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En un caso que conmocionó a la tranquila localidad turística de El Calafate, Elías Farías e Ivon Verón, una pareja y padres de una niña pequeña, fueron condenados a cuatro años de prisión efectiva como coautores del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Todo comenzó el 30 de mayo de 2023, cuando una denuncia anónima llegó a manos del Escuadrón 42 de Gendarmería Nacional. La alerta señalaba presuntas actividades de venta de estupefacientes en el departamento N° 4 del complejo de calle Los Álamos al 3000, en el barrio Manantiales de la villa turística. La denuncia no solo mencionaba la comercialización de drogas, sino también un inusualmente alto consumo eléctrico, una señal compatible con el cultivo de marihuana, y hacía referencia a antecedentes de allanamientos previos en el lugar.
Como dato, los agentes notaron que había un alto consumo de electricidad, lo que hizo pensar que podrían estar cultivando marihuana.
Fue en este punto donde la labor de campo se tornó crucial. Se realizaron tareas de vigilancia discreta sobre el domicilio denunciado, revelando un patrón de comportamiento que reforzaba las sospechas: constantes visitas breves de múltiples personas, tanto a pie como en vehículos, muchas de las cuales realizaban intercambios rápidos de objetos, incluso a través de la ventana.
El Allanamiento
Con los elementos de prueba reunidos, el 25 de noviembre de 2023, se dispuso el allanamiento del domicilio. El resultado fue positivo y contundente. Dentro de la vivienda, las autoridades encontraron sustancias estupefacientes, incluyendo cocaína fraccionada y acondicionada para su distribución, junto con una suma considerable de dinero en efectivo. Parte de la droga estaba oculta en una mochila, junto con un trozo compacto de cocaína con un peso cercano a los 250 gramos.
En el momento del procedimiento, tanto Verón como Farías, quien recientemente había sido intervenido quirúrgicamente, se encontraban en el lugar. Farías, en un momento clave de la investigación, reconoció que las sustancias le pertenecían.
Reconocimiento y Condena
El proceso culminó con un acuerdo de juicio abreviado, presentado por las partes y la calificación jurídica, aceptada por los imputados con el debido asesoramiento de su defensora pública oficial, Leticia Diez, se mantuvo: coautores penalmente responsables del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
El Tribunal, bajo la integración unipersonal de Luis Alberto Gimenez, evaluó la razonabilidad del acuerdo, verificando que el reconocimiento de los hechos por parte de los imputados tuviera anclaje en las pruebas recabadas durante la etapa preparatoria.
La Sentencia
En definitiva, Farías y Verón fueron condenados a la pena acordada de cuatro años de cumplimiento efectivo. Un aspecto sensible y que mereció especial consideración del Tribunal fue la situación de Verón. Dada su condición de progenitora de una niña menor de tres años (hija que comparte con Farías), y con el fin de salvaguardar el interés superior de la menor y asegurar su adecuado cuidado, se resolvió su prisión domiciliaria.
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