El femicida de Antonella Aybar había consumido cocaína y marihuana antes de cometer el crimen

Con el pasar de los días van saliendo a la luz más detalles escalofriantes relacionados al femicidio de Antonella Aybar (25). La joven fue asesinada por su novio, Nicolás Moyano (23), el pasado 16 de mayo, en una vivienda que se encuentra en la esquina de la calle Escocia de la localidad de Caleta Olivia. Una provincia entera pide justicia por la joven, quien se convirtió en la primera víctima de una muerte por violencia de género en el 2025. El femicida se suicidó tras cometer el crimen.

El 3 de junio, día en que se conmemoran las marchas del movimiento feminista “Ni Una Menos“, la comunidad caletense salió a las calles y pidió justicia por el caso. La Opinión Austral fue testigo del momento, en el que exigieron que no haya otra Antonella en la ciudad y que paguen los responsables de haber permitido su muerte: “como la policía, que no entró a tiempo a la casa“, dijo Mario Aybar, padre de la joven. La familia y las amigas de la víctima encabezaron la manifestación en la que participó una gran cantidad de personas.

Violento femicidio

El resultado de la autopsia que se realizó al cuerpo de la joven emprendedora reveló que tuvo una “agonía lenta” antes de fallecer por “paro cardiorrespiratorio traumático“, debido a shock hipovolémico por múltiples lesiones de arma blanca. Antonella fue ferozmente golpeada y, además de ser apuñalada, fue asfixiada. Aybar, el padre, manifestó a los medios locales que “es muy cruel la forma en que le quitaron la vida“, apagando sus sueños a futuro.

El médico forense, Leonardo Aybar, detalló en informe que la joven tenía signos de haberse defendido durante el ataque de su pareja. Antonella fue atacada con dos cuchillos y sufrió lesiones en “cráneo, rostro, cuello y tórax superior”, además de ser asfixiada por dos minutos. Moyano actuó con saña y odio hacia su pareja y, según sugirió el médico, habría estado bajo “el síndrome psiquiátrico de Amok“, caracterizado por episodios repentinos y extremos de violencia incontrolada.

Asimismo, el papá de Antonella informó que, según pudo conocer tras ver los resultados de los estudios toxicológicos a Moyano, el femicida “había consumido marihuana y cocaína” antes de cometer el crimen, “mientras mi hija no tenía ninguna sustancia en el cuerpo“. El hombre agradeció al juez Gabriel Contreras, titular del Juzgado de Instrucción Penal N° 2, desde dónde se lleva a cabo la investigación, por recibirlo y mantenerlo al tanto del avance de la causa.

Investigación a policías

Por otro lado, dio a conocer que estuvo reunido con personal del Ministerio de Seguridad y con el jefe de Gabinete de Ministros, Daniel Álvarez, ocasión en la que le comentaron que “iban a tomar medidas con la gente que no hizo bien su trabajo, porque para eso están, para cuidar y realmente no hicieron su trabajo como lo debían hacer”. Es necesario recordar que el ministro Pedro Pródromos le había solicitado a la Jefatura de Policía que se de intervención a Asuntos Internos.

Asimismo, sobre la investigación de Asuntos Internos a la Policía de Santa Cruz, debido a la intervención que se llevó a cabo en la vivienda del barrio 13 de Diciembre, comentó que le informaron que “varios policías fueron separados de sus cargos“. Se trata de una investigación de las actuaciones de los uniformados de la Comisaría Cuarta, quienes acudieron a la vivienda y no ingresaron a tiempo, a pesar que la madre del femicida les había advertido que su nuera y su hijo estaban en el interior.

El pedido de justicia

Mario Aybar estuvo presente en la conferencia de prensa que se realizó el lunes, en la vigilia que se llevó a cabo esa misma noche y en la marcha por el “Ni Una Menos” que se hizo el martes pasado. En ese marco, se comprometió a seguir reclamando que se sepa toda la verdad. “Estamos pidiendo lo que corresponde, justicia por el caso de mi hija, porque tenemos un par de dudas todavía. Yo sé que mi hija desde donde está, me está dando la fortaleza para estar de pie”.

El padre de Antonella volvió apuntar contra la madre del femicida, la docente Stella Maris Ganga, a quién “no le creo mucho” y le pidió nuevamente que “cuando el señor juez (Gabriel Contreras) la llame a declarar, vaya y diga toda la verdad, que se ponga la mano en el corazón como madre, como mujer y diga la verdad porque yo tengo muchísimas duda y no soy solo yo, hay mucha gente que piensa y duda como yo, en algo está mintiendo”, indicó a medios locales.

Las amigas de Antonella se habían enterado de un episodio de violencia que sufrió la joven en el 2019 y, después de intentar intervenir, hubo cierto distanciamiento de la víctima a sus amigas de la secundaria. El grupo de jóvenes también estuvo presente en la marcha, ocasión en la que se leyó una carta en la que pidieron justicia por su amiga y le hicieron un importante pedido a los vecinos y vecinas de la ciudad de El Gorosito: “si estás viviendo una situación de violencia habla, por favor“.