Un colegio reemplazó a los docentes por Inteligencia Artificial: cómo funciona y qué costo tiene

El uso de la inteligencia artificial (IA) en la educación dio un paso revolucionario con la implementación del Proyecto Sabrewing, un sistema que sustituye la figura del docente por algoritmos de aprendizaje adaptativo. Este modelo permite a los estudiantes avanzar a su propio ritmo con contenidos personalizados y evaluaciones continuas.

El David Game College, un establecimiento privado de Londres, lanzó el proyecto piloto a mediado de 2024 para preparar los exámenes para el título de educación secundaria con inteligencia artificial (IA) en lugar de profesores. Desde entonces dio mucho que hablar.

Cómo funciona la inteligencia artificial en el aula

El Proyecto Sabrewing utiliza algoritmos de IA para analizar el desempeño de cada estudiante y ajustar la enseñanza en función de sus necesidades. Gracias a esta tecnología, los alumnos reciben retroalimentación inmediata y pueden reforzar conocimientos en áreas donde presentan dificultades.

“Este sistema elimina la necesidad de un profesor fijo y permite una interacción constante con plataformas de IA que guían el aprendizaje de manera personalizada”, explican expertos en tecnología educativa.

Las evaluaciones continuas reemplazan los exámenes tradicionales, brindando un seguimiento preciso del progreso de cada alumno.

El establecimiento “controla” cómo los estudiantes aprenden en sus cursos y analiza la “información sobre sus hábitos de aprendizaje”, explica el subdirector de la escuela, John Dalton. “La inteligencia artificial va a transformar la educación. No hay duda al respecto”, añade Dalton.

Hasta el momento, siete estudiantes de secundaria forman parte del proyecto piloto. En una clase pequeña, tienen computadoras para acceder al programa.

Cuánto cuesta implementar IA en la educación

La instalación de este tipo de tecnología supone una inversión inicial considerable. Se estima que la implementación de IA en un aula promedio puede costar entre 20.000 y 50.000 dólares, dependiendo del nivel de sofisticación del sistema.

A largo plazo, sus impulsores aseguran que los costos operativos se reducen, ya que el mantenimiento de los sistemas de IA es más económico que la contratación de personal docente en el tiempo.

Ventajas y desafíos del modelo

El uso de IA en la educación presenta ventajas como:

• Personalización del aprendizaje, adaptándose a cada estudiante.
• Evaluaciones constantes, eliminando la presión de los exámenes tradicionales.
• Mayor accesibilidad, permitiendo que alumnos de diversos entornos accedan a contenidos de calidad.

Sin embargo, también hay preocupaciones sobre:

• Falta de interacción humana, fundamental en la educación emocional y social.
• Posibles sesgos en los algoritmos, que podrían afectar la imparcialidad del aprendizaje.
• Desplazamiento laboral, al reducir la necesidad de docentes en el aula.

¿El futuro de la educación?

La implementación de IA en las aulas abre el debate sobre el rol de la tecnología en la enseñanza. Mientras algunos lo ven como el futuro del aprendizaje, otros advierten sobre los riesgos de depender exclusivamente de la inteligencia artificial.

“El desafío es encontrar el equilibrio entre la tecnología y el papel fundamental del docente humano”, concluyen especialistas en educación.

Qué opinan los estudiantes sobre la inteligencia artificial

Massa Aldalate, una alumna de 15 años, afirma haber sacado una impresión positiva sobre la experiencia.

“Al principio tuve dudas”, dice, sentada en el aula. “Pero es mucho más eficaz si realmente quieres terminar tu trabajo”, añade la adolescente, que afirma que no extraña el aula tradicional.

Respecto a las clases de inglés, una de sus materias favoritas, ella pensaba que en dicha asignatura era necesario tener un profesor delante, pero reconoce que la experiencia “funcionó”.

Uno de los dos principales sindicatos de docentes, National Education Union, acogió con satisfacción el énfasis del gobierno sobre la formación de los profesores en herramientas digitales.

Pero su secretario general, Daniel Kebede, destacó que ese anhelo debe traducirse en “inversiones importantes” para dotar a los establecimientos de las tecnologías necesarias.

Rose Luckin señala que el programa del David Game College es “elitista”, con un coste anual de 27.000 libras (unos 33.700 dólares), equivalente a un aumento de 10.000 libras (unos 12.500 dólares) respecto al coste medio de la matrícula en las escuelas privadas de Reino Unido.

La desigualdad en el acceso a la tecnología también es un “desafío” que plantea la IA, concluye.