River Plate mereció largamente la clasificación a la final de la Copa Libertadores ante un muy tibio Palmeiras, al que superó por 2 a 0 luego de caer 3-0 en la ida, pero al que pudo eliminar si el VAR no hubiera intervenido para torcer las decisiones originales del árbitro uruguayo Esteban Ostojich, que había convalidado un gol de Gonzalo Montiel y cobrado un penal a Matías Suárez que lo hubiesen depositado en el Maracaná el 30 de enero.

Palmeiras se pareció mucho más al del campeonato brasileño que al que hasta aquí se había mostrado en la Copa Libertadores.

River también fue otro, por contrapartida, muy distinto al de la Liga Profesional, donde no pudo acceder a la final de la Fase Campeón tras caer como local en cancha de Banfield ante el hoy en día muy modesto Independiente.

 

 

 

El “millonario” salió a “comerse los chicos crudos” desde el primer minuto, acorralando a un rival que se mostró inconsistente, apichonado, apostando al contraataque y la velocidad del mencionado Rony o Gustavo Scarpa.

Toda esa superioridad manifiesta de River con las causas reivindicatorias mencionadas, parecieron enaltecerse ya en el arranque del segundo período, cuando apenas transcurridos seis minutos Gonzalo Montiel marcó el anhelado tercer tanto, pero posteriormente el árbitro uruguayo Esteban Ostojich lo anuló a instancias del VAR.

Y allí empezó “otra noche” para River, porque siguió dominando siempre en la cornisa de convertir el tercer tanto y 20 minutos después de ese gol anulado se volvió a equivocar Rojas como en el partido de ida o ante Boca, pero esta vez cometiendo una infracción que derivó en su segunda tarjeta amarilla y la consecuente expulsión.

La redención por el gol referido y una buena tarea hasta el momento terminó diluyendo lo hecho por el paraguayo, pero River no tuvo mucho tiempo para lamentarse porque a los 30 minutos Matías Suárez cayó en el área brasileña y Ostojich sancionó un penal que iba a rematar Montiel para vengarse del tanto anulado previamente.

Pero el árbitro uruguayo volvió a ser llamado por el VAR y volvió a frustrar al lateral derecho y a todo River, cuando interpretó que no había existido falta sobre el delantero cordobés, otra frustración que hizo estallar de bronca a Gallardo en el banco de suplentes.

Sin embargo con 10 hombres River siguió yendo y dominando a un Palmeiras que en la previa fue respaldado por sus hinchas en las inmediaciones del Allianz Parque y adentro colocó banderas con símbolos que daban cuenta de haber ganado anticipadamente esta edición de la Libertadores.

 

Un flojo conjunto paulista que si hizo algún mérito ya no para llegar a la final, sino para merecer adjudicarse esta semifinal, fue en la fase de grupos o en las dos series anteriores de octavos y cuartos de final, porque hoy estuvo muy lejos de dar la talla.

Por eso no solamente perdió el invicto, no pudo convertir y le hicieron más de un gol y en su propio estadio.

En cambio River resultó todo lo contrario, porque fue dominador de ida y de vuelta, esta noche durante los 90 minutos y en Avellaneda durante tres cuartas partes del partido hasta que se fue expulsado el colombiano Jorge Carrascal.

Con todos esos argumentos, que la final del 30 de enero en el Maracaná de Río de Janeiro tenga a Palmeiras como uno de los protagonistas de la final es tan inmerecido como que River no lo esté, y si fue un fin de ciclo para el “millonario”, lo culminó con el orgullo de un verdadero grande.

Y si mañana Boca se impone muy cerca del escenario de anoche, en la paulista Vila Belmiro, a Santos, seguramente tendrá en la final de este floja Copa Libertadores a un rival con fragilidades como para aprovechar.

El reconocimiento final del entrenador portugués Abel Ferreira a Gallardo en el final del cotejo fue también una aceptación subliminal de la inferioridad de su equipo.

 

 

Síntesis

Palmeiras: Weverton; Marcos Rocha, Gustavo Gómez, Alan Empereur y Matías Viña; Gabriel Menino, Zé Rafael y Danilo; Rony, Luiz Adriano y Gustavo Scarpa. DT: Abel Ferreira.

River Plate: Franco Armani; Paulo Díaz, Roberto Rojas y Javier Pinola; Gonzalo Montiel, Ignacio Fernández, Enzo Pérez, Nicolás De La Cruz y Fabricio Angileri; Matías Suárez y Rafael Santos Borré. DT: Marcelo Gallardo.

Goles en el primer tiempo: 29m. Rojas (R) y 44m. Santos Borré (R).

Cambio en el primer tiempo: 43m. Luan por Gustavo Gómez (P).

Cambios en el segundo tiempo: Al comenzar Breno Lopes por Scarpa (P), 23m. Emerson Santos por Zé Rafael (P), 35m. Benjamín Kuscevic por Rocha (P) y Raphael Veiga por Danilo (P), 41m. Julián Álvarez por De la Cruz (R) y Milton Casco por Angileri (R) y 45m. Federico Girotti por Pinola (R).

Amonestados: Empereur, Danilo, Luan, Rocha y Weverton (P). Paulo Díaz y Santos Borré (R).

Incidencia: 27m. del segundo tiempo expulsado Rojas (R).

Cancha: Allianz Parque (Palmeiras, San Pablo).

Árbitro: Esteban Ostojich (Uruguay).

 

“Lo que hicieron mis jugadores dignifica esta profesión”, destacó DT de River, Gallardo

 

El entrenador de River Plate, Marcelo Gallardo, destacó “lo que hicieron” sus dirigidos en el partido ante Palmeira.

“El balance de este año para River ya lo hice, por la manera en que competimos después de un parate tan prolongado”, comenzó diciendo Gallardo en la breve conferencia de prensa pospartido en el estadio Allianz Parque, del club paulista.

“Mis jugadores me enorgullecieron por lo que hicieron en este partido, por la postura de equipo que adoptaron y que me representa totalmente”, enfatizó.

El técnico riverplatense solamente respondió a una pregunta en la conferencia de prensa y en ella resumió lo que sentía por sus jugadores, pero nada dijo del VAR.

“Me voy muy pleno de aquí, porque momentos como éste son los que a uno le valorizan haber elegido esta profesión de entrenador”, apuntó.

“Por eso solamente me queda agradecerles a mis jugadores, porque lo que hicieron en este partido dignifica a esta profesión. Y le deseo suerte a Palmeiras para la final”, concluyó el “Muñeco”, que inmediatamente se levantó y se fue, sin que se sepa si será para volver.

 

 

 

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