Fue cerca del mediodía de ayer cuando testigos dieron aviso a la Policía. Hubo un intenso operativo con Bomberos, Protección Civil y Prefectura, que concluyó con el luctuoso hallazgo del joven sin vida, cerca de las 17 horas. Fue identificado como Facundo Díaz. Lo habrían denunciado por abuso sexual simple en el Jardín 44 donde trabajaba. “Era muy sano, no tenía maldad, lo acusaron de algo que no pasó y no lo pudo sobrellevar”, resumió un amigo de él.

La comunidad riogalleguense se encuentra conmovida por el fallecimiento de un joven profesor de música y futbolista de la Liga de los Barrios de fútbol local. Facundo Díaz, de 27 años, se arrojó a la costanera en horas del mediodía de ayer y fue encontrado sin vida casi cinco horas más tarde, minutos antes de las 17:00, en el marco de un intenso operativo de búsqueda desplegado por la Policía, Bomberos, Protección Civil y Prefectura Naval Argentina.

Búsqueda inmediata

El trabajo de las autoridades inició apenas pasadas las 12:00 cuando algunas personas que se encontraban en la ría local, a la altura del colegio República del Guatemala, dieron aviso a la Policía señalando de la situación. Rápidamente se desplegó la búsqueda del joven, con la utilización de lanchas y buzos.

Los primeros testimonios de las personas que vieron la secuencia marcaron que el hombre ingresó al agua, nadó varios metros pero volvió a la superficie. Luego de unos minutos -según los pescadores que estaban a unos 200 metros- volvió a meterse al agua pero cuando quiso regresar empezó a hacer saltos “como si se hubiera quedado encajado en el barro”. Ahí le perdieron el rastro.

No tenía ropa de neoprene

Si bien en un primer momento trascendió la posibilidad de la utilización de un traje de neoprene, esto finalmente no fue así. El joven se metió al agua con ropa negra, y sin sus zapatillas, las cuales fueron encontradas posteriormente por las autoridades.

El cuerpo fue hallado alrededor de las 17 horas. FOTO: MIRTA VELÁSQUEZ

Se desconoce el motivo que llevó a Díaz a arrojarse a las frías y peligrosas aguas de la ría y es materia de investigación las circunstancias en las que se dio esta temerosa acción. Se presume que atentó contra su propia vida al no poder sobrellevar una falsa acusación en su contra. Según averiguó este medio, lo habrían denunciado por abuso sexual simple: “tocar” a un niño del Jardín 44 donde trabajaba. “Facu era muy sano, no tenía maldad, lo acusaron de algo que no pasó y no lo pudo sobrellevar”, resumió un amigo del entorno íntimo de él.

Hoy habrá acciones por parte de ADOSAC y presencia en el
izamiento. La comisión directiva define en las próximas horas si toma cartas en
el asunto para que se investigue a fondo qué fue lo que llevó a Facundo tomar
tal drástica decisión.

Por jurisdicción la causa se inició en la Comisaría Primera y tomó conocimiento de la misma el Juzgado de Instrucción N° 3, a cargo de la Dra. Rosana Suárez. Tras el hallazgo del cuerpo, a unos 100 metros de donde Díaz fue visto por última vez por los testigos ingresar al agua, la magistrada ordenó la realización de una autopsia. Al cierre de esta edición se preveía el inicio del procedimiento para que, luego de cumplimentar con la pericia ordenada, se de entrega del cuerpo a los familiares. El velatorio de Facundo será hoy en Ilhero, de 08:00 a 15:00 horas.

Condolencias

Tras el lamentable hallazgo del cuerpo de Díaz, muchas
fueron las publicaciones en su memoria que se diseminaron por las redes
sociales. Entre las más conmovedoras se destacan la del Club Deportivo Malvinas
de la AIFB, donde Facundo jugaba al fútbol. También Adosac, el Conservatorio de
Música y la Casa Salesiana (instituciones donde estudió mostraron sus
condolencias.

“Hay cosas en la vida que no se explican, no se entienden
y son injustas. Hoy (por ayer) se fue un amigo un hermano de esta gran familia
que formamos hace cinco años, un grupo de pibes y entre esos estaba Facundo Díaz,
el tanque, como lo apodamos de cariño a una persona buena por dentro y por
fuera. Un muchacho que caía con su guitarra en esas juntadas improvisadas que
salía en la casa de un algún otro compañero del club. El profe de música,
nuestro goleador, nuestro amigo del alma.

Lo escribo desde el conocimiento y la angustia que me produce saber que te fuiste. Golpe duro al corazón de este equipo y club. Hoy está en un lugar que lo cuidarán, y en paz. Q.E.P.D amigo querido. Te amamos y te recordaremos con esa alegría y esos goles que nos hacía emocionar. ¡Hasta siempre Tanque Díaz!”, reza el escrito del club del fútbol barrial.

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