Mauro “Toto” Silva es una de las personas que dan vida a las historias del grupo de teatro comunitario Pompetriyasos, el cual fue convocado para participar en el Festival Internacional de Buenos Aires, con la obra “Callará el silencio, historias de cartón”, donde el joven de Río Gallegos actúa desde su casa.

 

 

El FIBA, que promueve propuestas de teatro, danza, música y artes visuales, comenzó a desarrollarse el 26 de febrero y se extenderá hasta el 7 de marzo. Por el evento pasarán centenares de artistas a través de 180 funciones, algunas presenciales y otras virtuales, lo que permite ver propuestas de elencos de otros países como Alemania, Italia y otros más cercanos como Chile. Desde cualquier parte del mundo se pueden disfrutar las funciones virtuales.

 

 

“Callará el silencio” se transmite por zoom, es enteramente virtual. Se pueden acceder a esta y a otras propuestas desde la página oficial de la ciudad de Buenos Aires (https://disfrutemosba.buenosaires.gob.ar/evento/fiba-2021/5369). La primera función se realizó el sábado 27 y el martes 3 de marzo será su última participación en este ciclo.

 

 

La historia de Toto en los Pompas, como se los conoce habitualmente, comenzó porque la directora del grupo era una de sus profesoras en el instituto de actuación. Conoció el proyecto, le gustó y se unió. “Al principio estuve un tiempo corto porque estaba estudiando y no podía incluirme del todo, pero cuando me recibí les pedí permiso para volver”, y ahí se quedó firme, hasta el momento, relató el joven artista, entrevistado por La Opinión Austral. 

 

 

El grupo del que es partícipe es el resultado de la unión entre los barrios porteños de Pompeya y Parque Patricios. Ellos hacen teatro comunitario, que es por y para la comunidad, un aporte que les hacen los vecinos a cambio de que ellos intenten conservar la historia de su territorio, explicó Toto.

 

 

La faceta comunitaria también está reflejada dentro del elenco. Los artistas tienen entre 8 y más de 70 años de edad y cada uno aporta su esencia y su experiencia de vida dentro de las piezas que crean, los nenes suman una arista más lúdica y fresca y los más viejos su visión histórica.

 

 

Dentro de ese aporte, Mauro intenta representar la esencia riogalleguense entre la predominancia porteña que hay en el grupo. “Desde mi parte yo vengo con mi historia, la experiencia de vida y las enseñanzas que acarreo desde Gallegos, desde las personas de acá”, explicó el actor. Además, según dijo: “Las personas de acá suelen ser más íntimas y también se le da mucha importancia a la comida. Nos juntamos a comer y a estar encerrados pero juntos y es esa esencia lo que trato de aportar en las obras”.

 

 

El actor también detalló que “cuando representa algo suele ser muy distinto de allá porque no tiene esa cuestión porteña que es como muy de ciudad, de pasar mucho tiempo encerrados”. Algo que lo inspira mucho, y trata de poner en juego también, son las postales que nos regala el cielo en esta parte del sur, él es “un gran mirador de cielos”.

 

El trabajo de los Pompas

 

Los Pompetriyasos no sólo son un grupo de teatro sino que abarcan diferentes expresiones artísticas, como música, creación de piezas audiovisuales, fanzines y hasta tienen un podcast de poesía.

 

 

Todos esos elementos se conjugan en una pieza final que surge a través de una consigna grupal que les dan los directores. A partir de allí, van trabajando en los grupos en base a las propuestas que aporta cada integrante para concluir en el producto final.

 

 

El caso de Callará el Silencio fue muy diferente a lo que acostumbraban a hacer, porque pasaron de compartir un espacio y momento juntos a hacer todo de manera virtual.  “Nosotros logramos reinventarnos, apoyarnos y sostenernos, con la plataforma zoom“, declaró Toto.  “Nos reuníamos por video todos los sábados y hablábamos de las cosas que pasaban y que nos pasaban”, agregó.

 

 

La obra por la que los convocaron al FIBA dejó un poco de lado la cuestión identitaria que trabajan, para pasar a hablar de lo que les generó el encierro provocado por la pandemia y cómo lograron encontrar una manera de seguir conectados a pesar de no estar en contacto.

 

 

Para crearla contaron con el asesoramiento  de expertos teatreros como Alfredo Iriarte, que es un mascarero de talla internacional que fabrica máscaras para todo el mundo. Los Pompas utilizan unas de cartón que construyeron en base a las enseñanzas de Iriarte.

 

 

Por otro lado, también estuvieron acompañados por una directora experta en Brecht, que es teatro político y es un elemento que utilizan mucho en para esta obra, para ver desde qué punto se estaban enfocando, comentó Silva.  “Siempre había profesionales a los que llamaban para que no asesoren en distintas etapas del proceso de creación”, detalló.

 

 

El encierro fue lo que llevó a Toto a actuar en Callará desde su casa en Río Gallegos. Él volvió porque en la capital santacruceña iba a estar menos solo de lo que estaba en Buenos Aires. También por este motivo, aclaró el joven, no puede dimensionar la importancia de formar parte de un festival de alcance internacional porque: “En general, los festivales están llenos de gente y es todo mucho más emocionante cuando podés presenciar eso. Yo ahora estuve desde mi casa, en mi pieza a través de un video, entonces sé que soy parte pero no me genera una emoción muy significativa como -Wow, estuve-“.

 

Forjando su carrera

 

No hace muchos años que Mauro se recibió como actor en Andamio 90, pero en ese corto periodo de tiempo, junto a los Pompas tuvieron la oportunidad de realizar un obra en el histórico Cabildo de la ciudad de Buenos Aires.

 

 

Actuar en el Cabildo fue muy emocionante. No hay muchas obras que se hayan desarrollado ahí, no hay un teatro, usamos el patio”, recordó Toto. Y agregó: “Se convocó un montón de gente que estaba por ahí a disfrutar de la función, había una energía muy fuerte en ese predio y poder actuar ahí, para mí, fue algo alucinante”, recalcó el santacruceño.

 

 

Para Silva “el cambio artístico que genera ese grupo me parece muy importante y es algo que yo sueño a futuro traer a Gallegos y poder realizarlo”.  La obra anterior que hicieron funcionaba en una cuadra de Parque Patricios, donde los vecinos les prestaron sus balcones y los dejaron entrar a sus casas para poder desarrollarla.

 

Toto Silva durante la entrevista con LOA

 

Esa zona estaba muy cerrada por miedo a la inseguridad y, según lo que comentaban los habitantes del barrio, anteriormente era un lugar lleno de plantas y de gente conversando en las veredas y con esa propuesta artística pudieron llevar a los vecinos a revivir un poco de esos tiempos y crear otras realidades. Eso es lo que Mauro fantasea implementar el día de mañana en Río Gallegos .

 

 

Para finalizar, el actor comentó que están conversando con algunos miembros de Luces de Bengala para poder crear algo juntos nuevamente. Mientras tanto se lo puede ver en Callará el silencio, historias de cartón en la función del martes 3 de marzo por zoom, siguiendo el link en la página de Ciudad de Buenos Aires.

 

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