gallegos, en José Ingenieros 98. El primer presidente fue Oscar Funes.
Quién mejor para hablar de la historia, de aquellos inicios y los tiempos actuales, que el presidente Daniel Gallardo, que se sumó a la institución en su juventud, en el año 90. El mismo habló en exclusiva con La Opinión Austral, en un día especial para la familia de “macato”.
El primer escudo de “Macato”
“Yo empecé a jugar en el 90, en las juveniles, quinta división. En aquel entonces había 3 equipos, el Río Gallegos, Macá Tobiano, COSEBA y Duendes, que con el tiempo Duendes y Río Gallegos se desarmaron”, afirmó.
El presidente recordó aquellos partidos en la cancha donde hoy está ADOEM, la cual pertenecía a la Unión Santacruceña de Rugby.
Prácticamente toda su historia, el “Verde” jugó en Río Chico, la chacra de Hispano Americano, hasta 2019: “Siempre jugamos en Río Chico, estábamos a préstamo con el Hispano”, destacó.
Luego en 2019, el club Celeste formó su escuela de rugby y por otras decisiones que no van al caso, Macá Tobiano no pudo continuar desarrollando la actividad ahí.
Esto abrió la posibilidad de que comiencen a trabajar en la sede del club, en un año en el que se encontraron con la pandemia de coronavirus. A pesar de no poder realizar el deporte, fue un año productivo.
El 2020 de Macá Tobiano
“El año pasado para nosotros fue productivo, el no tener entrenamientos con las infantiles, juveniles y primera nos permitió trabajar en nuestra sede, la cual ya terminamos y sólo resta finalizar las canchas”, señaló.
Este año de parate, llevó a que hoy “macato” tenga un gran crecimiento en las infantiles con muchos niños inscriptos que se acercaron al club para practicar y conocer el deporte.
En cuanto a la sede: “Avanzamos por obras de Vialidad Provincial, y tenemos que bajar el terreno un metro. Lo que nos resta es hacer el sistema de riego, traer tierra negra y ahí ya quedaría habilitado para hacer dos canchas de césped, que nos llevará un trabajo de un año”, señaló a LOA.
Bajo esta realidad que tiene el club de rugby de la ciudad capital, a fin de 2021, e inicios del 2022, Macá Tobiano contará con dos canchas de césped donde hará local cada sábado de rugby.
Valores y familia
Compañerismo, no discriminar, respeto, cumplir, solidaridad y la amistad son algunos de los valores que transmiten los dirigentes de “macato” y los propios entrenadores, quienes son los encargados de llevar esto a los niños que recién comienzan.
Ellas también juegan: el plantel de rugby femenino.
La familia es importante en el club, ya que en muchos casos el padre lleva a sus hijos a entrenar o por lo menos coopera con la comida de los sábados: “Las descendencias van quedando dentro del club, hoy mi hijo tiene 14 y juega en las juveniles, hoy tenemos muchos papás que trabajan en el club, hacen banquetas, chocolatadas y meriendas para los chicos. Esto siempre fue así”, destacó Gallardo. A su vez cerró con: “En el club tenemos una formación que va más allá de lo deportivo”, finalizó.
En el club tenemos una formación que va más allá de lo deportivo
De esta manera, “Macato”, el “Verde”, uno de los equipos históricos del rugby local y provincial, festeja su 33 aniversario, en un contexto difícil, pero entrenándose y preparando lo que será este 2021.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario