Por haber viajado, acorde a las disposiciones sanitarias, los tres hijos y Marcela, la mujer de Ricardo, deben cumplir la cuarentena de 14 días.

 

 

La situación es compleja ya que ambos están sin trabajo y planifican quedarse a vivir en Santa Cruz. Dialogaron con La Opinión Austral para contar el panorama de situación.

 

 

 

Ricardo describió que llegaron hace cinco días y que no van a poder salir para cumplir el aislamiento correspondiente, complicando aún más la situación.

 

 

 

“Vine con mis dos nenas de 10 y 12 y mi hijo varón de 15 años, además de mi señora. Ahora no tenemos ni para comer, estamos en la lucha. Hasta fin de mes no vamos a poder salir porque tenemos que cumplir con la cuarentena”, relató el padre de familia.

 

 

 

 

Actualmente, están viviendo en la casa de la madre de Ricardo, con lo cual no pagan alquiler. Además, contó que toda la familia se encuentra en perfecto estado de salud. Desde el Ministerio de Desarrollo Social se encuentran abordando la situación, dijo el hombre.

 

 

 

 

“Nos van a traer colchones, pero no podemos generar plata porque no tenemos trabajo fijo tampoco y necesitamos comida”, agregó.
Ricardo contó que necesitan de la ayuda de la comunidad: “Si nos dan un mano con víveres se los agradeceríamos mucho, más por las criaturas que tenemos, porque lo poco que trajimos ya no nos quedó nada”.

 

 

 

Algunos vecinos se acercaron al domicilio, pero aun necesitan de víveres que los ayuden a subsistir los próximos días. “Hoy nos ayudó una señora que nos trajo unas facturas, así que por lo menos los chicos pudieron tener una merienda”, agregó.

 

 

 

Ricardo contó que, más allá de haber llegado a la ciudad por el fallecimiento de su madre, se vinieron a vivir a Río Gallegos en busca de mejores oportunidades.

 

 

 

“La verdad nos vinimos a vivir porque por lo menos acá tenemos el techo que heredé de mi mamá, allá estaba alquilando y estaba muy mal la mano con el tema de la pandemia que está matando a gente más por el hambre que por el virus”, aseguró.

 

 

 

“A probar suerte”

Ricardo explicó que en Puerto Madryn se dedicaba a vender pan en la calle y su mujer hacía peluquería a domicilio. Sin embargo, indicó que la situación económica que pasaban no era buena.

 

 

 

“No eran buenos trabajos, ya veníamos luchándola así que ahora ya nos quedamos acá. Vamos a probar suerte a ver si después de que pase esto podemos, aunque sea uno de los dos, entrar a trabajar en algún lado y poder salir adelante”, se esperanzó.

 

 

 

 

Ricardo aseguró, por último, que lo que más le “interesa” ahora es “pasar esta cuarentena, que nos faltan varios días, y no pasarnos de hambre, tenemos criaturas no es que somos mi señora y yo no más, que nos aguantamos”.

EN ESTA NOTA COVID familia ricardo-haro

Leé más notas de La Opinión Austral