Una tortilla al mediodía. Ese fue el último almuerzo que Marcela López comió junto a una de sus hijas, en el mediodía del sábado 22. Desde esa jornada, casi nada se sabe de ella, pese a los rastrillajes que se han realizado en la zona de la costanera, lugar donde fue vista por última vez.

 

Marcela López desapareció el sábado 22 de mayo.

 

 

Reconstruyendo aquella jornada, se pudo establecer que Rocío -una de las hijas de la mujer- le había hecho ese plato. Marcela estaba cuidando a su nieto de siete años, pero este, luego de almorzar, se fue a comer tortas fritas a la casa de adelante, emplazada en la calle Bouchardo al 150 de Río Gallegos.

 

Un helicóptero abocado a la tarea de búsqueda. FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

Cerca de las cuatro de la tarde, Marcela estaba sola. Ella tomó las llaves de su Peugeot 206 y salió a algún lado que, hasta el día de hoy, nadie sabe. Alrededor de las seis, volvió a su casa, dejó el auto abierto -con su teléfono celular, cerca de veinte mil pesos y su documentación- y se fue caminando en dirección a la costanera.

 

La cobertura en el lugar de La Opinión Austral y Radio LU12 AM680. FOTO: JOSÉ SILVA / LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

Luego, lo que se sabe. El paso por el kiosco “El Villano”, el desencuentro con su hija Analía y su caminata hasta la ría, donde se cruzó a otro familiar. Posteriormente, nada. Nadie sabe qué pasó con Marcela. Sólo encontraron su campera y sus zapatillas cerca del muelle fiscal.

 

Los gomones de Bomberos a punto de ser bajados al agua. FOTO: JOSÉ SILVA / LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

 

Por el momento, no hay mayores novedades sobre el caso. Este lunes se cumplieron nueve días de búsqueda. En la jornada hubo nevadas durante la tarde y los rastrillajes no cesaron, pese a las bajas temperaturas que vienen aparejadas con la nieve.
Analía y Rocío llegaron al muelle, lugar donde encontraron las prendas de su madre y “zona cero”, desde donde la Policía hace las labores. Allí también llegó el equipo de La Opinión Austral para dialogar con ellas.

 

FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

 

“Nosotros venimos en forma de apoyo, para mostrarles nuestro agradecimiento a todas las autoridades que desde el día uno están haciendo lo posible para encontrar a mi mamá”, comenzó diciendo Analía, mientras tímidamente aparecía en escena la nieve.
La nevada se mantuvo durante algunas horas en la ciudad capital. Luego se transformó en aguanieve. De igual manera, el frío caló en los huesos y el viento cortó la piel.

 

En un dúplex entre La Opinión Austral y Crónica TV, Analía dejó en claro cuál es la prioridad por estos días en cuanto a su madre y lo que esperan que suceda en el futuro cercano. Además, se refirió al ya famoso video que las muestra a ella y a su madre dentro del kiosco, cuando no se saludaron.

 

 

“Tenemos la esperanza que ella esté caminado perdida, se ha desplegado una serie de búsquedas por la zona, pero no hemos tenido noticias”, comenzó explicando Analía, quien además administra un hotel junto a su madre, con la que aseguró siempre tener buena relación.

 

DESOLACIÓN

 

Sobre ese punto, la hija de Marcela dijo: “Yo quería aclarar que hasta la última hora del viernes, ella se quedó cuidando a mi hija y a su otro nieto, ella me ayudaba desde las cuatro a las siete de la tarde, tomábamos mates todos los días. En el momento del kiosco yo estaba enfocada en las golosinas, no sabemos si ella me ve a mí en el kiosco, pero sí a mi hija en la camioneta”, aseguró sobre el registro fílmico que las muestra a ambas.

 

Los trajes de neoprene son una herramienta fundamental para la búsqueda. FOTO: JOSÉ SILVA / LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

 

Sobre el punto de las cámaras, hay un dato que surgió en las últimas horas. Un metraje muestra a Marcela en la misma zona donde fue vista por última vez: en el monumento al amor, a partir del sistema de seguridad privado con el que cuenta una casa ubicada en la avenida Almirante Brown. De igual manera, no trascendieron mayores detalles.

 

 

El patrullero y un agente mirando el estuario. FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

 

 

En la jornada del lunes comenzó la causa por “persona desaparecida” y empezaron a distribuirse las notificaciones para que el círculo íntimo de Marcela sea citado al Juzgado de Instrucción Nº 2, a cargo de Valeria López Lestón.

 

La familia de Marcela cuenta con el asesoramiento legal de Jorge Trevotich

En tanto, la familia ya consiguió patrocinio legal con el abogado Jorge Trevotich. Sobre este punto, en el dúplex entre Crónica y La Opinión Austral, Analía indicó: “Queremos llegar al fondo de todo, saber qué pasó con mi mamá”.

 

La búsqueda inicia a primera hora. FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

 

Sobre lo que pasó en las últimas horas de Marcela, su hija indicó que “es algo que no podemos entender, queremos ser prudentes, hoy (por ayer) empezó una investigación. Vamos a ir a contra todo, si hay una persona involucrada, dos o tres, queremos saber toda la verdad”, aseguró, sin descartar ninguna hipótesis.

 

FOTO: JOSÉ SILVA / LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

 

Con ese dato, se espera que en las próximas horas comiencen a reconstruirse las últimas horas de Marcela, entender el contexto en el que se encontraba, determinar qué le pasaba, buscar alguna explicación o un indicio.

 

Es algo que no podemos entender, vamos por todo

 

Además de las testimoniales, la familia ya adelantó que pedirán que se periten los celulares de todas las personas.
“Nosotros hasta no sé si podremos llegar a pedir allanamientos”, adelantó Analía, en busca de respuestas para saber qué pasó con su mamá desde la tarde del sábado 22 de mayo hasta hoy.

 

Prefectura poniendo en marcha un gomón mientras policías patrullan la costanera. FOTO: JOSÉ SILVA / LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

La temperatura en Río Gallegos y alrededores durante la mañana del lunes marcó -5º. Ya durante la tarde, la temperatura ascendió a 1º, pero se registraron nevadas desde las quince hasta que el sol se escondió por el oeste.

 

Efectivos de la Policía recorriendo la costa. FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL.

 

De igual manera, el esfuerzo por parte de las fuerzas de seguridad locales, provinciales y federales continúa inclaudicable. En horas de la mañana, los vecinos de la zona de la costanera pudieron ver el gran despliegue, que contó con helicópteros y los gomones que se adentraron en las gélidas aguas de la costanera.

 

 

Ya cuando la ciudad comenzó a cubrirse de blanco, continuaron los rastrillajes a todo lo largo de la ría, desde la zona de granja del obispado hasta el Vaciadero Municipal, pero siempre con los mismos resultados que se vienen registrando hace más de una semana: nada.

 

FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL.

“Mi mamá se había anotado en clases de tango, ahora justo antes de las restricciones se había anotado en folklore y estaba en un curso de corte y confección. Ella era activa, siempre andaba por la costanera. Se quedaba hablando con la gente de la escuela de kayak, esos vecinos que ahora también la buscan”, cerró Analía.

 

 

Leé más notas de La Opinión Austral