En torno a la serie de lamentables hechos de suicidio (o intentos) ocurridos en la provincia en las últimas semanas, y que suele ser un escenario repetitivo a lo largo de los años, resulta oportuno conocer los posibles factores o causales que llevan a las personas a tomar la drástica decisión de quitarse la vida.
El psiquiatra Mauro Morelli habló al respecto esta tarde con Juntos y Re-Sueltos por Radio LU12 AM680 para evacuar dudas sobre este fenómeno social.
En la entrevista, recordó que Santa Cruz ha liderado en un período de 10 a 15 años la tasa de suicidios a nivel nacional: “Hay cuestiones demográficas que hace que Santa Cruz sea un espacio que por mucho tiempo ha tenido índices de suicidio elevado”. No obstante, actualmente no lidera la tabla, “pero siempre se mantiene en los puestos elevados”, señaló.
Respecto de los síntomas en las personas que se quitan la vida, señaló que “no siempre se relaciona a la depresión, que es lo más habitual“, y que los motivos pueden ser muy variados.
Además remarcó que “la persona que va a quitarse la vida no desea matarse a sí mismo, desea matar sus males”.
Asimismo, indicó que es importante desterrar un mito muy arraigado al suicidio: “El que dice que va a quitarse la vida, no lo hace”. Al respecto, afirmó que si una persona lo dice, “hay que tomarlo con absoluta seriedad, y hay que darle el espacio de acercamiento a los lugares terapéuticos especializados en esto“. En esta línea, recomendó el trabajo de los profesionales del Centro de Intervención en Crisis, sito en Ramón y Cajal 545.
Por otra parte, explicó que los suicidios suelen darse principalmente en dos franjas etarias: en adolescentes y adultos jóvenes, de 15 a 25 años aproximadamente; y en la mayores de 70 años, donde muchas veces está relacionado a la jubilación.
Remarcó también que existen tanto factores de riesgo como factores de protección dentro de las tendencias de suicidio.
Entre los factores de riesgo, destacó el tener una red social escasa, tener problemas familiares o escasa comunicación con la familia, vivir solo, y en el caso de esta región, el clima que la caracteriza.
En tanto los factores de protección, enumeró: estar casado/a, tener hijos o personas a cargo, tener mascotas, entre muchas otras.
Sin embargo, explicó que en el caso de los factores de riesgo, no son determinantes, sino que son “factores predisponentes” que pueden desencadenar en el trágico desenlace de un suicidio.
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