Hace casi un año en el gimnasio del Centro Provincial de Alto Rendimiento Deportivo (CEPARD) de Santa Cruz no se escucha picar la pelota. En los últimos meses, los calendarios deportivos comenzaron a restablecerse y entre ellos el del básquet en silla de ruedas que ya realizó la convocatoria a la primera concentración del 2021. Entre los citados está Luciano Andrade (18) de CRiGal de Río Gallegos.

 

 

“Es muy emocionante en este año plagado de malas noticias. Por fin podemos dar una buena noticia, una muy linda respecto al básquet adaptado”, afirma Juan Soto, presidente del Club Río Gallegos de Lisiados (CRiGal) en diálogo con La Opinión Austral.

 

 

“Luciano es un jugador hecho en el club, ha trabajado mucho, tiene muchos minutos en la Superliga, estamos muy contentos y sabemos que es número puesto para representar al seleccionado argentino en el evento que se realizará en Colombia. Es una noticia muy buena para nosotros, para el ambiente deportivo y para toda la familia de CRiGal que está pasando por un momento difícil, como todo el mundo, encerrado por esta pandemia”, reflexionó.

 

 

Luciano Andrade, jugador de CRiGal, fue citado a concentrar con la Selección Argentina de Básquet en silla de ruedas. FOTO: GENTILEZA L.A.

2015, el año de CRiGal campeón

 

“Luciano Andrade llegó  a CRiGal a fines del 2015, año en que CRiGal sale campeón de la Liga Nacional, donde toda la prensa se rindió un poco a los pies del club, no sólo acá sino en el mundo del básquet sobre silla de ruedas. No es común que un equipo de ciudad pequeña logre un título nacional”, recuerda el entrenador Luciano Dalla Fontana.

 

El entrenador Luciano Dalla Fontana junto a Luciano Andrade en 2015.

 

Luciano tenía 15 años cuando se acercó al CRiGal, el mismo club que integró e impulsó Graciela Di Simone, medallista paralímpica de Heidelberg 1972, y al que también perteneció Vanesa Salcedo, actual integrante de Las Lobas, la Selección Femenina con la que participó en Mundiales, Paranapanamericanos y Paralímpicos de Río 2016. El club santacruceño también cuenta entre sus jugadores a Guillermo Ramírez, quien por su doble nacionalidad, ha integrado el plantel del seleccionado chileno.

 

 

Fue una maestra de Primaria, quien le comentó al entonces adolescente de 15 años, que existía CRiGal. Uno de sus seis hermanos, él es el del medio, lo acompañó al CEPARD y Dalla Fontana lo probó en cancha.

 

 

“Al principio fue difícil ya que yo empecé siendo un chico muy tímido, de pocas palabras”, cuenta Luciano a LOA. “De a poco, a medida que fue pasando el tiempo, los chicos de CRiGal fueron forjando mi carácter, ayudándome a mejorar en todo sentido”, señala.

 

En 2016, el equipo de básquet en silla de ruedas que representó a Santa Cruz se consagró campeón en los Juegos Nacionales Evita. FOTO: GOBIERNO DE SANTA CRUZ

 

 

El entrenador recuerda que Luciano “comenzó de manera fuerte en 2016. Ese año nos animamos a participar de los Juegos Evita, fue un momento muy importante, fue el evento donde él pudo participar de manera continua, jugó muchos partidos. Santa Cruz salió campeón de esos Juegos Evita”.

 

Para Luciano el primer viaje no fue fácil. “Fue un poco incómodo, era la primera vez que visitaba otra provincia pero a medida que fue pasando el tiempo me fui acostumbrando a todo esto”, apunta y agrega que “a mi mamá le costó bastante soltarme para poder hacer mis viajes”.

 

 

 

El equipo de CRiGal Desarrollo.

 

 

En Primera

Los primeros minutos en la Liga Nacional llegaron en 2017. Dalla Fontana admite que en 2016 aún no era momento de que el joven jugador ingresara a la cancha: “Todavía le faltaba fortalecerse, aprender los fundamentos. Ya en 2017 nos animamos a inscribirlo, tuvo oportunidades de juego, jugó muchos partidos, especialmente aquellos en los que CRiGal tenía una ventaja con respecto a los otros rivales. Tuvo muchos minutos en cancha y también participó de los Juegos Evita, salimos segundos, perdimos la final por un punto contra San Juan”.

 

 

Luciano ha practicado otros deportes: tenis de mesa, bádminton y atletismo, en el salió campeón en los Juegos Evita 2019. “Me gustaba jugar pero no me daba el tiempo con el básquet y la escuela”, comenta, ante lo que eligió concentrarse en el deporte de la naranja.

 

 

“2018 fue muy parecido a 2017 pero con él incrementado, con mayor potencia, velocidad y comprensión del juego. En el 2018 participó de los Juegos Evita y realmente descolló porque fue un líder dentro de la cancha, era su tercer Juego Evita, Santa Cruz salió campeón. Él fue muy importante en el andamiaje de ese torneo”, repasa Dalla Fontana.

 

 

 

En 2019, CRiGal recibió a Apri de Uruguay y ganó los dos partidos del Super 6 de la Liga Nacional de Básquet. Foto: Mirta Velasquez/La Opinión Austral

 

 

“En 2019 por una cuestión económica, CRiGal no se pudo reforzar como quería y decidió, siendo el único equipo en todo el país, poner de titular a un Sub 18 en la Superliga, donde juegan los mejores equipos del país, era un básquet muy fuerte, muy dinámico. Creció muchísimo, situación que hizo que el ténico de la Selección Nacional, Juan Domínguez, lo vea. Si bien no tenía una gran participación en ofensiva y con la pelota en mano, él hacía el trabajo de cortina, era muy efectivo, aprendió hacerlo y no es un trabajo fácil”, precisa.

 

 

 

Sin desmerecer los logros en los Juegos Evita, el entrenador sostiene que lo “más importante que le pasó  y no solamente a Luciano sino a Micaela Rosales, Elías Velásquez, fue la creación de la Liga Patagónica porque los chicos se sintieron realmente muy confiados, jugaron con mucha confianza”.

 

 

En este sentido, explica que “CRiGal decidió, y creo que fue una buena decisión, no poner al mejor equipo sino darle posibilidad a los chicos. No solo ganaron la Liga Patagónica sino que crecieron mucho en confianza. Todo es muy importante pero la Liga Patagónica por sobre todas las cosas fue donde Luciano  explotó y mostró todo su talento”.

 

 

2020 sin básquet

La  pandemia por Covid-19 impidió el desarrollo de un calendario deportivo. Luciano pasó el primer año junto a su familia, continuando con sus estudios secundarios y dedicándose al freestyle.

 

 

“Todavía sigo escribiendo canciones y haciendo freestyle, hablando de lo que siento. Cuando necesito expresarme con palabras pero no tengo con quien, lo expreso con la escritura y en varios temas hablo de Dios, lo que logré y el cambio en mí desde que lo acepté en 2015 en adelante”, cuenta hoy con 18 años.

 

 

 

 

Para él la citación fue inesperada. “No me imaginaba algo así, es un orgullo que me hayan convocado” y continúa diciendo que “cuando nos enteramos de todo esto con mi familia, quedamos en shock y emocionados por todo que pasó”.

 

 

“Agradezco a Dios, estoy donde estoy gracias a él y a mi profe Luciano Dalla Fontana por haber confiado en mí y por darme esta gran oportunidad de poder viajar por lo que amo”.

 

 

Del 8 al 11 de febrero, el riogalleguense deberá concentrar en las instalaciones del Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CENARD). Sobre sus expectativas, señala que buscará “seguir aprendiendo de los más grandes”.

 

 

“Estamos felices por esta situación, es justa y sin duda en su categoría es uno de los mejores Sub 21 del país si es que no es el mejor”, sentencia Dalla Fontana sobre la primera, y seguramente no la última, gran noticia para el básquet adaptado de Santa Cruz en este 2021.

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