Luego de más de 3.500 días, en el mediodía del viernes la Justicia se expidió sobre un brutal crimen que se registró en la ciudad de El Calafate y que es seguido por La Opinión Austral desde el primer momento.

Se trata del cruento asesinato de Fabián Gutiérrez, el empresario que fue torturado hasta la muerte por un grupo de jóvenes que no pasaban los 21 años de edad y que fue enterrado en el patio de una cabaña de la villa turística a principios de julio de 2020.

La causa tenía como acusados y ahora condenados a reclusión perpetua a Facundo ZaetaFacundo Gómez y Pedro Monzón, quienes actualmente se encuentran detenidos en dependencias policiales de la ciudad en que cometieron el crimen.

En el mediodía de este viernes, el tribunal de la Cámara Oral, conformado por Joaquín CabralJorge Yance y María Alejandra Vila, dio a conocer su veredicto. Un equipo de La Opinión Austral y de LU12 AM680 estuvo presente en el recinto y te cuenta detalles de una jornada donde todos los ojos se posaron sobre el presidente del juicio a la hora de que su fallo tomara estado público.

Así estuvo la sala. Colmada con casi cuarenta personas. (FOTO: JUAN PALACIOS/LA OPINIÓN AUSTRAL)

En una mañana cálida, cerca de las once y media, comenzaron a llegar las partes al edificio ubicado en la calle Malaspina. Algunos seres queridos de Gutiérrez esperaron afuera, mientras que la sala de espera cercana a la mesa de entradas ya había sido “copada” por allegados de uno de los ahora condenados.

Sólo había silencio y algunos murmullos de personas que estaban llegando. Como dato, uno de los que se acercaron al lugar fue el comisario Maximiliano Miño, jefe de la División de Investigaciones (DDI) El Calafate, quien estuvo a cargo de las averiguaciones en la instrucción de la causa y que fue fundamental para establecer las circunstancias en las que se produjo el hecho.

Teresa García, madre de Fabián Gutiérrez, estuvo afuera de la sala hasta que les permitieron el ingreso. Ella había llegado a bordo de una camioneta junto a Carlos Siverino, su esposo, y Valeria Martinovich, su hija. Luego se sentaron cerca de sus abogados querellantes Lucio Giordano y Sandro Levin.

Vila fue la primera de las juezas en entrar al recinto. Desde su lugar, vio cómo los periodistas comenzaban a colmar la parte trasera de la sala como si se tratara de un problemático grupo en edad escolar. Delante de ellos estuvo el resto de los familiares, entre ellos, los de los acusados.

Jorge Yance, Joaquín Cabral y María Alejandra Vila durante la lectura de la sentencia. (FOTO: JUAN PALACIOS/LA OPINIÓN AUSTRAL)

“No lo hicimos viajar porque era innecesario y era un viaje muy largo”, confió una abogada a este periodista cuando fue consultada por la ausencia de Facundo Zaeta, uno de los imputados y ahora sentenciados por el crimen.

Se trataba de Sabrina Mansilla, del estudio de abogados de Carlos Telleldín, que, al igual que Vila, fue una de las primeras en entrar. Como se dijo más arriba, fue una jornada cálida en Río Gallegos con casi 20 grados. La temperatura también se sintió en la pequeña sala que estaba colmada por casi cincuenta personas.

Sólo uno de los acusados viajó desde El Calafate a Río Gallegos para escuchar la sentencia: Pedro Monzón. Él fue uno de los últimos en ingresar. Esposado y con la misma campera tipo Montgomery negra con capucha con forro bordó, entró esposado y con la mirada baja, escoltado por dos agentes del Servicio Penitenciario Provincial (SPP), luego le quitaron los “ganchos” y se sentó al lado de su representante legal, Carolina Scamperti.

La fiscal Verónica Zuvic estuvo junto a Andrea Pérez, jefa de despacho, de un lado y del otro, Lucio Giordano, querellante en la causa, con quien intercambió unas palabras antes del ingreso del resto de los jueces. Casi en paralelo, en ese momento llegó Alejandro Monzón, abogado de Gómez, quien hizo un saludo general y se sentó a la derecha de Mansilla.

Resignación. Pedro Monzón tras conocer la sentencia. (FOTO: JUAN PALACIOS/LA OPINIÓN AUSTRAL)

Eran las 12:04 cuando aparecieron en escena Joaquín Cabral y Jorge Yance. Algunos de los presentes hicieron un amague de levantarse para saludar a los jueces, pero Cabral dijo que no era necesario. Él tomó la parte resolutiva del fallo y explicó a los presentes cómo eran los pasos a seguir. Atentamente, todos quedaron en silencio.

Monzón, cabizbajo, veía al juez y a su abogada. Por su lado, Teresa estaba con la frente en alto mirando atentamente a Cabral. A su lado, Valeria le sostenía fuertemente una de sus manos.

Luego, como se pudo ver en la transmisión en vivo que se encuentra disponible en las redes sociales de LU12 AM680 y www.laopinionaustral.com.ar, llegó el momento de la verdad. “Condenar a Facundo Zaeta, Facundo Ezequiel Gómez Chávez y Pedro Nicolás Monzón de demás circunstancias personales obrantes en la causa a la pena de reclusión perpetua y a los pa…”, en ese momento la alocución del juez fue interrumpida por un grito de Teresa al unísono con su hija. Ambas se fundieron en un abrazo lleno de emoción y congoja. Del otro lado de la sala estaba Monzón, quien al escuchar la sentencia terminó con un gesto adusto, aunque relojeando el abrazo de las familiares de la víctima.

El juez Joaquín Cabral durante su alocución. (FOTO: JUAN PALACIOS/LA OPINIÓN AUSTRAL)

Cabral continuó con su resolución, que daba cuenta de algunos puntos como la apertura de investigaciones complementarias que serán llevadas adelante por pedido de las querellas y las defensas, pero esto ya no importaba para los allegados de Gutiérrez.

Lucio Giordano apretó los puños cuando escuchó el fallo de la Cámara, mientras sonreía mirando a Sandro Levin, su compañero en esta travesía.

Una vez que concluyó la audiencia, a Pedro Monzón nuevamente lo esposaron y salió junto a su abogada por una puerta lateral. Tanto Alejandro Monzón como Mansilla levantaron las cejas y apretaron los labios. Luego se levantaron y se retiraron.

En el medio de la algarabía, Teresa fue abordada por los medios y, aún con lágrimas en los ojos, dijo: “La verdad que estamos muy contentos y satisfechos por el trabajo que se ha hecho, desde los inicios. Sin lo activos que fueron en un principio, sobre todo la parte de la investigación policial, con tanta premura, nos hubiese costado mucho llegar a todo esto”.

Sin embargo, advirtió: “Entiendo que quedan cosas pendientes, como quién trasladó el cuerpo de un sector a otro”.

Pese a este punto, Teresa expresó: “Siento alivio, porque habíamos pedido esta condena. Al menos para cerrar una etapa y concluir un ciclo. Si bien esto no se cierra, porque la perpetua nuestra es para siempre, me han arrebatado un pedazo de mi vida, que no es poco, pero bueno, pagarán por eso. Uno espera siempre que se haga Justicia, en este caso lo hemos logrado”.

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Teresa García siendo entrevistada por LU12 AM680. ((FOTO: JUAN PALACIOS/LA OPINIÓN AUSTRAL))

Por su lado, la fiscal Verónica Zuvic dijo que se mostró “muy conforme con el trabajo de la fiscalía” y recordó que “logramos la calificación que veníamos sosteniendo desde la primera instancia”. Además, señaló que su “pedido de prórroga dejó en claro un mejor estudio, era una responsabilidad enorme” y afirmó que “pudimos lograr hacer una análisis muy minucioso”.

Qué se viene

Como se dijo más arriba, la Cámara dispuso que se hicieran investigaciones complementarias y una de ellas es la de determinar si hubo otro involucrado. Sobre eso, Giordano dijo: “El cuerpo fue trasladado en horas posteriores, después de un tiempo prolongado. ¿Quién trasladó el cuerpo, si los imputados estaban detenidos? Evidentemente hay autores que hay que buscar sobre el encubrimiento”.

Además, comenzaron a correr los tiempos para que las defensas realicen las apelaciones. Sabrina Mansilla habló con este diario y adelantó: “Me voy a enfocar en el encubrimiento, vamos a hacer la denuncia en el Juzgado Federal en Comodoro Py y veremos qué surge de las testimoniales”. Más allá de eso, luego de casi cuatro años, finalmente la Justicia se expidió sobre un brutal hecho que conmocionó a toda Santa Cruz

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