La industria pesquera argentina viene de dos años consecutivos de caídas en las exportaciones de los productos de mar, según lo advertido a La Opinión Austral meses atrás desde la Cámara de Armadores Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPECA).

El 2020 estuvo marcado por la paralización de los mercados producto de la expansión del coronavirus. La actividad, históricamente se movió al ritmo del turismo internacional, pero el confinamiento de las personas llevó que los países europeos -de larga tradición turística- perdieran la temporada generando efecto dominó.

En este escenario, ayer inició la zafra del calamar en todo el país. Se trata de un acuerdo alcanzado en el Consejo Federal Pesquero que cuenta con el apoyo del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP).

El intendente de Puerto Deseado, Gustavo González, se mostró optimista que la actual, sea “una gran temporada”. Además, en diálogo con La Opinión Austral, dijo estar esperanzado con la llegada de vacunas para inmunizar a los trabajadores.

“Hay una gran expectativa del inicio de la zafra del calamar. Apostamos que sea un buen año y que el puerto sea atractivo en operativa y logística, traduciéndose en una mayor llegada de buques”, manifestó.

 

 

La perspectiva del jefe comunal va en línea con el trabajo desarrollado desde el Gobierno provincial en los últimos años. El Ministerio de Trabajo y la Subsecretaría de Pesca impulsaron mesas de diálogo para arbitrar soluciones que castigaban la productividad y allanar el camino para el presente año.

“Para jugar un rol fundamental como sector productivo y en el sostenimiento de los puestos de trabajo, tiene que desaparecer la conflictividad “, observó.

En 2019, Santa Cruz y Neuquén fueron los dos únicos territorios en Argentina que no perdieron puestos de trabajo mientras la economía caía en un nuevo periodo de estancamiento. Ése año, la pesca fue una de las actividades que se mantuvo estable en la Patagonia.

“Necesitamos que las partes sean justas y claras para una buena temporada”, lanzó González mientras valoró que el Estado continúe garantizando la paz social.
“Este esquema persigue el desarrollo de las comunidades, para alcanzar ese objetivo es necesario bajar la conflictividad que tanto mal nos hizo y generar condiciones, para que seamos un puerto más operativo”.

 

En esta sintonía, en aquella ciudad portuaria apuestan a aprender de los errores cometidos: “A Puerto Deseado hay que darle otra dinámica, hay que dejar de ver cuestiones personales y pensar en lo colectivo”.

Los logros que muestra la terminal marítima no son pocos, de hecho Deseado se ubicó como el tercer puerto del país con mayor descarga según los registros oficiales de enero a agosto pasados con 40.495 toneladas. Solo fue superado por Mar del Plata y Rawson.

Coronavirus

En el año en que estalló la pandemia, CAPECA mostró su preocupación por dos aspectos: El cierre de los mercados producto de la pandemia mundial y el creciente contagio registrado en ultramar a pesar de ajustar los “Protocolo de Bioseguridad”.

“Las medidas de prevención se readecuaron según el contexto epidemiológico”, valoró el intendente de Puerto Deseado a La Opinión Austral e insistió que “la pesca se sostiene como actividad esencial por lo que requerimos a los tripulante que lleguen a nuestra ciudad a cumplir con sus funciones cuente con PCR negativo y que no se aparten de las medidas preventivas”.

Tras explicar que es su obligación bregar por la salud de los vecinos, observó que tiene una “gran expectativa en lo que será el plan de vacunación”, mientras adelantó que en los próximos días. la provincia enviará una nueva partida de las Sputnik V.

“Lo hicimos con el personal de Salud, y la llegada de vacunas renueva las esperanzas, pero necesitamos que todos se comprometan”, concluyó.

 

 

El langostino mejoró las exportaciones

 

Los datos dados a conocer por el “Informe del Panorama Productivo” del Ministerio de Desarrollo Productivo en diciembre del 2020 -ultimas estadísticas disponibles- precisó que el complejo pesquero exportó US$ 168,8 millones en septiembre, 18,9% más que hace un año atrás.

Los registros oficiales dieron cuenta que el volumen comercializado se incrementó 16,9% y totalizó casi 42.000 toneladas.

Las ventas de langostino subieron 29% y alcanzaron las 20.200 toneladas (+24,7%). La comercialización de este producto de mar explicó buena parte del resultado global de las ventas al exterior.

 

España e Italia, principales destinos de los productos de mar.

 

En tanto, las de merluza hubbsi, especie predominante entre los peces, retrocedieron 17,7% por la combinación entre precio y cantidad (-5,8% en toneladas).

Por su parte, las ventas de calamar se mantuvieron en niveles superiores a los habituales en las comparativas anuales: 4.600 toneladas exportadas por US$ 12 millones (+553%).

España incrementó un 71,9% interanual el valor de sus compras y fue el principal destino de las exportaciones en septiembre (US$ 47,8 millones).

 

 

Leé más notas de La Opinión Austral