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La tranquilidad de El Calafate se vio sacudida en los últimos días por una serie de delitos contra la propiedad que activaron el operativo de la División de Investigaciones (DDI) de la villa turística.

Tras una semana de intensas tareas de inteligencia, el Servicio Externo recabó pruebas suficientes para solicitar allanamientos en cuatro inmuebles, tres de ellos en el barrio Terrazas Manantiales —dos ubicados en un complejo ya intervenido previamente por narcotráfico— y uno en el Barrio Cerro Calafate.

De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de fuentes consultadas, los resultados no se hicieron esperar: entre los elementos secuestrados destacan dos televisores, una PlayStation 5municiones calibre 9mm, un Volkswagen Gol Trend y hasta un sistema de monitoreo con cámaras, lo que sugiere un modus operandi sofisticado. Fue un golpe contundente a una estructura que operaba con logística propia.

Entre los tres detenidos, sobresale el caso de uno de los implicados, un hombre con “frondoso prontuario” que, pese a cumplir prisión domiciliaria por causas federales, habría seguido delinquiendo. La colaboración entre la División de Investigaciones y la Comisaría Segunda fue clave para el éxito del operativo, según destacaron las autoridades.

Pero la pesquisa no terminó ahí. En una segunda fase, allanaron dos propiedades más: una en la intersección de calle Biguá y Avenida Perón, donde se incautó otro televisor, y otra en Prefectura Naval al 1700, que no arrojó resultados. Todos los bienes recuperados fueron remitidos a la Justicia para su identificación y eventual restitución a las víctimas

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