Por Pablo Silva. Especial desde Paris.
“Las finales son para ganarlas y no para jugarlas”, dijo Carlos Alcaraz y cumplió. Por primera vez se consagró campeón en Roland Garros tras derrotar a Alex Zverev y acarició la gloria de París. Exultante y muy locuaz, Carlitos, dialogó con La Opinión Austral en conferencia de prensa y compartió todas sus sensaciones.
El tenista español, que consiguió su tercer Grand Slam en su carrera, se refirió a una declaración que brindó ante las cámaras de Tennistopic en 2015. En una entrevista que ofreció cuando tenía tan solo 12 años, dejó claro cuál era su objetivo: “Ganar Roland Garros”.
“Yo creo que aquel niño se sentiría orgulloso de saber que unos años después iba a conseguir su sueño. Veía este torneo por la tele y decía que algún día lo iba a ganar. Al final, conseguir esas cosas es muy bonito tanto para mi familia, mi gente y para mí”, afirmó al respecto.
“La fortaleza mental”, la clave de la victoria
El joven de 21 años también describió las emociones que experimentó durante el intenso partido en el que venció al alemán por 6-3, 2-6, 5-7, 6-1 y 6-2, en 4 horas y 19 minutos. “Notaba que no estaba encontrando la manera de ponerlo en en problemas a Zverev, sentía que iba a fallar y que me iba a ganar los puntos. El tercer set me ayudó un poco a saber cómo jugar, qué hacer y ha sido ajustado”, comentó Alcaraz.
Seguidamente, aseguró que “gracias a ello, pude encarar un cuarto set un poco más relajado de lo que venía sintiendo en el segundo y tercero. Y venir 4-0 te ayuda a relajarte un poco más. Una vez llegado al quinto set, ya era hora de dejarlo todo, lucharlo hasta que no pudiera más”. Para él, “eso lo que hace un guerrero y yo me considero un guerrero“.
Aseguró que en un encuentro de semejante intensidad y magnitud, “la fortaleza mental gana partidos“. Justamente, consideró que “no hace falta jugar brillante, al final se gana mucho con la cabeza”.
En ese mismo tenor, explicó que “si tú estás flojo mentalmente, aunque juegues el mejor tenis de tu vida, probablemente no pases las adversidades y no puedas ganar un torneo de Grand Slam. Creo que es la asignatura que he aprobado, que tenía pendiente“.
Consultado sobre su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024, que se celebrarán en Francia del 26 de julio al 11 de agosto, comentó que “cuando vuelva aquí tendré flashbacks”. Agregó que después de haber ganado su primer Roland Garros, “creo que va a ser un torneo muy especial para mí”.
Hizo hincapié en su entusiasmo por representar a España y compartir cancha con el prestigioso tenista Rafael Nadal: “Tengo muchas ganas de llevar una medalla a mi país, de jugar unos dobles con mi ídolo Rafa Nadal. Son cosas que no me creeré hasta que se viva el momento. Vamos a pelear las cosas, pero obviamente volver aquí va a ser una sensación especial”.
Alcaraz destacó la importancia crucial de su equipo, al que denomina “familia”, en su trayectoria profesional: “Ha habido momentos en los que he tenido que tomar decisiones muy difíciles de no jugar torneos o de lidiar con la incertidumbre de saber si voy a llegar y de qué modo voy a llegar a los torneos. Pero esto no es un camino que recorro solo”, dijo.
“Al final tengo 21 años y la gente que tengo a mi alrededor ha vivido muchísimo más que yo y han lidiado con este tipo de situaciones muchísimo más que yo. Pedir consejo a ellos y el tomar decisiones complicadas, eso te hace madurar y he aprendido mucho en estas dos semanas de torneo”, valoró.
Carlos, que se consagró “príncipe” en París, siguiendo los pasos del rey Rafael Nadal, dijo sentirse “orgulloso por estar en la historia de nuestro deporte“. En tal aspecto, manifestó que el hecho de que “un chaval de Murcia vaya consiguiendo récords en el tenis, es maravilloso tanto para mí como para mi familia y para toda mi gente. Es algo que vamos a disfrutar y espero que no me lo quiten pronto”.
Para cerrar, expresó ante la prensa: “Soy muy orgulloso de representar a mi bandera. Escuchar el himno español, me hace acordar a todos los que estuvieron animándome. Al final este trofeo es personal, es propio, pero también va para todo el país. Es algo alucinante. No se puede explicar, vivirlo en primera persona es algo maravilloso“.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario